JORGE G. HERRERA
2 de Julio de 2018
Quienes creían que con solo el paraguas del FMI se apaciguarían los ánimos han pecado de cierta ingenuidad, por lo menos a la vista de los recientes acontecimientos. Es cierto que Argentina no se ha quedado atrás e hizo su aporte al desconcierto general. Pero es el contexto internacional el que sigue emitiendo señales de alarma sobre los mercados emergentes, de los cuales Argentina es uno más.