16 ago 2010

Sobre REVANCHAS Y MESIANISMOS....

Es evidente que toda explicacion que da quien
tuvo a su cargo la responsabilidad de decidir que
rumbo habia que darle a la vapuleada ¨legalidad¨
surgida tras el golpe militar extremista, trate a la
distancia, con el silencio encubridor de medios
amigos y la complicidad de un sistema judicial
que pareciera no haber existido en esos años por
demas oprobiosos, un sentido ¨etico y de justicia¨
a leyes y acciones que intentan encubrir aberrantes
delitos considerados como de lesa humanidad,
imprescriptibles, como lo son la desaparicion
forzada, las torturas y el asesinato por el simple
hecho de pensar diferente.
Porque el ¨dotor¨ Julio Maria Sanguinetti, hombre
de leyes -torcidas pero leyes al fin- pareciera
desconocer el fin primario sobre el que se asienta
la administracion de alguna justicia, que en el caso
de nosotros los comunes, siempre tiene un curso
zigzagueante, escabroso y cuesta arriba y alcanza
su maximo valor si los delincuentes son economicos
o defienden determinados intereses,que responden a
ideologias afines a ¨la libre empresa y el capital¨ y
olvidado el sentido de igualdad, han servido para
dejar en libertad a torturadores y gansters economicos,
cuya presuncion de inocencia, llevada a limites extremos
nos ha acarreado incluso, problemas internacionales.
A raiz de un articulo, aparecido en EL PAIS, donde
llama revanchistas y mesianicos a quienes pretendemos
justicia, desde el lugar comun de un ciudadano al que
todavia la ¨justicia¨ uruguaya no le ha dado ninguna
explicacion sobre el paradero de FELIX SEBASTIAN
ORTIZ, detenido-desaparecido durante la dictadura,
me permito desde mi desilusion, plantearle algunas
reflexiones con el animo de darle a las instituciones
del pais, la credibilidad que el partido del cual el
señor es dirigente, y esa justicia que invoca, le ha
negado a la historia, a la VERDAD y la JUSTICIA.
Cuando este señor habla de la mayoria parlamentaria
del 86, omite decir que la formaban muchos de los que
apoyaron los hecho por los militares golpistas, se plega-
ron a la amenaza y extorsion de los ¨comandantes¨ y
salieron -campaña mediatica incluida- a desinformar
a la opinion publica, ya de por si ¨aleccionada¨ con
las bondades de la pacificacion, tras el fracaso econo-
mico ,politico y social de una experiencia de la que
muchos correligionarios blancos y colorados dieron
aval, respaldo, ideas y de la que hoy nadie se hace cargo.
El referendum del que hace mencion, vista la desinformacion
existente, NO EXIME A LA JUSTICIA de la investigacion
de delitos de ese tenor, porque ninguna legislacion del
mundo puede aprobar la tortura o la desaparicion.
Pero hay una frase transcripta en forma original que
pinta de cuerpo y alma el sentido de justicia de este
señor
¨¿Cuál es la diferencia moral entre matar a un guerrillero o asesinar a un civil como el Prof. Acosta Lara? ¿Cuál es la pretendida superioridad ética de secuestrar y torturar a un empresario, juzgado por un tribunal revolucionario sin garantía alguna, sobre la aprehensión y maltrato de un presunto miembro de una organización delictiva?¨http://www.elpais.com.uy/10/08/15/predit_508432.asp
Hablar de diferencia moral cuando lo que esta en juego
es la vida humana,es deleznable.Invocar a la etica desde
esta vision -sin justificar el accionar guerrillero- es
justificar la violacion del orden juridico DESDE EL
ESTADO que deberia ser el garante de que ello no ocurra.
Y si ademas como el dice, este es presunto  el hecho
adquiere una gravedad rayana a la apologia del delito,
en alguien que deberia velar por la aplicacion de las
leyes.Las heridas abiertas a la que la justicia no les
llega, son esas razones por las que muchos ciudadanos
como yo, luego de muchisimos años de esperar respuestas
sentimos que con gente como usted, nunca llegaremos
a la verdad, no conoceremos esa justicia que usted dice
defender y estaremos atentos a no ser presuntos, porque
de lo contrario, esta justificado que nos maten y nos
torturen o nos desaparezcan, siempre en nombre de la
libertad y la libre empresa.
Aclaracion, lo resaltado es una obra de justicia.