EL ENORME DAÑO YA ESTA HECHO
"Jamás hubo fraude": Lo que arroja la comparación entre los resultados objetados por la OEA en 2019 y los obtenidos ahora en Bolivia21 oct 2020
Manuel González Sanz, jefe de la misión de observación de la OEA para las elecciones en Bolivia, el 23 de octubre de 2019.David Mercado / Reuters
Una comparación entre la votación en los centros objetados por la Organización de Estados Americanos (OEA) -en su informe de 2019-, y los resultados obtenidos en esos mismos recintos en las elecciones del domingo pasado, ha arrojado que el Movimiento al Socialismo (MAS) tiene la misma o mayor cantidad de votos que en los comicios donde resultó ganador Evo Morales.
Alfredo Serrano, director del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag), afirma que "jamás hubo fraude" al analizar las supuestas irregularidades encontradas por la OEA en 226 actas de esos centros de votación. El informe de la organización, que arrojó supuestas irregularidades y manipulaciones hace un año, fue confrontado con el reciente escrutinio.
En una tabla publicada en su cuenta de Twitter, Serrano presentó la comparación de las votaciones en los recintos de votación cuestionados, ubicados en los departamentos de Potosí, Cochabamba, Chuquisaca, Santa Cruz, Oruro y La Paz .
Allí se observa que en casi la totalidad de los centros electorales la votación a favor del MAS en 2020 fue mayor que en la jornada de hace un año. El promedio de votos de 2019 a favor del partido fundado por Morales fue de 91,6 %, mientras que en los comicios donde Luis Arce sería el ganador de la Presidencia, el respaldo crece hasta el 97 % .
Hasta el momento, con 88,42 % de actas computadas por el Órgano Electoral Plurinacional (OEP), Arce habría obtenido 54,46 % de la votación, mientras que su contenedor más cercano, Carlos Mesa, tiene 29,30 % de las boletas, lo que evitaría ir a una segunda vuelta electoral.
Una comparación entre la votación en los centros objetados por la Organización de Estados Americanos (OEA) -en su informe de 2019-, y los resultados obtenidos en esos mismos recintos en las elecciones del domingo pasado, ha arrojado que el Movimiento al Socialismo (MAS) tiene la misma o mayor cantidad de votos que en los comicios donde resultó ganador Evo Morales.
Alfredo Serrano, director del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag), afirma que "jamás hubo fraude" al analizar las supuestas irregularidades encontradas por la OEA en 226 actas de esos centros de votación. El informe de la organización, que arrojó supuestas irregularidades y manipulaciones hace un año, fue confrontado con el reciente escrutinio.
En una tabla publicada en su cuenta de Twitter, Serrano presentó la comparación de las votaciones en los recintos de votación cuestionados, ubicados en los departamentos de Potosí, Cochabamba, Chuquisaca, Santa Cruz, Oruro y La Paz .
Allí se observa que en casi la totalidad de los centros electorales la votación a favor del MAS en 2020 fue mayor que en la jornada de hace un año. El promedio de votos de 2019 a favor del partido fundado por Morales fue de 91,6 %, mientras que en los comicios donde Luis Arce sería el ganador de la Presidencia, el respaldo crece hasta el 97 % .
Hasta el momento, con 88,42 % de actas computadas por el Órgano Electoral Plurinacional (OEP), Arce habría obtenido 54,46 % de la votación, mientras que su contenedor más cercano, Carlos Mesa, tiene 29,30 % de las boletas, lo que evitaría ir a una segunda vuelta electoral.
¿Qué había dicho la OEA?
El grupo de auditores del organismo regional había determinado que de una muestra de 4.692 actas, que fueron revisadas para hallar "posibles adulteraciones o manipulaciones", un total de 226 (correspondientes a 86 centros de votación de 47 municipios bolivianos) presentaban "irregularidades".
Las supuestas "irregularidades" encontradas por ese organismo fueron el pretexto de la organización para sugerir que había ocurrido un "fraude" en los comicios, lo que provocó manifestaciones violentas de la oposición, que culminaron con el golpe de Estado contra Morales y la imposición de un Gobierno de facto de ultraderecha, presidido por Jeanine Áñez.
El grupo de auditores del organismo regional había determinado que de una muestra de 4.692 actas, que fueron revisadas para hallar "posibles adulteraciones o manipulaciones", un total de 226 (correspondientes a 86 centros de votación de 47 municipios bolivianos) presentaban "irregularidades".
Las supuestas "irregularidades" encontradas por ese organismo fueron el pretexto de la organización para sugerir que había ocurrido un "fraude" en los comicios, lo que provocó manifestaciones violentas de la oposición, que culminaron con el golpe de Estado contra Morales y la imposición de un Gobierno de facto de ultraderecha, presidido por Jeanine Áñez.