15 feb 2021

LAS LACRAS DEL SISTEMA

ARGENTINA: HEREDERO DE MARTINEZ DE HOZ
Murió a los 90 años el expresidente Carlos Saúl Menem

Por Melisa Molina
15 de febrero de 2021




A las ocho de la noche, por avenida Rivadavia, llegó al Congreso de la Nación el coche fúnebre con el cuerpo de Carlos Saúl Menem. Imagen: NA



Durante su gestión, el riojano se encargó de desmantelar lo que quedaba del estado de bienestar cimentado durante el peronismo y lo hizo a través de las privatizaciones del servicio de agua, gas y electricidad, de las comunicaciones y medios públicos, de los ferrocarriles y de las jubilaciones. Estás últimas a través del sistema de las AFJP, que dejó sin ingreso a millones de personas mayores.
La venta a precio vil de las empresas estatales se dio de forma paralela a la toma de deuda externa. De este modo pudo mantener la paridad cambiaria del uno a uno, de la mano de su ministro de Economía, Domingo Cavallo --entre 1991 y 1996--, que provocó la quiebra de la pequeña y mediana industria nacional, y favoreció a los capitales transnacionales concentrados. Además, indultó a los jefes de la dictadura que habían sido condenados y procesados por las más graves violaciones a los derechos humanos de la historia argentina.

A las ocho de la noche, por avenida Rivadavia, llegó al Congreso de la Nación el coche fúnebre con el cuerpo del expresidente Carlos Saúl Menem, que falleció este domingo luego de ser internado por una infección urinaria.En el Salón Azul del Senado, el expresidente fue despedido con todos los honores que corresponden a un ex mandatario. Recibieron el féretro Cristina Kirchner y Zulema Yoma y más tarde se hizo presente Alberto Fernández. El velorio fue a cajón cerrado. Las banderas argentina y riojana y una camiseta de River cubrían la superficie de madera. El líder riojano será enterrado en el cementerio islámico de San Justo, junto a su hijo Carlos Menem Jr.

Menem lo hizo: un legado de miseria neoliberal

Evocando la figura de Facundo Quiroga, con la promesa de impulsar un “salariazo” y una “revolución productiva”, Menem se convirtió en uno de los máximos ejecutores de las políticas neoliberales en Argentina que dejaron al país endeudado, privatizado y con índices atroces de pobreza. Durante sus dos gobiernos, se ocupó de completar la tarea, en el plano económico, de lo que había empezado la última dictadura a través del ministro José Alfredo Martínez de Hoz.

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La asunción de la primera presidencia de Menem fue prematura. Se dio un 8 de julio de 1998, luego de la corrida hiperinflacinaria que terminó de manera anticipada con el gobierno de Raúl Alfonsín. Durante su gestión, el riojano se encargó de desmantelar lo que quedaba del estado de bienestar cimentado durante el peronismo y lo hizo a través de las privatizaciones del servicio de agua, gas y electricidad, de las comunicaciones y medios públicos, de los ferrocarriles y de las jubilaciones. Estás últimas a través del sistema de las AFJP, que dejó sin ingreso a millones de personas mayores.

La venta a precio vil de las empresas estatales se dio de forma paralela a la toma de deuda externa. De este modo pudo mantener la paridad cambiaria del uno a uno, de la mano de su ministro de Economía, Domingo Cavallo --entre 1991 y 1996--, que provocó la quiebra de la pequeña y mediana industria nacional, y favoreció a los capitales transnacionales concentrados. Además, indultó a los jefes de la dictadura que habían sido condenados y procesados por las más graves violaciones a los derechos humanos de la historia argentina.

Uno de los lugares que quedó más marcado por la corrupción y la desidia del menemismo fue la ciudad cordobesa de Río Tercero, cuyas autoridades anunciaron que en la ciudad no cumplirán con el duelo nacional. Allí, en 1995 se produjo la explosión de la fábrica militar de Río Tercero, que dejó siete muertos, centenares de heridos y la ciudad destruida. 

Por esta causa, Menem no fue condenado a diferencia de cuatro directivos de Fabricaciones Militares, y tampoco lo fue por otras en las que fue acusado, como la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia -por la que pasó una breve temporada detenido-, ni por las supuestas coimas negociadas en el plan de privatizaciones. 

El exmandatario solo fue condenado por el pago de sobresueldos a funcionarios de su gobierno y por la venta del predio de Palermo a la Sociedad Rural, en 1991.