9 jul 2021

LOS QUE TIRAN LA PIEDRA

Un estadounidense está entre los seis detenidos por el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse

8 jul 2021 




La Policía de Haití traslada a dos detenidos por el asesinato del presidente Jovenel MoïseFoto: Joseph Odelyn / AP

El miércoles por la tarde, las autoridades haitianas abatieron a cuatro de los presuntos atacantes y detuvieron a otros dos supuestos participantes en el asalto armado.
El Gobierno de Haití informó este jueves que hay un sujeto con nacionalidad estadounidense entre las seis personas detenidas por el asesinato del presidente de la nación, Jovenel Moïse, quien fue ultimado el miércoles en su residencia de Puerto Príncipe.

El primer ministro interino, Claude Joseph, brindó una conferencia de prensa junto al director de la Policía Nacional, Léon Charles, quien el miércoles en la tarde informó que las autoridades abatieron a cuatro de los presuntos atacantes y detuvieron a otros dos supuestos participantes en el asalto armado.

En el mensaje transmitido este jueves en cadena nacional, en donde se actualizó el reporte del día anterior, el Gobierno interino de Haití detalló que la Policía capturó a seis de los hombres que asesinaron a Moïse, mató a siete cómplices en un enfrentamiento y continúa en la búsqueda de los autores intelectuales del magnicidio.

Entre los seis sujetos detenidos estaría un sujeto llamado James Solages, quien cuenta con doble nacionalidad (estadounidense y haitiana), según confirmó el ministro de Elecciones de Haití, Mathias Pierre, a la agencia de noticias AP.

Además de Solages, habría otro estadounidense en el grupo de sospechosos del crimen que fueron detenidos por la Policía, según fuentes del Gobierno haitiano consultadas por la citada agencia. No obstante, esta información no ha sido confirmada de manera oficial.

Magnicidio

El miércoles en la madrugada, un grupo de individuos armados, que al parecer hablaban inglés y español, atacaron la residencia privada del mandatario, ubicada en el barrio de Pelerin de Puerto Príncipe. Moïse falleció tras recibir el impacto de doce balas, mientras que su esposa, Jovenel Moïse, resultó lesionada y fue hospitalizada en un sanatorio de la capital y posteriormente trasladada en un avión ambulancia a un centro médico de Miami, en el estado de Florida (EE.UU.).

Haití permanece en estado de sitio a raíz del asesinato del mandatario de 53 años. De momento, el Consejo de Ministros, bajo la presidencia del primer ministro interino (Joseph), "ejerce el Poder Ejecutivo hasta la elección" de otro jefe de Estado.

A la tensión social y la incertidumbre en las calles se le ha sumado la participación de la población en la detención de dos supuestos sospechosos del crimen de Moïse, según varios videos difundidos en redes sociales que dan cuenta de estas capturas realizadas en la comuna Petión-Ville.

La Policía arribó al sitio momentos después y trasladó a los sospechosos del crimen a una estación. En las calles de Puerto Príncipe, una multitud habría prendido fuego a los automóviles de los supuestos participantes en el asesinato.

Durante la conferencia de prensa de este jueves, el director de la Policía Nacional pidió a los habitantes mantener la calma y dejar a las autoridades realizar su trabajo.

El magnicidio se produjo a menos de tres meses de celebrarse las elecciones presidenciales y legislativas en Haití, previstas para el 26 de septiembre, a las que Moïse no podía presentarse.

Por qué hay dos políticos que piden ejercer el cargo de primer ministro de Haití tras el magnicidio de Jovenel Moïse

El primer ministro interino, Claude Joseph, asumió provisionalmente las riendas del país. Pero antes de su asesinato, el mandatario haitiano había nombrado a Ariel Henry para el cargo.


Claud Joseph / Facebook


El asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, que fue acribillado a balazos en su residencia el miércoles, ha sumido al país en una profunda crisis política que afecta al seno del Gobierno, donde dos hombres reclaman el puesto de primer ministro.

Tras el magnicidio, el primer ministro interino, Claude Joseph, asumió provisionalmente las riendas del país y anunció el estado de sitio.

Sin embargo, el lunes, tan solo dos días antes de su asesinato, Moïse había nombrado al neurólogo Ariel Henry, de 71 años, como nuevo primer ministro, pero este no alcanzó a ser investido. El presidente incluso lo anunció por Twitter.

"He nombrado a Ariel Henry como primer ministro. Deberá formar un gobierno abierto que incluya a las fuerzas vitales de la nación, resuelva los problemas de inseguridad y acompañe a la CEP [Consejo Provisional Electoral] para realizar elecciones generales y un referendum", dijo.


El propio Joseph felicitó a Henry a través de la redes sociales, donde destacó que su "sentido de Estado" lo guiaría "en sus esfuerzos por crear un gobierno de consenso".

Sin legitimidad

Ninguno de los dos políticos tendrían legitimidad para ostentar el cargo porque Moïse llevaba más de un año gobernando por decreto, desde que en enero de 2020 declaró la caducidad del período legislativo, debido a que no se pudieron celebrar los comicios parlamentarios en otoño de 2019, aplazados por las constantes protestas antigubernamentales que paralizaron el país.



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Por tanto, según la Carta Magna, Joseph no estaría en la línea sucesora porque se trata de un primer ministro interino y el Parlamento nunca aprobó su nombramiento (y lo mismo le sucedería a Henry).

En una entrevista a Le Nouvelliste, Henry se mostró abierto al diálogo, pero dejó clara su posición: "Claude Joseph no es el primer ministro, forma parte de mi gobierno".

"El señor Claude Joseph ha hecho un buen trabajo hoy [por el miércoles, día del asesinato de Moïse] que aprecio. Yo soy el primer ministro y estaba eligiendo a los miembros de mi gabinete. Incluso estábamos muy avanzados", declaró.

El magnicidio de Moïse tuvo lugar a menos de tres meses de las elecciones presidenciales y legislativas, convocadas para el próximo 26 de septiembre. Para esa misma fecha, el mandatario había convocado un referéndum para una nueva Constitución, que contaba con las críticas de sus opositores y la comunidad internacional.

RT