19 de enero de 2022
Sede de la empresa israelí que comercializa el programa Pegasus, NSO Group, en Herzliya, cerca de Tel Aviv.. Imagen: AFP
Hackearon los celulares de civiles, incluyendo a manifestantes e intendentes opositores al exprimer ministro Netanyahu.
La policía israelí utilizó el software de espionaje Pegasus de la empresa de tecnología local NSO Group. La investigación revelada por el medio digital Calcalist indica que la policía hackeó los teléfonos celulares de civiles, incluyendo a manifestantes e intendentes opositores al exprimer ministro Benjamin Netanyahu. Mientras que el Controlador Estatal de Israel, Matanyahu Englman, afirmó que va a investigar el uso de Pegasus por parte de la policía.
Pegasus
Según reveló la investigación del diario Calcalist, la policía compró el softaware espía Pegasus de la empresa israelí NSO Group por primera vez en 2013 y desde entonces el mismo fue utilizado contra una lista de personas entre ellas líderes civiles y políticos, aunque no precisó nombres. El portal indicó que el exfuncionario del Servicio de Seguridad General de Israel (Shin Bet) y exjefe de policía de Israel, Yohanan Danino, fue el primero en hacer un uso masivo del sistema.
Pegasus fue desarrollado en la ciudad de Herzliya y permite a sus operadores acceder de forma remota a los celulares infectados con el software. El sistema de espionaje fue vendido a las agencias de inteligencia en todo el mundo y permitió obtener acceso a los contenidos dentro del dispositivo: mensajes, fotografías, así como una funcionalidad para activar de forma remota la cámara y el micrófono del celular infectado, todo sin el consentimiento del propietario del teléfono.
En su artículo, Calcalist reveló un detallado historial del uso de Pegasus por parte de la policía israelí. En 2015, con la llegada de Roni Alsheich a la dirección de la policía, que venía de ocupar un alto cargo en el servicio de seguridad Shin Bet, uso del software de espionaje fue ampliado. El matutino israelí Hareetz consignó que recibió una copia de la factura entre NSO Group y la policía de Israel que evidencia la compra del programa por parte de las fuerzas de seguridad. Esa misma factura fue enviada en diciembre de 2013 al departamento de presupuesto del Departamento de Investigaciones e Inteligencia de la Policía de Israel. El diario israelí además citó a una fuerte cercana que afirmó que la policía primero compró el paquete básico del software y cada año fueron incorporando actualizaciones adicionales para el desarrollo de Pegasus.
En la factura a la que accedió Haaretz la descripción del producto era vaga, no hacía referencia de forma explícita al nombre del software de espía, de igual forma el documento fue firmado por Shirley Shochat de NSO Technologies Ltd. y Hadas Biton del Departamento de Investigaciones e Inteligencia de la Policía de Israel.
Diplomacia y espionaje
Durante mucho tiempo Israel colaboró en la promoción de la venta de Pegasus y otros servicios cibernéticos como parte de su “diplomacia cibernética”. Entre los clientes más reconocidos del NSO Group figuraban los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, India, Hungría, México y Polonia. En julio de 2021 la ONG Forbidden Stories publicó la investigación del Proyecto Pegasus, donde reveló que el software de espionaje era utilizado contra periodistas, activistas de derechos humanos y presidentes en todo el mundo. En este sentido, la fundación para la protección de defensores, Front Line Defenders, precisó hace unos meses que Pegasus fue utilizado para espiar a los palestinos que trabajaban con grupos de derechos que Israel proscribió.
Según el informe de Calcalist, entre los objetivos espiados por la policía también había empleados del gobierno que no estaban acusados de delitos penales pero que tenían acceso a información que podría resultar clave en una investigación más amplia. El informe por su parte subraya que teóricamente algunos de estos casos pueden incluir objetivos legítimos, pero el espionaje se realizó sin supervisión y sin justificación legal.
Sin embargo, Pegasus no es el único software de espionaje con el que cuenta la policía israelí. Cellebrite, por ejemplo, permite a los efectivos policiales acceder a cualquier teléfono en su posición física. En esos casos, por lo general obtiene una orden judicial antes de infiltrar los teléfonos. Algo que no se cumplió con el uso de Pegasus.
En tanto, tras la publicación de Calcalist, el Controlador Estatal de Israel, Matanyahu Englman, afirmó que su oficina, encargada de fiscalizar las decisiones de los organismos públicos, va a investigar el uso de Pegasus por parte de la policía para espiar a ciudadanos israelíes. Por su parte, el jefe de la policía, Kabi Shabtai, no negó el uso de Pegasus aunque indicó que algunos datos del reportaje son "incorrectos".
"Todo se llevó a cabo con las debidas garantías legales y supervisiones", insistió. Shabtai sí desmintió que Pegasus fuera utilizado para espiar a los manifestantes del movimiento "Bandera Negra", que lideró protestas masivas y recurrentes contra Netanyahu entre 2020-2021 para exigir su renuncia tras las acusaciones de corrupción en su contra. “La Policía de Israel no utiliza sus capacidades tecnológicas avanzadas contra civiles inocentes y manifestantes”, dijo Shabtai en un comunicado emitido por la policía.
En el congreso, diputados de todo el arco político exigieorn abrir una investigación parlamentaria, mientras que el ministro de Seguridad Pública, Omer Barlev, aseguró en Twitter que "no hay prácticas de escuchas telefónicas o intrusión en dispositivos por parte de la Policía de Israel sin la aprobación de un juez", aunque afirmó que iba a verificar que ese cuerpo reciba autorización explícita de un juez para usar el software de espionaje.
Según reveló la investigación del diario Calcalist, la policía compró el softaware espía Pegasus de la empresa israelí NSO Group por primera vez en 2013 y desde entonces el mismo fue utilizado contra una lista de personas entre ellas líderes civiles y políticos, aunque no precisó nombres. El portal indicó que el exfuncionario del Servicio de Seguridad General de Israel (Shin Bet) y exjefe de policía de Israel, Yohanan Danino, fue el primero en hacer un uso masivo del sistema.
Pegasus fue desarrollado en la ciudad de Herzliya y permite a sus operadores acceder de forma remota a los celulares infectados con el software. El sistema de espionaje fue vendido a las agencias de inteligencia en todo el mundo y permitió obtener acceso a los contenidos dentro del dispositivo: mensajes, fotografías, así como una funcionalidad para activar de forma remota la cámara y el micrófono del celular infectado, todo sin el consentimiento del propietario del teléfono.
En su artículo, Calcalist reveló un detallado historial del uso de Pegasus por parte de la policía israelí. En 2015, con la llegada de Roni Alsheich a la dirección de la policía, que venía de ocupar un alto cargo en el servicio de seguridad Shin Bet, uso del software de espionaje fue ampliado. El matutino israelí Hareetz consignó que recibió una copia de la factura entre NSO Group y la policía de Israel que evidencia la compra del programa por parte de las fuerzas de seguridad. Esa misma factura fue enviada en diciembre de 2013 al departamento de presupuesto del Departamento de Investigaciones e Inteligencia de la Policía de Israel. El diario israelí además citó a una fuerte cercana que afirmó que la policía primero compró el paquete básico del software y cada año fueron incorporando actualizaciones adicionales para el desarrollo de Pegasus.
En la factura a la que accedió Haaretz la descripción del producto era vaga, no hacía referencia de forma explícita al nombre del software de espía, de igual forma el documento fue firmado por Shirley Shochat de NSO Technologies Ltd. y Hadas Biton del Departamento de Investigaciones e Inteligencia de la Policía de Israel.
Diplomacia y espionaje
Durante mucho tiempo Israel colaboró en la promoción de la venta de Pegasus y otros servicios cibernéticos como parte de su “diplomacia cibernética”. Entre los clientes más reconocidos del NSO Group figuraban los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, India, Hungría, México y Polonia. En julio de 2021 la ONG Forbidden Stories publicó la investigación del Proyecto Pegasus, donde reveló que el software de espionaje era utilizado contra periodistas, activistas de derechos humanos y presidentes en todo el mundo. En este sentido, la fundación para la protección de defensores, Front Line Defenders, precisó hace unos meses que Pegasus fue utilizado para espiar a los palestinos que trabajaban con grupos de derechos que Israel proscribió.
Según el informe de Calcalist, entre los objetivos espiados por la policía también había empleados del gobierno que no estaban acusados de delitos penales pero que tenían acceso a información que podría resultar clave en una investigación más amplia. El informe por su parte subraya que teóricamente algunos de estos casos pueden incluir objetivos legítimos, pero el espionaje se realizó sin supervisión y sin justificación legal.
Sin embargo, Pegasus no es el único software de espionaje con el que cuenta la policía israelí. Cellebrite, por ejemplo, permite a los efectivos policiales acceder a cualquier teléfono en su posición física. En esos casos, por lo general obtiene una orden judicial antes de infiltrar los teléfonos. Algo que no se cumplió con el uso de Pegasus.
En tanto, tras la publicación de Calcalist, el Controlador Estatal de Israel, Matanyahu Englman, afirmó que su oficina, encargada de fiscalizar las decisiones de los organismos públicos, va a investigar el uso de Pegasus por parte de la policía para espiar a ciudadanos israelíes. Por su parte, el jefe de la policía, Kabi Shabtai, no negó el uso de Pegasus aunque indicó que algunos datos del reportaje son "incorrectos".
"Todo se llevó a cabo con las debidas garantías legales y supervisiones", insistió. Shabtai sí desmintió que Pegasus fuera utilizado para espiar a los manifestantes del movimiento "Bandera Negra", que lideró protestas masivas y recurrentes contra Netanyahu entre 2020-2021 para exigir su renuncia tras las acusaciones de corrupción en su contra. “La Policía de Israel no utiliza sus capacidades tecnológicas avanzadas contra civiles inocentes y manifestantes”, dijo Shabtai en un comunicado emitido por la policía.
En el congreso, diputados de todo el arco político exigieorn abrir una investigación parlamentaria, mientras que el ministro de Seguridad Pública, Omer Barlev, aseguró en Twitter que "no hay prácticas de escuchas telefónicas o intrusión en dispositivos por parte de la Policía de Israel sin la aprobación de un juez", aunque afirmó que iba a verificar que ese cuerpo reciba autorización explícita de un juez para usar el software de espionaje.