URUGUAY
PASAPORTE A SEBASTIÁN MARSET
¿Incapacidad, negligencia o algo peor?
MONTEVIDEO (Uypress) .
23.08.2022
Imagen de portada: captura
En el día de ayer culminó la interpelación a los Ministros de Interior y de Relaciones Exteriores de Uruguay sobre el otorgamiento de un pasaporte por parte del Estado uruguayo al capo narco Sebastián Marset recluido en una cárcel de Dubai (Emiratos Árabes).La interpelación estuvo a cargo del senador Mario Bergara del opositor Frente Amplio y culminó sin consecuencias institucionales de ningún tipo.
El tema está teniendo un fuerte impacto en su país de origen, Uruguay, en Paraguay donde está demostrada su relación con personajes políticos de primer nivel y donde opera el centro del cartel de la droga que Marset manejaba, en Colombia, donde fue acusado en agosto de este año de ser el autor intelectual del asesinato del fiscal de Paraguay Marcelo Pecci, según la investigación de la Fiscalía General de Colombia.
Este no es un caso más protagonizado por jefes y organizaciones del narcotráfico, es la confirmación dramática que el tráfico de estupefacientes dentro de la región y hacia otros destinos (Europa y África) involucra organizaciones criminales con ramificaciones en diversos países, incluso con estrechas relaciones con el mundo de la política.
Los volúmenes de cocaína incautados al cartel que comanda Marset representan más de 600 millones de dólares en las diversas operaciones y basados en los conceptos considerados por las organizaciones policiales de combate a las drogas, por cada kilo incautado de 6 a 8 kilos han llegado a su destino. Estamos hablando de miles de millones de dólares, circulando por nuestras fronteras e impactando en nuestras sociedades.
La citada interpelación fue interpretada de diferentes maneras por ambas partes (gobierno y oposición). De un lado quedó demostrado que se actuó de acuerdo a derecho, cumpliendo en particular el decreto 129/2014 que permitía entregarle el documento en Dubai al capo narco sin ninguna traba legal y por otro lado el Frente Amplio que insiste en que se cometieron serios errores al facilitarle un pasaporte con vigencia por 10 años, entregado de forma extraordinaria en Dubai, a un conocido narcotraficante condenado por varias causas penales en Uruguay y que estaba preso por utilizar un pasaporte falso paraguayo para su viaje por diversos países (Francia, Grecia y Turquía) antes de ser detenido en los Emiratos.
Lo más interesante del largo debate de más de casi 12 horas fue la explicación que brindó el canciller uruguayo Francisco Bustillos en su primera réplica. Y la sub secretaria de la misma cartera Carolina Ache Batlle sobre su reunión con el abogado de Marset en Uruguay, Alejandro Balbi.
Hasta ahora la única consecuencia de este sonado asunto, fue el alejamiento de su cargo como sub director de Identificación Civil del abogado Alberto Lacoste, un funcionario de carrera en dicha dependencia, designado por el actual gobierno. Se le retiró la confianza e inició un sumario por haber enviado un comunicado a la Policía Científica solicitando agilitar el trámite de cinco pasaportes, uno de los cuales era el de Sebastián Marset.
El comentario más común en diversos ambientes es que el gobierno "cortó el hilo" por la parte más fina, la de un funcionario y no se asumió ninguna responsabilidad política. Pero es notorio que tuvieron que reconocer problemas en toda la tramitación.
El eje de toda la defensa de los dos ministros se basa en la secuencia temporal de los acontecimientos, la llamada de "línea de tiempo" en relación a un decreto del año 2014 (gobierno del Frente Amplio), pero hay una parte de la exposición del ministro Bustillos que llama poderosamente la atención:
"Es importante retener esta fecha (20 de octubre fecha de la solicitud del pasaporte por parte del narco Marset), porque desde que se lo apresó, se lo detuvo (10 setiembre 2021) en Dunai a este hombre, pasaron hasta la entrega del pasaporte 77 días, cuando lo normal es que en 5 días pueda hacerse del pasaporte cualquier uruguayo, que así lo solicite. 77 Días" (Textual)
¿A los servicios consulares uruguayos en este caso específico, y supuestamente sin problemas legales de ningún tipo, se le trabaron todos los sistemas y se necesitaron 77 días, para un trámite que normalmente requiere 5 días? Nadie formuló una pregunta que resulta elemental.
¿Esta demora fue por causas administrativas, por ineficiencia, si todo fue normal, como explican que sea anormal que el vice director de Identificación Civil solicite que se cumplan con los plazos promedio (5 días)?
No hay una explicación ante esta anomalía de ningún tipo, y habilita a suspicacias de todo tipo en cuanto a que se estaba investigando sobre un uruguayo detenido en el extranjero con un pasaporte falso paraguayo y que había sido condenado por varios delitos en el Uruguay, que como dijo el ministro Alberto Heber, todas sus causas (inclusa una por homicidios y varias por narcotráfico) se cerraron llamativamente en el año 2020. ¿De quién sospecha o le llama la atención a Heber este cierre simultanea de causas en el año 2020, a algún órgano de la justicia? Otra pregunta elemental.
En 77 días, hubo tiempo suficiente para que en muy diversas instancias, inclusive a través de Google se averiguara el tormentoso pasado como delincuente de Marset en Uruguay y Paraguay. ¿Qué estuvieron haciendo en ese plazo, crochet?
Como por ejemplo en la Cumbre de Ministros de Seguridad de Fronteras, en la que participó el ministro del Interior uruguayo Alberto Heber, los días 16 y 17 de diciembre del 2021, cuando según la línea del tiempo oficial, no se había entregado el demorado pasaporte a Marset y que se realizó en Ciudad del Este, Paraguay, y que insólitamente según la foto, no se colocó la bandera uruguaya. (¿??)
Y aquí viene un nuevo invitado, que pasó casi desapercibido totalmente en la interpelación, excepto una breve mención del miembro interpelante: la Secretaria de Inteligencia Estratégica del Estado cuyo director es el doctor Alvaro Garcé. https://www.gub.uy/presidencia/institucional/estructura-del-organismo/secretaria-inteligencia-estrategica-estado
Entre sus Cometidos Sustantivos, figuran: Coordinar el funcionamiento del Sistema Nacional de Inteligencia de Estado.
Procesar la información proporcionada por los órganos integrantes del Sistema Nacional de Inteligencia de Estado, en los ámbitos nacional e internacional, con el fin de producir Inteligencia Estratégica de Estado.
Conducir el relacionamiento con los organismos de Inteligencia Estratégica de otros Estados.
Proponer normas y procedimientos estandarizados comunes para todos los órganos del Sistema Nacional de Inteligencia de Estado.
Disponer la aplicación de medidas de inteligencia y contrainteligencia, con objeto de detectar y enfrentar las amenazas definidas por la Política de Defensa Nacional, así como otras amenazas al Estado.
Considerando que el Presidente de la República tenía programado un viaje en el mes de febrero del 2022, precisamente a Dubai, ¿No debería haber incluido la coordinación más estrecha con los ministerios de Relaciones Exteriores y del Interior, sobre situaciones dignas de intervención e inteligencia en los Emiratos Árabes, incluyendo naturalmente que un compatriota con un pasado penal muy pesado, estaba detenido y además por portar un pasaporte falso paraguayo?
El Sistema de Inteligencia depende directamente y responde exclusivamente al Presidente de la República.
¿Si en un caso como este, con su potencial negativo a nivel internacional y regional, en un país donde viajaría la máxima autoridad del Estado, no corresponde una especial atención de "inteligencia", en realidad para qué sirve? Y nadie se hizo esta pregunta.
Una pregunta para los lectores, ¿Si a ustedes les pide una entrevista el abogado Alejandro Balbi por cualquier tema, ustedes no tomarían algún recaudo, no sentirían algún escozor? Mucho más si viene averiguar sobre una valija diplomática, para enviar un pasaporte a Dubai. ¿Ustedes no les picaría informarse sobre quien debería recibir el pasaporte? Elemental. Pues la subsecretaria lo conocía solo por el Club Nacional de Fútbol...Eso dijo.
Cuando algo está tan entreverado, hay que ir a los hechos, son siempre la fuente de la realidad. Y los hechos son implacables, un capo narco conocido e investigado por las policías y los servicios antidrogas de Uruguay, Paraguay, Europol e Interpol, cae detenido en Dubai con un pasaporte falso paraguayo. Está bien preso y será deportado.
El Uruguay desde que es detenido demora 77 días en entregarle un pasaporte normal, en mano, enviado de forma extraordinaria a través de alguien que no es mencionado y sin ningún control el delincuente lo recibe en Dubai. Se va rapidito de allí y desaparece, no viene a Uruguay, ni a Paraguay, se evapora.
Pocos meses después de su libertad y posterior ocultamiento, organiza a distancia el asesinato de un fiscal de la lucha antidroga de Paraguay que estaba molestando a su organización, que tiene probados vínculos nada menos que con un ex presidente del país, Horacio Cartes, denunciado por corrupto por el Departamento de Estado de los Estados Unidos. El asesinato se produce en Colombia, mientras Pecci y su esposa estaban de luna de miel. El presidente de Colombia recién electo, denuncia que Marset es el autor intelectual del crimen.
Marset se permite hacer llamados telefónicos con imagen desde el exterior, para atacar a diversas personas incluyendo al José Mujica, ex presidente de Uruguay, pero no menciona a nadie, absolutamente a nadie del actual gobierno. Ataca a los que lo acusan.
En el mundo, mejor dicho en muchos países implicados, y en los ambientes de la lucha contra la droga el Uruguay, proyecta una imagen lamentable, que no se resuelve con una moción de explicaciones satisfactoria votado por los senadores multicolores.
El Presidente de la República, locuaz en todos los temas, no dice una palabra sobre este caso bochornoso.
Los uruguayos, asombrados de tanta impunidad política. No todos, hay focas en todos lados.
Y Marset libre y con pasaporte uruguayo.
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias
