MONTEVIDEO (Uypress/Asma El Kanfoudi/El Orden Mundial)
08.04.2023
Foto: elordenmundial.com
El plan de paz chino apenas incluye propuestas concretas y es ambiguo, pero China ha sido la primera potencia en proponer uno que consiste en doce puntos en los que China traza sus propuestas para poner fin a la guerra.
El documento, titulado Posición de China sobre la Solución Política de la Crisis de Ucrania y que reproducimos íntegro a continuación, demuestra la voluntad de Pekín de ejercer de mediador en el conflicto. China presentó el plan el pasado 24 de febrero, cuando se cumplía un año de la invasión. El plan de paz apenas incluye propuestas concretas, deja asuntos abiertos a interpretación y en ningún momento habla de "invasión" ni califica el conflicto de "guerra", sino solo de "crisis".
Rusia, Ucrania y Occidente no han acogido el plan con el mismo entusiasmo. El líder ruso, Vladímir Putin, aplaudió la iniciativa: no comparte todos los puntos pero cree que sienta las bases para empezar a negociar. Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, no se ha negado a discutirlo: entiende que China es un actor imprescindible y ha invitado al líder chino, Xi Jinping, a visitarle en Kiev. Por su parte, Occidente ha cuestionado el plan chino, calificándolo de ambiguo. La OTAN y la Unión Europea ven con recelo las intenciones chinas, pues Pekín nunca ha condenado la invasión y mantiene una "amistad sin límites" con Moscú.
Con este plan, el líder chino, Xi Jinping, busca ganar prestigio y defender sus prioridades en política internacional. No en vano China es el único de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU que ha propuesto un plan de paz. Todo ello se enmarca en la estrategia china de presentarse como un país pacífico y mediador en conflictos, como también ha hecho en el Cuerno de África o entre Irán y Arabia Saudí. China considera que la estabilidad global es imprescindible para su expansión económica, y mostrarse como su garante le ayuda en el pulso contra Estados Unidos.
Puntos 1 al 4, el núcleo del plan de paz chino. Respetar la soberanía de todos los países. El derecho internacional universalmente reconocido, incluyendo los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, debe ser estrictamente observado. La soberanía, la independencia y la integridad territorial de todos los países deben ser efectivamente defendidas. Todos los países, sean grandes o pequeños, fuertes o débiles, ricos o pobres, son miembros iguales de la comunidad internacional. Todas las partes deben defender conjuntamente las normas básicas que rigen las relaciones internacionales y salvaguardar la equidad y la justicia internacionales. Hay que promover la aplicación igualitaria y uniforme del derecho internacional y rechazar el doble rasero.
El punto 1 se centra en el respeto a la soberanía nacional, uno de los principios fundamentales de la política exterior china. De hecho, China nunca ha reconocido la anexión rusa de Crimea y los territorios ocupados en el este de Ucrania. Sin embargo, no aclara si cree que Rusia debe renunciar a sus demandas territoriales en Ucrania ni condena la invasión. Abandonar la mentalidad de la Guerra Fría. La seguridad de un país no debe conseguirse a expensas de la de otros. La seguridad de una región no debe lograrse mediante el fortalecimiento o la expansión de los bloques militares. Los intereses y preocupaciones de seguridad legítimos de todos los países deben ser tomados en serio y abordados adecuadamente. No existe una solución simple a un problema complejo. Todas las partes deben, siguiendo el concepto de seguridad común, integral, cooperativa y sostenible, y teniendo en cuenta la paz y la estabilidad duraderas del mundo, ayudar a forjar una arquitectura de seguridad europea equilibrada, eficaz y sostenible. Todas las partes deben oponerse a la búsqueda de la seguridad de uno mismo a costa de la de los demás, evitar la confrontación entre bloques y trabajar juntos por la paz y la estabilidad del continente euroasiático.
El punto 2 es una crítica implícita a Occidente, al que China ha acusado de alentar la guerra con sus envíos de armas a Ucrania y la ampliación de la OTAN hacia el este de Europa. Pekín también ha criticado las sanciones occidentales a Rusia.Cesar las hostilidades. El conflicto y la guerra no benefician a nadie. Todas las partes deben mantenerse racionales y actuar con moderación, abstenerse de avivar las llamas y agravar las tensiones, y evitar que la crisis de Ucrania se deteriore aún más o incluso se salga de control. Todas las partes deben apoyar a Rusia y Ucrania a trabajar en la misma dirección y reanudar el diálogo directo lo más pronto posible, para desescalar gradualmente la situación, y en última instancia, alcanzar un alto el fuego integral.
Reanudar las conversaciones por la paz. El diálogo y la negociación son la única solución viable a la crisis de Ucrania. Todos los esfuerzos conducentes a la solución pacífica de la crisis deben ser alentados y apoyados. La comunidad internacional debe seguir comprometida con el enfoque correcto de promover conversaciones por la paz, ayudar a las partes en conflicto a abrir cuanto antes la puerta a una solución política de la crisis y crear condiciones y plataformas para la reanudación de las negociaciones. China seguirá desempeñando un papel constructivo en este aspecto.
Los puntos 3 y 4 piden pausar los enfrentamientos y retomar las negociaciones, abandonadas tras un primer intento impulsado por Turquía en marzo de 2022. El plan de paz de China insiste en demandar a "todas las partes (...) abstenerse de avivar las llamas", otra alusión al apoyo occidental a Ucrania. Con todo, estos puntos son difíciles de implementar sobre la base ambigua del punto 1.
Puntos 5 y 6, problemas humanitariosResolver la crisis humanitaria. Todas las medidas conducentes a aliviar la crisis humanitaria deben ser alentadas y apoyadas. Las operaciones humanitarias han de seguir los principios de neutralidad e imparcialidad, y las cuestiones humanitarias no deben ser politizadas. La seguridad de los civiles debe ser efectivamente protegida, y hay que establecer corredores humanitarios para la evacuación de civiles de las zonas de conflicto. Se necesitan esfuerzos para aumentar la asistencia humanitaria a las áreas pertinentes, mejorar las condiciones humanitarias y proporcionar un acceso humanitario rápido, seguro y sin obstáculos, con miras a prevenir una crisis humanitaria de mayor escala. Se debe apoyar a la ONU a desempeñar un papel coordinador en la canalización de la ayuda humanitaria a las zonas de conflicto.
Proteger a los civiles y prisioneros de guerra. Las partes en conflicto deben cumplir estrictamente el derecho internacional humanitario, evitar atacar a civiles o instalaciones civiles, proteger a mujeres, niños y otras víctimas del conflicto y respetar los derechos fundamentales de los prisioneros de guerra. China apoya el intercambio de los prisioneros de guerra entre Rusia y Ucrania, y llama a todas las partes a crear condiciones más favorables para este objetivo.
Los puntos 5 y 6 se centran en las consecuencias humanitarias de la guerra. China no condena los indicios de que los rusos han cometido crímenes de guerra en masacres como las de Bucha o con la deportación de niños ucranianos a Rusia, por la que la Corte Penal Internacional ha emitido una orden de arresto contra Vladímir Putin. El plan de paz chino sí menciona el intercambio de prisioneros, uno de los pocos asuntos en los que Rusia y Ucrania han llegado a acuerdos en los últimos años.
Puntos 7 y 8, el riesgo nuclearMantener la seguridad de las centrales nucleares. China se opone a los ataques armados contra las centrales nucleares u otras instalaciones nucleares pacíficas, y llama a todas las partes a acatar el derecho internacional, incluyendo la Convención sobre Seguridad Nuclear (CSN), y evitar resueltamente accidentes nucleares provocados por el hombre. China apoya al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) a desempeñar un papel constructivo en la promoción de la seguridad tecnológica y física de las instalaciones nucleares pacíficas.
Reducir los riesgos estratégicos. Las armas nucleares no deben ser utilizadas, y las guerras nucleares no deben ser libradas. Hay que oponerse al uso o a la amenaza del uso de las armas nucleares. Hay que prevenir la proliferación nuclear y evitar las crisis nucleares. China se opone a la investigación, el desarrollo y el uso de armas químicas y biológicas por parte de cualquier país y bajo cualquier circunstancia.
Con los puntos 7 y 8, China demuestra su preocupación por el riesgo de una escalada nuclear. El punto 7 pide implícitamente que se abandonen a los combates en torno a la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa. El punto 8 es una crítica de China a las amenazas nucleares de Rusia, que Xi ha afeado a Putin.
Puntos 9, 10, 11 y 12: "es la economía, estúpido"Facilitar las exportaciones de cereales. Todas las partes deben aplicar plena y eficazmente y de forma equilibrada la Iniciativa de Cereales del Mar Negro firmada por Rusia, Türkiye, Ucrania y la ONU, y apoyar a la ONU a desempeñar un papel importante al respecto. La iniciativa de cooperación sobre seguridad alimentaria global propuesta por China ofrece una solución factible a la crisis alimentaria mundial.
El punto 9 insiste en la importancia del acuerdo del grano, el pacto más relevante alcanzado por Rusia y Ucrania desde el inicio de la guerra. Ambos son dos de los mayores productores de cereal del mundo, por lo que su exportación es crucial para la seguridad alimentaria de países de Oriente Próximo y África como Egipto, Somalia o Líbano. Poner fin a las sanciones unilaterales. Las sanciones unilaterales y la máxima presión no pueden resolver la cuestión, y sólo crean nuevos problemas. China se opone a las sanciones unilaterales no autorizadas por el Consejo de Seguridad de la ONU. Los países concernientes deben dejar de abusar de las sanciones unilaterales y de la jurisdicción de brazo largo contra otros países, con vistas a hacer sus aportes por la desescalada de la crisis de Ucrania y crear condiciones para el crecimiento económico de los países en desarrollo y la mejora de la vida de sus pueblos.
Mantener estables las cadenas industriales y de suministro. Todas las partes deben defender efectivamente el existente sistema económico mundial y oponerse a usar la economía mundial como una herramienta o arma para fines políticos. Se necesitan esfuerzos conjuntos para mitigar los efectos de desbordamiento de la crisis, y evitar la perturbación en la cooperación internacional en energía, finanzas, comercio de alimentos y transporte, así como la socavación de la recuperación económica mundial.Promover la reconstrucción post-conflicto. La comunidad internacional debe tomar medidas para apoyar la reconstrucción post-conflicto en las zonas de conflicto. China está dispuesta a proporcionar asistencia y desempeñar un papel constructivo en este aspecto.
Los puntos 10, 11 y 12 hablan más del nerviosismo de China por su propia economía que de la guerra de Ucrania. El punto 10 condena las sanciones occidentales contra Moscú: Pekín no ha dejado de criticarlas y ha limitado su apoyo a Rusia para evitar que le afecten. El punto 11, sobre las cadenas de suministro, debe leerse en el contexto de la guerra tecnológica entre China y Estados Unidos. El punto 12, sobre la reconstrucción de Ucrania, no aclara la propuesta china sobre cómo debe sufragarse. Pero Pekín se ofrece a participar, consciente de que será una gran oportunidad de negocio para su potente sector inmobiliario.
UyPress - Agencia Uruguaya de Noticias