EN POLONIA
Glaxo Internacional denunciada por sobornar médicos para promocionar fármaco
La televisión británica denunció que a farmacéutica GlaxoSmithKline (GSK) está siendo investigada en Polonia, por supuestos sobornos a médicos para que difundieran un nuevo fármaco.
Jueves 17 de abril de 2014
Entre los testimonios presentados por el programa, aparece el representante de GSK que reconoció los sobornos.
La BBC de Londres emitió en la noche del miércoles un programa –“Panorama”- donde revela las circunstancias en que once médicos y un gerente general de GSK son acusados por actos de corrupción que podrían haber afectado pacientes, en una trama que se extendió por dos años y culminó en 2012.
Los médicos aparecen acusados por recetar ampliamente el fármaco “Seretide” que se emplea para el tratamiento del asma, aceptando prebendas de un antiguo representante de ventas de la empresa. La compañía ha respondido a la acusación diciendo que coopera de lleno actualmente en la investigación y que el empleado ha sido sancionado con las medidas disciplinarias correspondientes.
El reconocimiento del asunto, puede implicar serias consecuencias ante la Justicia británica, ya que las leyes del Reino Unido establecen penas para empleados de compañías de Gran Bretaña, que estén instalados en otros países y sobornen a funcionarios gubernamentales en el extranjero para beneficiarse ellos, o las empresas a las que pertenecen.
Los testimonios parecen contundentes aunque hay dudas
Entre los testimonios presentados por el programa, aparece el representante de GSK en la región de Lodz, en Polonia, quien reconoció que se había pagado a médicos locales para que recetaran el específico en cuestión. Las cuentas respectivas eran pagadas por la representación como “servicios educativos” para los pacientes que los médicos involucrados debían dictar. Las charlas tenían en realidad el cometido de aumentar la entrega de este medicamento firmando recetas.
Sin embargo las pesquisas no lograron hasta ahora encontrar las citadas boletas por “servicios educativos” en cuestión, aunque la fiscalía de Lodz, reconoció a la BBC que “a cambio de un beneficio financiero, los médicos favorecían el producto propuesto por la compañía farmacéutica y recetaban el fármaco”.