Por Emir Sader
Cuando no se puede borrar la historia, hay que tratar de reescribirla, dándole un sentido radicalmente opuesto al que tuvo en la realidad. Eso intenta la derecha latinoamericana con respecto a los gobiernos progresistas de este siglo en el continente.
18 de abril de 2018
Cuando no se puede borrar la historia, hay que tratar de reescribirla, dándole un sentido radicalmente opuesto al que tuvo en la realidad. Eso intenta la derecha latinoamericana con respecto a los gobiernos progresistas de este siglo en el continente.