Lavado de activos en Uruguay y la región
MONTEVIDEO (Uypress) —
14.08.2017
Este martes 15, la consultora Kroll, acompañada por la firma local Testa, presentará el segundo seminario internacional sobre prevención de lavado de dinero, ética y cumplimiento.Uruguay es considerado como uno de los países con las normativas más fuertes en el combate al lavado de activos y financiamiento del terrorismo.
La ocasión de la realización del seminario fue propicia para que Uypress conversara con Juan Cruz Amirante, Head Office de la consultora Kroll para el Cono Sur.Amirante informó que es el segundo encuentro internacional que se realiza junto con la consultora Testa y al momento de realizar esta nota (sábado 12) ya eran 270 los inscriptos.
El seminario sobre prevención de lavado de dinero, ética y cumplimiento destinado a sujetos obligados, como el sector financiero, inmobiliario, fundaciones y remeseras, se llevará a cabo en el Ball Room del Sheraton Hotel Montevideo de 8:30 a 17:30 hs. Según los organizadores "servirá de contenido práctico y específico para funcionar como una actualización para los distintos actores involucrados en la problemática mundial que significa el Lavado de Dinero, el Financiamiento del Terrorismo y la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva".
Respecto al porqué de la necesidad de realizar este tipo de actividades y actualizaciones, Juan Cruz Amirante señaló que en generales, las organizaciones delictivas van uno o dos pasos delante de las instituciones financieras, razón por la cual se requiere están en permanente actualización.
(Juan Cruz Amirante)
Preguntado respecto a cómo entra la ética en los análisis de estos temas, donde generalmente se mueven cantidades inimaginables de dinero, el especialista destacó que juega un papel muy importante. Poniendo como ejemplo el caso de empresas que comercializan armas, sostuvo que a muchas instituciones financieras se les platea un dilema ético respecto a trabajar con esos clientes, más allá de la legalidad que pueda tener el negocio. "Hay un tema de imagen, y las instituciones financieras prestan mucha atención a ello", manifestó.
Contó el sonado caso de un banco que debió pagar una multa de más de 340 millones de dólares por su vinculación en el sonado caso Madoff, y que sin embargo sus mayores perjuicios vinieron después de esa multa y fueron aún mayores, como por ejemplo las derivaciones del cierre de todas las cuentas que con esa entidad mantenía una línea de gaseosas de primera línea, que basados en un análisis ético llegaron a la conclusión que no querían estar en esa misma bolsa. Para esas instituciones entonces "el costo no es solo la multa", dice Amirante, razón por la cual están permanentemente atentos a esas cuestiones.
Con respecto a nuestro país, Amirante señaló que uruguay es una plaza financiera fuerte y que además está sometido a "una realidad a la que no puede escapar: sus vecinos, Argentina y Brasil". Contó que los vecinos ejercieron una enorme presión para controlar la evasión de dinero de sus sistemas, y por ello el GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional) posó su vista sobre Uruguay, y eso condujo a que el país tenga una normativa muy estricta, especialmente en el llamado "enfoque basado en riesgos".
De pasada, Amirante dejó entrever que esta situación también marca cierta "hipocresía del mercado", ya que ambos países, que tanta presión pusieron sobre el nuestro para afinar controles, están ellos sensiblemente atrasados. Argentina y Brasil son países de mayor carga impositiva que Uruguay, y por eso la imperiosa necesidad de evitar escapes.
Preguntado sobre cuáles son las principales formas de lavado de activos dijo que realmente es una pregunta difícil de responder, ya que "si se supieran, las estaríamos combatiendo", y de ahí su afirmación inicial de que el delito va un par de pasos adelante. Amirante afirmó que siempre están en la mira todas aquellas vías que muevan grandes cantidades de dinero en efectivo, como por ejemplo la construcción, que en muchos casos se da con un elevado grado de informalidad en la mano de obra. Pero paralelamente se producen casos como el de la brasilera Odebrecht, que tiene decenas de miles de empleados y todos formalizados, y que también son investigados por lavado de activos.
En lo que refiere al Reporte de Operaciones Sospechosas (ROS), dijo que los bancos ya hace diez años se han subido a ese tren, pero que por ejemplo los escribanos son más recientes en esto, y por eso se reciben menos reportes de su parte. Amirante se mostró confiado en este punto: "esto es como un músculo; vas al gimnasio, y con el tiempo mejorás. Hoy son pocos escribanos que reportan, pero con el tiempo va a aumentar el número", afirmó.
En lo que tiene que ver con la relación entre lavado de dinero y financiamiento del terrorismo, señaló Amirante que entiende que son dos cosas bien diferentes. "En el lavado de activos, estamos ante dinero ilícito que ingresa al mercado legal. En lo que tiene que ver con el financiamiento del terrorismo, estamos frente a la situación contraria: dinero lícito que va al mercado ilegal".
Dijo que en esta última actividad los movimientos son de cantidades pequeñas, lo que hace difícil el monitoreo. Contó que, por ejemplo, en todo lo previo y el desenlace de los atentado a las Torres Gemelas en 2001, el dinero se movía a través de remesas familiares, vía compañías que se dedican a eso.
Sin embargo, después del 11S se juntaron los delitos, aunque desde el vamos no tienen vinculación entre ellos, destacó.
En lo que refiere a si las autoridades de los países de la región coordinan las operaciones fue enfático al afirmar que sí. Como ejemplo, citó el sonado caso del allanamiento a las oficinas ubicadas en Zona Franca de Montevideo del Royal Bank of Canada (RBC), realizado a pedido de autoridades judiciales argentinas, en agosto de 2013. Ello condujo a que el RBC cancelara unos meses después su operativa en Uruguay, cosa que fue criticada por algunos hombres de negocios, que afirmaban que ello repercutía de forma negativa en el país. Sin embargo, en ese momento, y ante el retiro de la entidad bancaria, el entonces secretaria de Presidencia, Homero Guerrero, señaló que en su criterio era "totalmente al revés. Repercute de forma positiva en el país porque demuestra un control y que Uruguay se está adaptando a los nuevos tiempos".
El seminario sobre prevención de lavado de dinero, ética y cumplimiento destinado a sujetos obligados, como el sector financiero, inmobiliario, fundaciones y remeseras, se llevará a cabo en el Ball Room del Sheraton Hotel Montevideo de 8:30 a 17:30 hs. Según los organizadores "servirá de contenido práctico y específico para funcionar como una actualización para los distintos actores involucrados en la problemática mundial que significa el Lavado de Dinero, el Financiamiento del Terrorismo y la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva".
Respecto al porqué de la necesidad de realizar este tipo de actividades y actualizaciones, Juan Cruz Amirante señaló que en generales, las organizaciones delictivas van uno o dos pasos delante de las instituciones financieras, razón por la cual se requiere están en permanente actualización.
(Juan Cruz Amirante)
Preguntado respecto a cómo entra la ética en los análisis de estos temas, donde generalmente se mueven cantidades inimaginables de dinero, el especialista destacó que juega un papel muy importante. Poniendo como ejemplo el caso de empresas que comercializan armas, sostuvo que a muchas instituciones financieras se les platea un dilema ético respecto a trabajar con esos clientes, más allá de la legalidad que pueda tener el negocio. "Hay un tema de imagen, y las instituciones financieras prestan mucha atención a ello", manifestó.
Contó el sonado caso de un banco que debió pagar una multa de más de 340 millones de dólares por su vinculación en el sonado caso Madoff, y que sin embargo sus mayores perjuicios vinieron después de esa multa y fueron aún mayores, como por ejemplo las derivaciones del cierre de todas las cuentas que con esa entidad mantenía una línea de gaseosas de primera línea, que basados en un análisis ético llegaron a la conclusión que no querían estar en esa misma bolsa. Para esas instituciones entonces "el costo no es solo la multa", dice Amirante, razón por la cual están permanentemente atentos a esas cuestiones.
Con respecto a nuestro país, Amirante señaló que uruguay es una plaza financiera fuerte y que además está sometido a "una realidad a la que no puede escapar: sus vecinos, Argentina y Brasil". Contó que los vecinos ejercieron una enorme presión para controlar la evasión de dinero de sus sistemas, y por ello el GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional) posó su vista sobre Uruguay, y eso condujo a que el país tenga una normativa muy estricta, especialmente en el llamado "enfoque basado en riesgos".
De pasada, Amirante dejó entrever que esta situación también marca cierta "hipocresía del mercado", ya que ambos países, que tanta presión pusieron sobre el nuestro para afinar controles, están ellos sensiblemente atrasados. Argentina y Brasil son países de mayor carga impositiva que Uruguay, y por eso la imperiosa necesidad de evitar escapes.
Preguntado sobre cuáles son las principales formas de lavado de activos dijo que realmente es una pregunta difícil de responder, ya que "si se supieran, las estaríamos combatiendo", y de ahí su afirmación inicial de que el delito va un par de pasos adelante. Amirante afirmó que siempre están en la mira todas aquellas vías que muevan grandes cantidades de dinero en efectivo, como por ejemplo la construcción, que en muchos casos se da con un elevado grado de informalidad en la mano de obra. Pero paralelamente se producen casos como el de la brasilera Odebrecht, que tiene decenas de miles de empleados y todos formalizados, y que también son investigados por lavado de activos.
En lo que refiere al Reporte de Operaciones Sospechosas (ROS), dijo que los bancos ya hace diez años se han subido a ese tren, pero que por ejemplo los escribanos son más recientes en esto, y por eso se reciben menos reportes de su parte. Amirante se mostró confiado en este punto: "esto es como un músculo; vas al gimnasio, y con el tiempo mejorás. Hoy son pocos escribanos que reportan, pero con el tiempo va a aumentar el número", afirmó.
En lo que tiene que ver con la relación entre lavado de dinero y financiamiento del terrorismo, señaló Amirante que entiende que son dos cosas bien diferentes. "En el lavado de activos, estamos ante dinero ilícito que ingresa al mercado legal. En lo que tiene que ver con el financiamiento del terrorismo, estamos frente a la situación contraria: dinero lícito que va al mercado ilegal".
Dijo que en esta última actividad los movimientos son de cantidades pequeñas, lo que hace difícil el monitoreo. Contó que, por ejemplo, en todo lo previo y el desenlace de los atentado a las Torres Gemelas en 2001, el dinero se movía a través de remesas familiares, vía compañías que se dedican a eso.
Sin embargo, después del 11S se juntaron los delitos, aunque desde el vamos no tienen vinculación entre ellos, destacó.
En lo que refiere a si las autoridades de los países de la región coordinan las operaciones fue enfático al afirmar que sí. Como ejemplo, citó el sonado caso del allanamiento a las oficinas ubicadas en Zona Franca de Montevideo del Royal Bank of Canada (RBC), realizado a pedido de autoridades judiciales argentinas, en agosto de 2013. Ello condujo a que el RBC cancelara unos meses después su operativa en Uruguay, cosa que fue criticada por algunos hombres de negocios, que afirmaban que ello repercutía de forma negativa en el país. Sin embargo, en ese momento, y ante el retiro de la entidad bancaria, el entonces secretaria de Presidencia, Homero Guerrero, señaló que en su criterio era "totalmente al revés. Repercute de forma positiva en el país porque demuestra un control y que Uruguay se está adaptando a los nuevos tiempos".