Trump patea el tablero y Argentina se sacude
Frente de tensión en los mercados globales por la suba de aranceles
Por Federico Kucher
5 de marzo de 2025
Acciones de empresas argentinas que cotizan en Wall Street llegaron a bajar 5 por ciento.. Imagen: AFP
La puesta en vigencia de nuevos aranceles a Canadá, México y China sacudió las bolsas internacionales y tuvo replicas en activos argentinos. Las políticas de proteccionismo comercial que impulsa Donald Trump en Estados Unidos producen un frente de tensión para los mercados globales y ya tienen correlatos en la Argentina. La puesta en vigencia este martes de nuevos aranceles a los bienes que la economía norteamericana compra desde Canadá, México y China sacudió a las bolsas internacionales y tuvo efecto replica en los activos bursátiles argentinos. Las acciones de empresas locales que cotizan en Wall Street llegaron a perder hasta 5 por ciento en las primeras horas de la jornada. Las pérdidas fueron moderándose hasta 3 por ciento con el correr de la rueda pero quedó latente un clima de fuerte volatilidad.
En el mercado consideran que el reverdecer del proteccionismo comercial en Estados Unidos amenaza el crecimiento mundial. El planteo es que afectará la expansión de economías emergentes como la Argentina. La respuesta de los inversores es desprenderse de los activos con más riesgo y, por este motivo, las acciones y bonos argentinos suman otro problema en puerta.
La guerra comercial que impulsa Estados Unidos llega en un mal momento para la economía local. El país enfrenta serias dificultades para recomponer el consumo y el ritmo de crecimiento de la economía real. Al mismo tiempo, los activos bursátiles, que tuvieron un 2024 extraordinario, empezaron este año con fuertes vaivenes de precios y acumulan importantes caídas.
Este cambio de tendencia en el optimismo de los inversores con los activos argentinos se explica por distintos elementos. Entre ellos se destacan la dificultad para sumar reservas internacionales, la falta de precisiones en el acuerdo que busca cerrar el gobierno con el Fondo Monetario Internacional y el escándalo que generó la estafa con la criptomoneda $LIBRA. A todo este combo de presiones se suma ahora la guerra comercial, que parece escalar a paso firme y promete consecuencias impredecibles.
Una de las medidas principales de la política de Trump fue la aplicación de un arancel del 25 por ciento a productos importados desde México y Canadá. Además, se impuso un recargo del 10 por ciento sobre importaciones desde China. Argentina también se vio impactada por esta política proteccionista de Estados Unidos a partir de aranceles aplicados al aluminio, al acero y a todo un conjunto de productos agroindustriales.
Como ejemplo de este último punto se destaca el impacto sobre los cítricos, principalmente el limón. Las ventas de la agroindustria a Estados Unidos suman cerca de 2000 millones de dólares por año y, una caída de este mercado provoca un efecto directo sobre las economías regionales. Un sector que durante los últimos meses viene multiplicando sus quejas por la apreciación cambiaria y el dólar oficial virtualmente quieto en torno de los 1050 pesos.
Guerra comercial
En el plano internacional, Canadá y México fueron dos de las economías que quedaron más expuestas a las políticas de proteccionismo de Estados Unidos y preparan una batería de medidas como respuesta. Para empezar Canadá anunció la aplicación de aranceles equivalentes a 155.000 millones de dólares en represalia a las tarifas impuestas por Trump. México también tiene en la agenda medidas similares. Por su parte, China respondió con aranceles adicionales del 10 al 15 por ciento a productos agrícolas provenientes de Estados Unidos.
La estrategia proteccionista de Trump parece ser un arma de doble filo porque impulsa una guerra comercial que tiene efectos en cadena.
Una de las discusiones en Canadá pasa por ejemplo por una propuesta de aplicar un 100 por ciento de impuestos a los autos de Tesla, la empresa de Elon Musk, quien es mano derecha de Trump. Hasta ahora estos autos se vendían sin trabas y habían crecido fuertemente en los últimos años.
Otro de los ejemplos de “respuestas estratégicas” que podrían implementarse Canadá se concentran en la provincia de Ontario, el corazón industrial de ese país. El gobernador de Ontario, Doug Ford, aseguró que “hay que contestar con represalias equivalentes a las que imponga Trump, tiene que ser dólar por dólar”. Entre sus declaraciones agregó que “vamos a cancelar inmediatamente Starlink, de Elon Musk. No es que 100 millones de dólares sea mucho para él, pero es el principio. Y he ordenado que la adquisición de unos 30.000 millones de dólares en productos evite Estados Unidos y asegurar que se compren en Ontario o en el resto del país”.
La puesta en vigencia de nuevos aranceles a Canadá, México y China sacudió las bolsas internacionales y tuvo replicas en activos argentinos. Las políticas de proteccionismo comercial que impulsa Donald Trump en Estados Unidos producen un frente de tensión para los mercados globales y ya tienen correlatos en la Argentina. La puesta en vigencia este martes de nuevos aranceles a los bienes que la economía norteamericana compra desde Canadá, México y China sacudió a las bolsas internacionales y tuvo efecto replica en los activos bursátiles argentinos. Las acciones de empresas locales que cotizan en Wall Street llegaron a perder hasta 5 por ciento en las primeras horas de la jornada. Las pérdidas fueron moderándose hasta 3 por ciento con el correr de la rueda pero quedó latente un clima de fuerte volatilidad.
En el mercado consideran que el reverdecer del proteccionismo comercial en Estados Unidos amenaza el crecimiento mundial. El planteo es que afectará la expansión de economías emergentes como la Argentina. La respuesta de los inversores es desprenderse de los activos con más riesgo y, por este motivo, las acciones y bonos argentinos suman otro problema en puerta.
La guerra comercial que impulsa Estados Unidos llega en un mal momento para la economía local. El país enfrenta serias dificultades para recomponer el consumo y el ritmo de crecimiento de la economía real. Al mismo tiempo, los activos bursátiles, que tuvieron un 2024 extraordinario, empezaron este año con fuertes vaivenes de precios y acumulan importantes caídas.
Este cambio de tendencia en el optimismo de los inversores con los activos argentinos se explica por distintos elementos. Entre ellos se destacan la dificultad para sumar reservas internacionales, la falta de precisiones en el acuerdo que busca cerrar el gobierno con el Fondo Monetario Internacional y el escándalo que generó la estafa con la criptomoneda $LIBRA. A todo este combo de presiones se suma ahora la guerra comercial, que parece escalar a paso firme y promete consecuencias impredecibles.
Una de las medidas principales de la política de Trump fue la aplicación de un arancel del 25 por ciento a productos importados desde México y Canadá. Además, se impuso un recargo del 10 por ciento sobre importaciones desde China. Argentina también se vio impactada por esta política proteccionista de Estados Unidos a partir de aranceles aplicados al aluminio, al acero y a todo un conjunto de productos agroindustriales.
Como ejemplo de este último punto se destaca el impacto sobre los cítricos, principalmente el limón. Las ventas de la agroindustria a Estados Unidos suman cerca de 2000 millones de dólares por año y, una caída de este mercado provoca un efecto directo sobre las economías regionales. Un sector que durante los últimos meses viene multiplicando sus quejas por la apreciación cambiaria y el dólar oficial virtualmente quieto en torno de los 1050 pesos.
Guerra comercial
En el plano internacional, Canadá y México fueron dos de las economías que quedaron más expuestas a las políticas de proteccionismo de Estados Unidos y preparan una batería de medidas como respuesta. Para empezar Canadá anunció la aplicación de aranceles equivalentes a 155.000 millones de dólares en represalia a las tarifas impuestas por Trump. México también tiene en la agenda medidas similares. Por su parte, China respondió con aranceles adicionales del 10 al 15 por ciento a productos agrícolas provenientes de Estados Unidos.
La estrategia proteccionista de Trump parece ser un arma de doble filo porque impulsa una guerra comercial que tiene efectos en cadena.
Una de las discusiones en Canadá pasa por ejemplo por una propuesta de aplicar un 100 por ciento de impuestos a los autos de Tesla, la empresa de Elon Musk, quien es mano derecha de Trump. Hasta ahora estos autos se vendían sin trabas y habían crecido fuertemente en los últimos años.
Otro de los ejemplos de “respuestas estratégicas” que podrían implementarse Canadá se concentran en la provincia de Ontario, el corazón industrial de ese país. El gobernador de Ontario, Doug Ford, aseguró que “hay que contestar con represalias equivalentes a las que imponga Trump, tiene que ser dólar por dólar”. Entre sus declaraciones agregó que “vamos a cancelar inmediatamente Starlink, de Elon Musk. No es que 100 millones de dólares sea mucho para él, pero es el principio. Y he ordenado que la adquisición de unos 30.000 millones de dólares en productos evite Estados Unidos y asegurar que se compren en Ontario o en el resto del país”.
