Noam Chomsky y las 10 Estrategias de Manipulación Mediática
El lingüista Noam Chomsky elaboró la lista de las “10 Estrategias de Manipulación” a través de los medios
1. La estrategia de la distracción El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las élites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes.
La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
2. Crear problemas y después ofrecer soluciones. Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.
3. La estrategia de la gradualidad. Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.
4. La estrategia de diferir. Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.
5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad. La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)”.
6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión. Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos�
7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad. Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposible de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad. Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto�
9. Reforzar la autoculpabilidad. Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se auto desvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!
10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídos y utilizados por las élites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.
“Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando.
Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror. Haga circular esta información”.
Rodolfo Walsh
4 ago 2011
13 jul 2011
Nota de Rebelion sobre Europa de Eric Toussaint
Ocho propuestas urgentes para otra Europa
por Eric Toussaint
La crisis sacude a la Unión Europea hasta los cimientos. Para varios países la soga de la deuda pública se cierra sobre ellos y están asfixiados por los mercados financieros. Con la complicidad activa de los gobiernos, de la Comisión Europea, del Banco Central Europeo y del FMI, las instituciones financieras responsables de la crisis se enriquecen y especulan sobre las deudas de los Estados. La patronal aprovecha la situación para lanzar una ofensiva brutal contra una serie de derechos económicos y sociales de la mayoría de la población.
La reducción del déficit público no debe hacerse reduciendo los gastos sociales públicos, sino luchando contra el gran fraude fiscal y gravando más el capital, las transacciones financieras, el patrimonio y las rentas de los más ricos. Para reducir el déficit, también es necesario reducir drásticamente los gastos de armamento, así como otros gastos socialmente inútiles y peligrosos para el medio ambiente. En cambio es fundamental aumentar los gastos sociales, especialmente para amortiguar los efectos de la depresión económica. Pero más allá hay que considerar esta crisis como una posibilidad de romper con la lógica capitalista y realizar un cambio radical de sociedad. La nueva lógica que hay que construir deberá romper con el productivismo, incluir la cuestión ecológica, erradicar las diversas formas de opresión [racial, patriarcal, etc.] y promover los bienes comunes.
Para eso es necesario construir un frente anticrisis, tanto a escala europea como localmente, con el fin de agrupar las energías para crear una relación de fuerza favorable a la puesta en práctica de soluciones radicales centradas en la justicia social y climática. Desde agosto de 2010 el CADTM ha formulado ocho propuestas relativas a la actual crisis europea |1|. El elemento central es la necesidad de proceder a la anulación de la parte ilegitima de la deuda pública. Para ello, el CADTM recomienda la realización de una auditoría de la deuda pública efectuada bajo control ciudadano. En determinadas circunstancias dicha auditoría deberá combinarse con la suspensión unilateral y soberana del reembolso de la deuda pública. El objetivo de la auditoría es llegar a la anulación/repudio de la parte ilegal de la deuda pública y a una fuerte reducción del resto de la deuda.
La reducción drástica de la deuda pública es una condición necesaria pero insuficiente para sacar a los países de la Unión Europea de la crisis. Hay que completarla con toda una serie de medidas de gran amplitud en diferentes ámbitos.
1. Realizar una auditoría de la deuda pública con el fin de anular la parte ilegitima
Una parte importante de la deuda pública de los Estados de la Unión Europea es ilegitima porque es el resultado de una política deliberada de gobiernos que decidieron privilegiar sistemáticamente a una clase social, la clase capitalista, y a otros sectores favorecidos, en detrimento del resto de la sociedad. La rebaja de impuestos sobre las rentas altas de las personas físicas, sobre sus patrimonios y sobre los beneficios de las empresas privadas, han llevado a los poderes públicos a incrementar la deuda pública con el fin de cubrir el agujero producido por esa rebaja. Así, dichos poderes públicos han aumentado fuertemente la carga impositiva sobre los hogares modestos que constituyen la mayoría de la población. A eso hay que añadir, desde 2007-2008, el rescate de las instituciones financieras privadas, responsables de la crisis, que ha costado muy caro a las finanzas públicas y ha hecho estallar la deuda pública. La disminución de los ingresos provocada por la crisis que han causado las instituciones financieras privadas, una vez más se ha tenido que cubrir con préstamos masivos. Ese marco general señala claramente la ilegitimidad de una parte importante de las deudas públicas. A eso se añade, en cierto número de países sometidos al chantaje de los mercados financieros, otras fuentes evidentes de ilegitimidad. Las nuevas deudas contraídas a partir de 2008 se han asumido en un contexto en el que los banqueros [y otras instituciones financieras privadas] utilizan el dinero conseguido de los bancos centrales a tipos de interés bajos para especular y obligar a los poderes públicos a aumentar las remuneraciones que éstos tienen que reembolsar. Además en países como Grecia, Hungría, Letonia, Rumania o Irlanda, los préstamos concedidos por el FMI se han combinado con condiciones que constituyen una violación de los derechos económicos y sociales de las poblaciones. Con el agravante de que esas condiciones, una vez más, favorecen a los banqueros y a las demás instituciones financieras. También por estas razones son ilegitimas. Finalmente, en algunos casos se ha hecho burla de la voluntad popular: por ejemplo, mientras que en febrero de 2011 una amplia mayoría de los irlandeses votó contra los partidos que hicieron regalos a los bancos y aceptaron las condiciones impuestas por la Comisión Europea y el FMI, la nueva coalición gubernamental continúa grosso modo la misma política que sus predecesores. Más generalmente, en algunos países se asiste a la marginación del poder legislativo en beneficio de una política de hechos consumados impuesta por el poder ejecutivo que pasa los acuerdos con la Comisión Europea y el FMI. A continuación el poder ejecutivo presenta al Parlamento ese acuerdo «lo tomas o lo dejas», que llega incluso a organizar un debate sin votación en asuntos de primer orden. La tendencia del poder ejecutivo a transformar el órgano legislativo en una oficina de registro se refuerza.
En ese inquietante contexto, sabiendo que antes o después una serie de Estados se enfrentará al riesgo concreto de la imposibilidad de pagar por falta de liquidez y que el reembolso de una deuda ilegitima es inaceptable por principios, conviene pronunciarse claramente por la anulación de las deudas ilegitimas. Anulación cuyo coste debe recaer sobre los culpables de la crisis, a saber, las instituciones financieras privadas.
Para los países como Grecia, Irlanda, Portugal o los países de Europa del Este [y los de fuera de la Unión Europea, como Islandia], es decir, los países que están sometidos al chantaje de los especuladores, del FMI y de otros organismos como la Comisión Europea, conviene recurrir a una moratoria unilateral del reembolso de la deuda pública. Esta propuesta se hace popular en los países más afectados por la crisis. A finales de noviembre de 2010 en Dublín, en una encuesta de opinión realizada por teléfono a cerca de 500 personas, el 57% de los irlandeses preguntados se pronunció a favor de la suspensión del pago de la deuda [«default» en inglés] más que por la ayuda de emergencia del FMI y Bruselas. «Default ! say the people» [el pueblo por la suspensión del pago] titulaba el Sunday Independent, principal diario de la isla. Según el CADTM, ese tipo de moratoria unilateral debe unirse a la realización de una auditoría de los préstamos públicos [con participación ciudadana]. La auditoría debe permitir que se aporten al gobierno y a la opinión pública las pruebas y los argumentos necesarios para la anulación/repudio de la parte de la deuda identificada como ilegitima. El derecho internacional y el derecho interno de los países ofrecen una base legal para ese tipo de acción soberana unilateral de anulación/repudio.
A los países que recurran a la suspensión del pago, con la experiencia sobre la cuestión de la deuda de los países del sur, el CADTM pone en guardia con respecto a una medida insuficiente, una simple suspensión del reembolso de la deuda, que puede revelarse contraproducente. Hay que hacer la moratoria sin añadido de intereses de demora sobre las sumas no reembolsadas.
En otros países como Francia, Gran Bretaña o Alemania, no es imperativo decretar una moratoria unilateral durante la realización de la auditoría. Pero también debe llevarse a cabo allí con el fin de determinar la amplitud de la anulación/repudio a la que habrá que proceder. En caso de deterioro de la coyuntura internacional la suspensión del pago pueden llegar a ser necesaria incluso para los países que se creen a salvo del chantaje de los prestamistas privados.
La participación ciudadana es la condición imperativa para garantizar la objetividad y la transparencia de la auditoría. Esta comisión de auditoría deberá estar compuesta especialmente por los diferentes órganos del Estado afectados, así como por auditores expertos de las finanzas públicas, economistas, juristas, constitucionalistas, representantes de los movimientos sociales… y permitirá determinar las distintas responsabilidades en el proceso de endeudamiento y exigir que los responsables, tanto nacionales como internacionales, rindan cuentas a la justicia. En caso de hostilidad de un gobierno con respecto a la auditoría, será necesario constituir una comisión ciudadana de auditoría sin participación gubernamental
En cualquier caso es legítimo que las instituciones privadas y las personas físicas de altas rentas que poseen los títulos de esas deudas asuman el coste de la anulación de deudas soberanas ilegitimas, ya que son ampliamente responsables de la crisis de la cual, por añadidura, se beneficiaron largamente. El hecho de que deban asumir el coste de la anulación no es más que una justa vuelta hacia una mayor justicia social. Es importante elaborar un registro de los propietarios de títulos con el fin de indemnizar a los ciudadanos y ciudadanas con rentas bajas y medias que haya entre ellos.
Si la auditoría demuestra la existencia de delitos relacionados con el endeudamiento ilegal, hay que condenar firmemente a sus autores a pagar las reparaciones y no permitir que se libren de las penas de cárcel en función de la gravedad de sus actos. Hay que exigir justicia contra las autoridades que pusieron en marcha los préstamos ilegales.
En cuanto a las deudas que no están afectadas de ilegitimidad, convendría imponer un esfuerzo a los acreedores en términos de reducción del stock y de los tipos de interés, así como una ampliación del período de reembolso. También seria conveniente efectuar una discriminación positiva a favor de los pequeños propietarios de títulos de la deuda pública que convendría reembolsar normalmente. Por otra parte, el montante de la parte del presupuesto del Estado destinado al reembolso de la deuda deberá limitarse en función de la situación de la economía, de la capacidad de reembolso de los poderes públicos y del carácter irreducible de los gastos sociales. Hay que inspirarse en lo que se hizo con Alemania tras la Segunda Guerra Mundial. El Acuerdo de Londres de 1953 sobre la deuda alemana, que consistía, en particular, en reducir el 62% del stock de la deuda, estipulaba que la relación entre el servicio de la deuda y los ingresos de las exportaciones no debía sobrepasar el 5%. |2| Se podría definir una ratio de este tipo: la suma asignada al reembolso de la deuda no puede exceder el 5% de los ingresos del Estado. También hay que adoptar un marco legal para evitar que se repita la crisis que comenzó en 2007-2008: prohibición de socializar las deudas privadas, obligación de organizar una auditoría permanente de la política de endeudamiento público con participación ciudadana, imprescriptibilidad de los delitos relacionados con el endeudamiento ilegal, nulidad de las deudas ilegales…
2. Detener los planes de austeridad, son injustos y profundizan la crisis
De acuerdo con las exigencias del FMI, los gobiernos de los países europeos han optado por imponer a sus pueblos políticas de estricta austeridad, con claros recortes en el gasto público: jubilaciones en la función pública, congelación e incluso rebaja de los salarios de los funcionarios, reducción del acceso a algunos servicios públicos vitales y de protección social, retraso de la edad de jubilación. A la inversa las empresas públicas reclaman -y obtienen- un aumento de sus tarifas mientras que el coste del acceso a la sanidad y la educación también se revisa al alza. Crece el recurso a la subida de impuestos indirectos particularmente injustos, en especial el IVA. Las empresas públicas del sector competente se privatizan masivamente. Las políticas de austeridad que se ponen en práctica se están empujando a un nivel nunca visto desde la Segunda Guerra Mundial. De esta forma los efectos de la crisis se duplican por los presuntos remedios que se dirigen sobre todo a proteger los intereses de los propietarios de capitales. En resumen, ¡los banqueros beben, los pueblos pagan!
Pero los pueblos cada vez toleran menos la injusticia de esas reformas caracterizadas por una amplia regresión social. En términos relativos son los trabajadores, los parados y las familias más modestas quienes más tienen que contribuir para que los Estados continúen engordando a los acreedores. Y entre las poblaciones más afectadas las mujeres ocupan el primer puesto, ya que la actual organización de la economía y la sociedad patriarcal hace que caigan sobre ellas los desastrosos efectos de la precariedad, del trabajo parcial y mal pagado. Afectadas directamente por la degradación de los servicios sociales públicos, ellas pagan un precio muy alto. La lucha para imponer otra lógica es indisociable de la lucha por el respeto total de los derechos de las mujeres.
3. Instaurar una verdadera justicia fiscal europea y una justa redistribución de la riqueza. Prohibir las transacciones con los paraísos judiciales y fiscales. Luchar contra el fraude fiscal masivo de las grandes empresas y de los más ricos
Desde 1980 no han dejado de bajar los impuestos directos sobre las rentas más elevadas y las grandes empresas. Así en la Unión Europea, de 2000 a 2008, las tasas superiores del impuesto sobre la renta y el impuesto de sociedades bajaron respectivamente 7 y 8,5 puntos. Esos cientos de miles de millones de euros de regalos fiscales se orientaron esencialmente hacia la especulación y la acumulación de riquezas por parte de los más ricos.
Hay que diseñar una reforma profunda de la fiscalidad con el objetivo de la justicia social [reducir al mismo tiempo las rentas y el patrimonio de los más ricos para aumentar los de la mayoría de la población] armonizándola en el plano europeo con el fin de impedir el dumping fiscal. |3| Se trata de aumentar los ingresos públicos, especialmente por medio del impuesto progresivo sobre la renta de las personas físicas más ricas [la tasa marginal sobre el tramo más elevado de renta debe llevarse al 90% |4|], el impuesto sobre el patrimonio a partir de cierto montante y el impuesto de sociedades. Este aumento de los ingresos debe ir parejo con una rápida rebaja del precio del acceso a los bienes y servicios de primera necesidad [alimentos básicos, agua, electricidad, calefacción, transporte público, material escolar...] especialmente por una reducción fuerte y concreta del IVA de dichos bienes y servicios vitales. Se trata también de adoptar una política fiscal que favorezca la protección del medio ambiente gravando de forma disuasiva a las industrias contaminantes.
La Unión Europea debe adoptar una tasa sobre las transacciones financieras, especialmente sobre los mercados de intercambios, con el fin de aumentar los ingresos de los poderes públicos.
Los diferentes G20, a pesar de sus declaraciones de intenciones, en realidad se han negado a atacar a los paraísos judiciales y fiscales. Una medida sencilla para luchar contra los paraísos fiscales [que todos los años hacen perder a los países del norte, y también a los del sur, recursos vitales para el desarrollo de las poblaciones], consiste para un Parlamento en prohibir a todas las personas físicas y a todas las empresas presentes en su territorio realizar cualquier transacción que pase por los paraísos fiscales, bajo pena de una multa de un importe equivalente. Además hay que erradicar esos agujeros negros de las finanzas, de tráficos criminales, de corrupción y de delincuencia de cuello blanco.
El fraude fiscal priva a la colectividad de medios considerables y actúa contra el empleo. Los medios públicos consecuentes deben ponerse al servicio del ministerio de finanzas para luchar eficazmente contra ese fraude. Los resultados deben hacerse públicos y sancionar severamente a los culpables.
4. Poner en orden los mercados financieros, en especial por la creación de un registro de los propietarios de títulos, por la prohibición de las ventas a descubierto y la especulación en una serie de sectores. Crear una agencia pública europea de calificación
La especulación a escala mundial representa varias veces el total de las riquezas producidas en el planeta. Los sofisticados montajes de la mecánica financiera la vuelven totalmente incontrolable. Los engranajes que suscita alteran la estructura de la economía real. La opacidad sobre las transacciones financieras es la norma. Para gravar a los acreedores en el origen, es necesario identificarlos. La dictadura de los mercados financieros debe acabar y se debe prohibir la especulación en toda una serie de sectores. Es conveniente prohibir la especulación con los títulos de la deuda pública, con las divisas y con los alimentos. |5| También se deben prohibir las ventas a descubierto |6| y los Credit Default Swaps se deben regular estrictamente. Hay que cerrar los mercados de contratación directa de productos derivados, que son verdaderos agujeros negros que escapan a toda reglamentación y vigilancia.
El sector de las agencias de calificación también debe reformarse y enmarcarse estrictamente. Lejos de una herramienta de evaluación científica objetiva, esas agencias son, estructuralmente, partes interesadas de la globalización neoliberal y en varias ocasiones han desencadenado repeticiones de catástrofes sociales. En efecto, la rebaja de la nota de un país implica una subida de los tipos de interés sobre los préstamos que se le han concedido. En consecuencia la situación económica del país en cuestión se deteriora todavía más. El comportamiento borreguil de los especuladores multiplica las dificultades encontradas que pesarán todavía más duramente sobre las poblaciones. La marcada sumisión de las agencias de calificación a los medios financieros estadounidenses las convierte en actores principales a nivel internacional, y su responsabilidad en el desencadenamiento y la evolución de la crisis no ha sido suficientemente aclarada por los medios de comunicación. La estabilidad económica de los países europeos se ha dejado en manos de esas agencias de calificación, sin protección, sin medios serios de control por parte de los poderes públicos. Es imprescindible la creación de una agencia pública de calificación para escapar de este callejón sin salida.
5. Transferir los bancos al sector público bajo control ciudadano
Tras decenios de desviaciones financieras y privatizaciones ya es hora de pasar el sector crediticio al dominio público. Los Estados deben recuperar su capacidad de controlar y orientar la actividad económica y financiera. También deben contar con instrumentos para realizar inversiones y financiar el gasto público reduciendo al mínimo el endeudamiento con instituciones financieras privadas y/o extranjeras. Hay que expropiar los bancos, sin indemnización, y transferirlos al sector público bajo control ciudadano.
En algunos casos, la expropiación de los bancos privados puede representar un coste para el Estado debido a las deudas puedan haber acumulado. El coste en cuestión debe recuperarse del patrimonio general de los grandes accionistas. En efecto, las empresas privadas que son accionistas de los bancos y que los llevaron al abismo mientras obtenían jugosos beneficios, son propietarias de una parte de su patrimonio en otros sectores de la economía. Debe hacerse, pues, una punción en el patrimonio general de los accionistas. Se trata de evitar al máximo la socialización de las pérdidas. El ejemplo irlandés es emblemático. La forma en que se efectuó la nacionalización del Allied Bank irlandés es inaceptable. Hay que aprender de eso.
6. Socializar las numerosas empresas y servicios privatizados desde 1980
Una característica de los últimos treinta años ha sido la privatización de muchas empresas y servicios públicos. Desde los bancos al sector industrial pasando por correos, las telecomunicaciones, la energía y el transporte, los gobiernos han entregado al sector privado gran parte de la economía, perdiendo al mismo tiempo toda la capacidad de regularla. Esos bienes públicos, procedentes del trabajo colectivo, deben volver al sector público. Se trata de crear nuevas empresas públicas y adaptar los servicios públicos según las necesidades de la población para responder, en particular, a la problemática del cambio climático, por ejemplo con la creación de un servicio público de aislamiento térmico de las viviendas.
7. Reducir drásticamente las horas de trabajo para crear empleos y aumentar los salarios y las pensiones
Distribuir de otra forma la riqueza es la mejor respuesta a la crisis. La parte de la riqueza creada destinada a los trabajadores se ha reducido considerablemente desde hace varios decenios mientras los acreedores y las empresas han aumentado sus beneficios para dedicarlos la especulación. El aumento de los salarios no sólo permite que las personas vivan con dignidad, sino que también fortalece los medios utilizados para financiar la protección social y las pensiones.
Al reducir el tiempo de trabajo sin menguar los salarios y creando empleos, se mejora la calidad de vida de los trabajadores y se proporciona empleo a aquéllos que lo buscan. La reducción radical del tiempo de trabajo también ofrece la oportunidad de practicar un ritmo de vida diferente, una forma diferente de vivir en sociedad alejándonos del consumismo. El tiempo ganado para el ocio permitirá una mayor participación activa de las personas en la vida política, en el fortalecimiento de la solidaridad, en actividades de voluntariado y en la creatividad cultural.
8. Refundar democráticamente otra Unión Europea basada en la solidaridad
Varias disposiciones de los tratados que rigen la Unión Europea, la eurozona y el BCE deben derogarse. Por ejemplo, es necesario eliminar los artículos 63 y 125 del Tratado de Lisboa, que prohíben cualquier control de los movimientos de capitales y cualquier ayuda a un Estado en dificultades. También hay que abandonar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Y más allá, es necesario sustituir los tratados actuales por otros nuevos en el marco de un genuino proceso constituyente democrático para alcanzar un pacto de solidaridad de los pueblos a favor del empleo y la ecología.
Se debe revisar por completo la política monetaria así como la normativa y las prácticas del Banco Central Europeo. La incapacidad del poder político de obligar al BCE a emitir dinero es un obstáculo muy grave. Con la creación del BCE como entidad por encima de los gobiernos y de los pueblos, la UE tomó una decisión desastrosa, la del someter a los seres humanos a las finanzas y no a la inversa.
Mientras que muchos movimientos sociales denunciaron los rígidos y profundamente inadecuados estatutos, el BCE se ha visto obligado a cambiar de opinión en lo más álgido de la crisis modificando con urgencia el papel que le había sido asignado. Por desgracia el BCE accedió a hacerlo por razones equivocadas: no porque se tuvieran en cuenta los intereses de los pueblos, sino para preservar los de los acreedores. Es la prueba evidente de que hay que barajar y repartir las cartas de nuevo. El BCE debe tener el poder de financiar directamente a los Estados que desean lograr los objetivos sociales y medioambientales que integran perfectamente las necesidades básicas de la población.
En la actualidad, actividades económicas muy diferentes, como la inversión en la construcción de un hospital o un proyecto puramente especulativo, se financian de manera similar. El poder político debe, al menos plantearse, imponer costes muy diferentes a unos y otros: los bajos tipos de interés se deben reservar para inversiones socialmente justas y ambientalmente sostenibles, mientras que las tasas muy altas, incluso prohibitivas cuando la situación lo exige, deben aplicarse a las operaciones de tipo especulativo siendo también deseable que pura y simplemente se prohíban en ciertos sectores [véase más arriba].
Una Europa basada en la solidaridad y la cooperación debe dar la espalda a la competencia y la rivalidad que nivelan «por abajo». La lógica neoliberal ha conducido a la crisis y ha revelado su fracaso. Dicha lógica ha empujado los indicadores sociales a la baja: menos protección social, menos empleo, menos servicios públicos. Los que se han beneficiado de esta crisis lo han hecho pisoteando los derechos de la mayoría. ¡Los culpables han ganado, las víctimas pagan! Esta lógica, que subyace en todos los textos fundadores de la Unión Europea, comenzando por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, debe atacarse directamente: no se puede sostener. El objetivo prioritario debe ser otra Europa basada en la cooperación entre los Estados y la solidaridad entre los pueblos. Para ello, las políticas presupuestarias y fiscales no deben ser uniformes, ya que las economías europeas presentan grandes diferencias, pero hay que coordinarlas para que finalmente surja una nivelación «por arriba». Hay que imponer políticas globales a escala europea que incluyan inversiones públicas masivas para la creación de empleo público en áreas claves [de los servicios comunitarios a las energías renovables, de la lucha contra el cambio climático a los sectores sociales básicos].
Esta otra Europa democratizada debe, según el CADTM, trabajar para imponer principios no negociables: el fortalecimiento de la justicia fiscal y social, decisiones dirigidas a elevar el nivel y la calidad de vida de sus habitantes, el desarme y la reducción radical del gasto militar [incluida la retirada de las tropas europeas de Afganistán y la salida de la OTAN], optar por energías sostenibles sin recurrir a la nuclear, rechazo de los organismos modificados genéticamente [OGM]. También debe acabar resueltamente con su política de fortaleza sitiada frente a los inmigrantes y convertirse en un socio justo y verdaderamente solidario con los pueblos del Sur del planeta.
Traducido para Rebelión por Jorge Aldao y Caty R.
30 jun 2011
COMPROMISO DE MONTEVIDEO
“Compromiso de Montevideo”
“Los participantes del 2° Encuentro Latinoamericano por la Memoria, la Verdad y la Justicia, celebrado en la ciudad de Montevideo entre el 24 y 26 de junio de 2011, a 38 años del golpe de Estado en Uruguay y en el Día Internacional contra la Tortura, coincidimos en que en nuestros países se debe investigar, juzgar, penalizar, reparar y no olvidar los casos de tortura sufridos por nuestros pueblos, que indignan a nuestro sentimiento y condición humana, y constituye un crimen de lesa humanidad, es decir, imprescriptible, no amnistiable y pasible de persecución por la justicia internacional, cuando y donde fuera que se cometiere el delito, ya sea cuando las dictaduras del cono sur o por cualquier autoritarismo del presente.
Nos comprometemos contra la impunidad. Porque los impunes y los impunidores, militares o civiles, no deben continuar sin castigo, ya que la aplicación de la tortura en la región implicó un plan supranacional, practicado en forma sistemática, con idéntica metodología y desde los mismos manuales, para imponer desde las dictaduras un modelo político y social, que requería la eliminación de toda resistencia popular y la instauración del terrorismo de Estado, con sus muertes y desapariciones, antes que el autoritarismo permitiera una reinstitucionalización condicionada por la aceptación de distintos tipos de leyes de amnistía, punto final o autoperdón.
Nos comprometemos con los reclamos de las víctimas y sus familiares. Porque con la tortura se buscó la cosificación del ser humano, su deshumanización y su destrucción física y moral, para dañar no sólo el cuerpo de la carne y el hueso, torturado con el golpe, la picana, el tacho, la colgadura, el plantón o la violación y llegar hasta a la perdida de embarazos, sino también al cuerpo social, cultural y ético de convivencia, entretejido por la comprensión y la solidaridad, para generar el miedo y la desprotección de la sociedad, provocándole un daño transgeneracional con la interrupción de la continuidad del relato no oficial de su propia historia.
Nos comprometemos con la reparación a quienes padecieron la tortura. Porque la tortura no es un tema del pasado, sino que su daño, secuelas físicas o morales, se siguen viviendo en forma constante por quienes la sufrieron y su entorno, transformándola en un crimen permanente, porque es tan cruel el tormento como la posterior ausencia de políticas de reparación social a sus víctimas, quienes deben convivir con los impunes victimarios, y porque también es necesario repensar, desde una mirada de género y otras ópticas, las políticas de memoria, justicia y reparación, ante las características que la violencia represiva tuvo sobre hombres y mujeres.
Nos comprometemos con los juicios contra la tortura a nivel local e internacional. Porque las víctimas tienen el derecho de realizar las denuncias ante un sistema judicial independiente, que no debe estar sometido por el poder político, porque es un crimen imprescriptible que en cada país impone la justicia universal establecida por los convenios y tratados acordados desde la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 hasta las normas que lo tipifican en el tratado de Roma.
Nos comprometemos a impulsar una cultura y una educación que, basadas en los derechos humanos, sostengan la memoria. Porque es la cultura la que produce conceptos a partir de sus propias prácticas y herramientas, porque es la educación la que forja el aprendizaje y el conocimiento, porque ambas trasmiten y construyen la memoria colectiva que permitirá recordar y comprender lo ocurrido, para asegurar el nunca más al terrorismo de Estado. Un Estado que deberá ser vigilado por la sociedad, alerta en su conjunto, y a través de órganos autónomos de contralor”.
“Los participantes del 2° Encuentro Latinoamericano por la Memoria, la Verdad y la Justicia, celebrado en la ciudad de Montevideo entre el 24 y 26 de junio de 2011, a 38 años del golpe de Estado en Uruguay y en el Día Internacional contra la Tortura, coincidimos en que en nuestros países se debe investigar, juzgar, penalizar, reparar y no olvidar los casos de tortura sufridos por nuestros pueblos, que indignan a nuestro sentimiento y condición humana, y constituye un crimen de lesa humanidad, es decir, imprescriptible, no amnistiable y pasible de persecución por la justicia internacional, cuando y donde fuera que se cometiere el delito, ya sea cuando las dictaduras del cono sur o por cualquier autoritarismo del presente.
Nos comprometemos contra la impunidad. Porque los impunes y los impunidores, militares o civiles, no deben continuar sin castigo, ya que la aplicación de la tortura en la región implicó un plan supranacional, practicado en forma sistemática, con idéntica metodología y desde los mismos manuales, para imponer desde las dictaduras un modelo político y social, que requería la eliminación de toda resistencia popular y la instauración del terrorismo de Estado, con sus muertes y desapariciones, antes que el autoritarismo permitiera una reinstitucionalización condicionada por la aceptación de distintos tipos de leyes de amnistía, punto final o autoperdón.
Nos comprometemos con los reclamos de las víctimas y sus familiares. Porque con la tortura se buscó la cosificación del ser humano, su deshumanización y su destrucción física y moral, para dañar no sólo el cuerpo de la carne y el hueso, torturado con el golpe, la picana, el tacho, la colgadura, el plantón o la violación y llegar hasta a la perdida de embarazos, sino también al cuerpo social, cultural y ético de convivencia, entretejido por la comprensión y la solidaridad, para generar el miedo y la desprotección de la sociedad, provocándole un daño transgeneracional con la interrupción de la continuidad del relato no oficial de su propia historia.
Nos comprometemos con la reparación a quienes padecieron la tortura. Porque la tortura no es un tema del pasado, sino que su daño, secuelas físicas o morales, se siguen viviendo en forma constante por quienes la sufrieron y su entorno, transformándola en un crimen permanente, porque es tan cruel el tormento como la posterior ausencia de políticas de reparación social a sus víctimas, quienes deben convivir con los impunes victimarios, y porque también es necesario repensar, desde una mirada de género y otras ópticas, las políticas de memoria, justicia y reparación, ante las características que la violencia represiva tuvo sobre hombres y mujeres.
Nos comprometemos con los juicios contra la tortura a nivel local e internacional. Porque las víctimas tienen el derecho de realizar las denuncias ante un sistema judicial independiente, que no debe estar sometido por el poder político, porque es un crimen imprescriptible que en cada país impone la justicia universal establecida por los convenios y tratados acordados desde la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 hasta las normas que lo tipifican en el tratado de Roma.
Nos comprometemos a impulsar una cultura y una educación que, basadas en los derechos humanos, sostengan la memoria. Porque es la cultura la que produce conceptos a partir de sus propias prácticas y herramientas, porque es la educación la que forja el aprendizaje y el conocimiento, porque ambas trasmiten y construyen la memoria colectiva que permitirá recordar y comprender lo ocurrido, para asegurar el nunca más al terrorismo de Estado. Un Estado que deberá ser vigilado por la sociedad, alerta en su conjunto, y a través de órganos autónomos de contralor”.
12 jun 2011
NO PERDER EL RUMBO
A poco de transcurrir la primera parte del mandato
popular que ha confiado en el FRENTE AMPLIO la gestion
de gobierno, pareciera atravesar una zona de tormenta
en la que por supuesto,hay mucho de ficticio y mucho
mas de crisis interesadas, en la que aquellos que han
tenido mucha responsabilidad en llegar a esta situacion
se presentan en los "medios" como ejemplos de claridad
y civismo.Ello podria pasar desapercibido, si no fuera
porque la corporacion mediatica y financiera que maneja
los resortes de la produccion y el consumo dia a dia
vaticina desastres economicos y debacles bancarias y
acostumbrados al discurso unico, no les cabe que puedan
haber opiniones divergentes o miradas personales que
puedan enriquecer o no, las propuestas que se debaten.
Quizas la ingenuidad de pensar que quieren lo mejor
para el pais y no lo mejor para sus bolsillos, hace
que la espontaneidad del discurso y la transparencia
de las intenciones, sean alevosamente manipuladas para
crear conflictos y desmoralizar a una opinion publica
sensibilizada por decadas de oprobio, creando esa imagen
de fragilidad en la toma de decisiones o en la firmeza de
las convicciones de aquellos que hoy tienen la responsabi-
lidad de dirigir los destinos del pais.A ello se suma el
desconcierto de muchos intelectuales de la comunicacion,
que no llegan a percibir que muchas criticas no responden
a intereses legitimos, sino a horadar la tarea de gobierno
de manera que cada vez le resulte mas dificil tomar esas
decisiones que benefician a muchos y "perjudican" a pocos.
Temas como la derogacion de las leyes de impunidad o el
mas reciente sobre la tributacion del agro, adquieren en
estos gestores del imperio financiero un tinte amarillo
de tremendismo y fatalidad, que no se condice con la
situacion actual del pais, que dicho sea de paso si estuviera
en manos ROSADAS, nunca nos hubieramos enterado del valor
de los commodities ya que estarian engrosando cuentas en
paraisos fiscales y unos pocos dandose vidas de reyes,
teniendo peones casi esclavos en plena fiesta neoliberal.
Si algo tenemos que tener presente del pasado es justamente
que todos aquellos que hoy pregonan falta de ideas, proyectos
y demas, SON LOS MISMOS QUE AYER EN CONTUBERNIO
CON LOS PODEROSOS Y EL SISTEMA FINANCIERO
DEPREDADOR sumaron al pais en la miseria y la bancarrota.
Por eso hay que salirles al cruce. No todo es tan negativo,
se ha recuperado confianza y las instituciones empiezan
a dar signos de recuperacion, se van decantando los delin-
cuentes y correligionarios que quedaron como herencia y
los oportunistas que se unieron a este proyecto van
quedando al descubierto,los proyectos tienen un verdadero
debate de enriquecimiento para las mayorias y no de opinion
unica para las grandes corporaciones y sus socios.
Desenmascarar a los Sanguinetti, los Batlle, los Lacalle
y sus socios mediaticos no solo es un aporte a la consolidacion
del proyecto frentista, sino un acto de justicia, esa que niegan
fervorosamente cuando se habla de delitos economicos o de
lesa humanidad, estos gestores del desconcierto y la desesperanza.
popular que ha confiado en el FRENTE AMPLIO la gestion
de gobierno, pareciera atravesar una zona de tormenta
en la que por supuesto,hay mucho de ficticio y mucho
mas de crisis interesadas, en la que aquellos que han
tenido mucha responsabilidad en llegar a esta situacion
se presentan en los "medios" como ejemplos de claridad
y civismo.Ello podria pasar desapercibido, si no fuera
porque la corporacion mediatica y financiera que maneja
los resortes de la produccion y el consumo dia a dia
vaticina desastres economicos y debacles bancarias y
acostumbrados al discurso unico, no les cabe que puedan
haber opiniones divergentes o miradas personales que
puedan enriquecer o no, las propuestas que se debaten.
Quizas la ingenuidad de pensar que quieren lo mejor
para el pais y no lo mejor para sus bolsillos, hace
que la espontaneidad del discurso y la transparencia
de las intenciones, sean alevosamente manipuladas para
crear conflictos y desmoralizar a una opinion publica
sensibilizada por decadas de oprobio, creando esa imagen
de fragilidad en la toma de decisiones o en la firmeza de
las convicciones de aquellos que hoy tienen la responsabi-
lidad de dirigir los destinos del pais.A ello se suma el
desconcierto de muchos intelectuales de la comunicacion,
que no llegan a percibir que muchas criticas no responden
a intereses legitimos, sino a horadar la tarea de gobierno
de manera que cada vez le resulte mas dificil tomar esas
decisiones que benefician a muchos y "perjudican" a pocos.
Temas como la derogacion de las leyes de impunidad o el
mas reciente sobre la tributacion del agro, adquieren en
estos gestores del imperio financiero un tinte amarillo
de tremendismo y fatalidad, que no se condice con la
situacion actual del pais, que dicho sea de paso si estuviera
en manos ROSADAS, nunca nos hubieramos enterado del valor
de los commodities ya que estarian engrosando cuentas en
paraisos fiscales y unos pocos dandose vidas de reyes,
teniendo peones casi esclavos en plena fiesta neoliberal.
Si algo tenemos que tener presente del pasado es justamente
que todos aquellos que hoy pregonan falta de ideas, proyectos
y demas, SON LOS MISMOS QUE AYER EN CONTUBERNIO
CON LOS PODEROSOS Y EL SISTEMA FINANCIERO
DEPREDADOR sumaron al pais en la miseria y la bancarrota.
Por eso hay que salirles al cruce. No todo es tan negativo,
se ha recuperado confianza y las instituciones empiezan
a dar signos de recuperacion, se van decantando los delin-
cuentes y correligionarios que quedaron como herencia y
los oportunistas que se unieron a este proyecto van
quedando al descubierto,los proyectos tienen un verdadero
debate de enriquecimiento para las mayorias y no de opinion
unica para las grandes corporaciones y sus socios.
Desenmascarar a los Sanguinetti, los Batlle, los Lacalle
y sus socios mediaticos no solo es un aporte a la consolidacion
del proyecto frentista, sino un acto de justicia, esa que niegan
fervorosamente cuando se habla de delitos economicos o de
lesa humanidad, estos gestores del desconcierto y la desesperanza.
19 may 2011
LA DECEPCION GANA LA PARTIDA
Cualquiera sea el resultado de la votacion sobre
las leyes aberrantes que consagran la impunidad
con o sin los articulos "interpretativos", como
sociedad hemos retrocedido.Al punto de considerar
como legales a normas nacidas bajo presion y rati-
ficadas en plebiscitos, donde la desinformacion y
el accionar mediatico de blancos y colorados en
contra de investigar delitos de lesa humanidad,
economicos y de todo calibre, propiciaban la
impunidad lisa y llanamente sin ambiguedades.
La decidida y pertinaz busqueda de justicia de
familiares y victimas del terrorismo de estado,
ha permitido mantener viva la memoria de semejantes
atrocidades y la esperanza de juzgar a los culpables,
saber el destino de sus familiares desaparecidos y
preservar intacta la llama de la verdad y la justicia.
Se podrian enumerar multiples razones por las cuales
estas aberraciones juridicas son nulas de nulidad
absoluta, pero lo mas atroz, es que esta sociedad
con cola de paja,quiere barrer para abajo de la alfombra.
El "proceso" lleno de militares corruptos y
correligionarios de uso multiple, benevolos con el
poder economico enriquecedor de muchos y creador
de pobreza extrema, desnutricion y analfabetismo,
al que no le bastaron años de desgobierno sin
oposicion, hoy nos habla de respeto al orden juridico.
Nuestra mayor flaqueza, si es que cabe el termino,
es la de no haber podido desenmascarar a los referentes
civiles de la partidocracia militar rosada.
El manejo a discrecion de la opinion publica a traves
de sus multimedios graficos, televisivos y de toda
indole, muestran el talon de aquiles en la busqueda
de un razonamiento colectivo que transforme estas
realidades -que solo sirven a determinados intereses-,
en algo concreto de enriquecimiento y valor informativo.
Nada mas alejado de la realidad, es creer que estos
individuos buscan el bien comun, solo intentan
mantener sus privilegios, sus fueros por si algo no
sale redondo y sus contactos para perpetuarse en una
banca viviendo del defenestrado estado.
Poco y nada les interesa la construccion de solidaridad,
respeto y demas valores y menos aun derechos consagrados
en la constitucion, pisoteada y deformada hasta el
cansancio de acuerdo a sus intereses, como para ver
que solo Y UNICAMENTE SE LOGRA JUSTICIA VERDADERA
CUANDO TODOS SOMOS IGUALES ANTE LA LEY.
LO DEMAS SON DISCURSOS VACIOS DE CONTENIDO, se podran
pasar horas hablando de acciones y reparaciones,
de derechas y de izquierdas, pero la gran ausente
sera la construccion de ciudadania, de verdad,
de respeto Y DE APRENDIZAJE DEL PASADO.
Pedir justicia es un derecho inalienable que
seguiremos buscando, mas alla de reparaciones
o como se le quiera llamar, por la memoria
de aquellos que dieron todo sin pedirnos nada,
y porque como dice la historia quien no aprende
de sus errores, esta condenado a repetirlos.
las leyes aberrantes que consagran la impunidad
con o sin los articulos "interpretativos", como
sociedad hemos retrocedido.Al punto de considerar
como legales a normas nacidas bajo presion y rati-
ficadas en plebiscitos, donde la desinformacion y
el accionar mediatico de blancos y colorados en
contra de investigar delitos de lesa humanidad,
economicos y de todo calibre, propiciaban la
impunidad lisa y llanamente sin ambiguedades.
La decidida y pertinaz busqueda de justicia de
familiares y victimas del terrorismo de estado,
ha permitido mantener viva la memoria de semejantes
atrocidades y la esperanza de juzgar a los culpables,
saber el destino de sus familiares desaparecidos y
preservar intacta la llama de la verdad y la justicia.
Se podrian enumerar multiples razones por las cuales
estas aberraciones juridicas son nulas de nulidad
absoluta, pero lo mas atroz, es que esta sociedad
con cola de paja,quiere barrer para abajo de la alfombra.
El "proceso" lleno de militares corruptos y
correligionarios de uso multiple, benevolos con el
poder economico enriquecedor de muchos y creador
de pobreza extrema, desnutricion y analfabetismo,
al que no le bastaron años de desgobierno sin
oposicion, hoy nos habla de respeto al orden juridico.
Nuestra mayor flaqueza, si es que cabe el termino,
es la de no haber podido desenmascarar a los referentes
civiles de la partidocracia militar rosada.
El manejo a discrecion de la opinion publica a traves
de sus multimedios graficos, televisivos y de toda
indole, muestran el talon de aquiles en la busqueda
de un razonamiento colectivo que transforme estas
realidades -que solo sirven a determinados intereses-,
en algo concreto de enriquecimiento y valor informativo.
Nada mas alejado de la realidad, es creer que estos
individuos buscan el bien comun, solo intentan
mantener sus privilegios, sus fueros por si algo no
sale redondo y sus contactos para perpetuarse en una
banca viviendo del defenestrado estado.
Poco y nada les interesa la construccion de solidaridad,
respeto y demas valores y menos aun derechos consagrados
en la constitucion, pisoteada y deformada hasta el
cansancio de acuerdo a sus intereses, como para ver
que solo Y UNICAMENTE SE LOGRA JUSTICIA VERDADERA
CUANDO TODOS SOMOS IGUALES ANTE LA LEY.
LO DEMAS SON DISCURSOS VACIOS DE CONTENIDO, se podran
pasar horas hablando de acciones y reparaciones,
de derechas y de izquierdas, pero la gran ausente
sera la construccion de ciudadania, de verdad,
de respeto Y DE APRENDIZAJE DEL PASADO.
Pedir justicia es un derecho inalienable que
seguiremos buscando, mas alla de reparaciones
o como se le quiera llamar, por la memoria
de aquellos que dieron todo sin pedirnos nada,
y porque como dice la historia quien no aprende
de sus errores, esta condenado a repetirlos.
16 may 2011
MIEDO AL MIEDO
A mas de veinte años del fin de la dictadura
seguimos con miedo...Es quizas la mayor herencia
que nos ha dejado el "proceso" de desintegracion
de la cohesion ciudadana hacia determinados temas
en los cuales opinar significaba carcel o tortura
y en muchos casos desapariciones forzadas.
La tergiversacion del orden juridico a favor de
todo tipo de delito, desde economicos a los de
lesa humanidad avalados por un parlamento complice
y atemorizado, dio lugar a la creacion de normas
contrarias a la larga tradicion de respeto que
hicieron en tiempos lejanos, honor al orden jurico
del Uruguay.Hoy ante la posibilidad historica de
reparar esa nefasta legislacion, vemos que muchos
dirigentes,senadores y diputados, contrariando el
sentido para lo cual fueron elegidos, se sienten
presionados por la corporacion militar y sus
defensores civiles entre los que se cuentan a casi
todos los representantes de los partidos tradicionales
y le ponen reparos dialecticos a algo que es tan simple
que no deberia haber duda sobre el camino a seguir.
Resulta paradojico pensar que algo que nacio inconsti-
tucional, sea defendido con ahinco y aunque violen
tratados internacionales aprobados por el mismo
parlamento, sean motivo de objecion cuando lo que se
pretende es conocer y sancionar delitos de lesa
humanidad, como la desaparicion forzada o el robo
de bebes, delitos que no se hubieran podido cometer
sin el silencio complice de un poder economico que se
vio favorecido por el neoliberalismo depredador y el
accionar de politicos corruptos y jueces indiferentes.
Son esos mismos personajes que hoy enfundados en un
doble discurso de legalidad, solapada y mediaticamente,
dicen defender principios que ayer pisotearon con
alevosia, deformando realidades y justificando lo
injustificable.
Y por si esto fuera poco, se aprovechan de la opinion
conciliadora y comprensiva de muchos compañeros de
militancia a los que los años de lucha despareja les
ha dejado la vida hecha jirones, para ponerlos como
ejemplo de una conciliacion que nunca buscaron , de un
perdon que nunca pidieron y de un arrepentimiento que
ademas de no sentirlo, no lo piensan declamar.
La agitacion de fantasmas desestabilizadores es la otra
gran pata de esta propuesta fascista que cuenta con
organos de difusion aceitados y retrotrae a la sociedad
al clima imperante en la dictadura, por la que cualquier
decision soberana, pone en riesgo al sistema democratico,
como si la transparencia y el acatamiento al orden
juridico, dependiera de la voluntad de un poder militar
tutelante y un parlamento sumiso, degradado y corrupto.
La valentia con la que una gran parte de la sociedad
le hace frente al intento de preservar la impunidad,
deberia ser una leccion de coraje para aquellos que
creen que mirando para el costado, se puede construir
futuro, se pueden fortalecer las instituciones y por
sobre todo subordinar un poder militar que se considera
por arriba de las leyes nacionales y de la jurisprudencia
internacional. Que puede cometer cualquier delito
sabiendo que el miedo va a poder mas que la verdad,
y que en caso de dudas, los correligionarios estaran
para legalizar parlamentariamente la impunidad.
Derogar lisa y llanamente estas aberraciones juridicas
no es solo un acto de justicia, sino una demostracion
de coraje civico que honrara la memoria de todos
aquellos que por creer en la utopia de sociedades
mejores, han perdido lo mas valioso que poseian,
SU VIDA.
seguimos con miedo...Es quizas la mayor herencia
que nos ha dejado el "proceso" de desintegracion
de la cohesion ciudadana hacia determinados temas
en los cuales opinar significaba carcel o tortura
y en muchos casos desapariciones forzadas.
La tergiversacion del orden juridico a favor de
todo tipo de delito, desde economicos a los de
lesa humanidad avalados por un parlamento complice
y atemorizado, dio lugar a la creacion de normas
contrarias a la larga tradicion de respeto que
hicieron en tiempos lejanos, honor al orden jurico
del Uruguay.Hoy ante la posibilidad historica de
reparar esa nefasta legislacion, vemos que muchos
dirigentes,senadores y diputados, contrariando el
sentido para lo cual fueron elegidos, se sienten
presionados por la corporacion militar y sus
defensores civiles entre los que se cuentan a casi
todos los representantes de los partidos tradicionales
y le ponen reparos dialecticos a algo que es tan simple
que no deberia haber duda sobre el camino a seguir.
Resulta paradojico pensar que algo que nacio inconsti-
tucional, sea defendido con ahinco y aunque violen
tratados internacionales aprobados por el mismo
parlamento, sean motivo de objecion cuando lo que se
pretende es conocer y sancionar delitos de lesa
humanidad, como la desaparicion forzada o el robo
de bebes, delitos que no se hubieran podido cometer
sin el silencio complice de un poder economico que se
vio favorecido por el neoliberalismo depredador y el
accionar de politicos corruptos y jueces indiferentes.
Son esos mismos personajes que hoy enfundados en un
doble discurso de legalidad, solapada y mediaticamente,
dicen defender principios que ayer pisotearon con
alevosia, deformando realidades y justificando lo
injustificable.
Y por si esto fuera poco, se aprovechan de la opinion
conciliadora y comprensiva de muchos compañeros de
militancia a los que los años de lucha despareja les
ha dejado la vida hecha jirones, para ponerlos como
ejemplo de una conciliacion que nunca buscaron , de un
perdon que nunca pidieron y de un arrepentimiento que
ademas de no sentirlo, no lo piensan declamar.
La agitacion de fantasmas desestabilizadores es la otra
gran pata de esta propuesta fascista que cuenta con
organos de difusion aceitados y retrotrae a la sociedad
al clima imperante en la dictadura, por la que cualquier
decision soberana, pone en riesgo al sistema democratico,
como si la transparencia y el acatamiento al orden
juridico, dependiera de la voluntad de un poder militar
tutelante y un parlamento sumiso, degradado y corrupto.
La valentia con la que una gran parte de la sociedad
le hace frente al intento de preservar la impunidad,
deberia ser una leccion de coraje para aquellos que
creen que mirando para el costado, se puede construir
futuro, se pueden fortalecer las instituciones y por
sobre todo subordinar un poder militar que se considera
por arriba de las leyes nacionales y de la jurisprudencia
internacional. Que puede cometer cualquier delito
sabiendo que el miedo va a poder mas que la verdad,
y que en caso de dudas, los correligionarios estaran
para legalizar parlamentariamente la impunidad.
Derogar lisa y llanamente estas aberraciones juridicas
no es solo un acto de justicia, sino una demostracion
de coraje civico que honrara la memoria de todos
aquellos que por creer en la utopia de sociedades
mejores, han perdido lo mas valioso que poseian,
SU VIDA.
10 may 2011
UNA INICIATIVA ETICA
frenteamplistasxjusticia@gmail.com
>
>
>
> Montevideo, 8 de mayo de 2011.
>
>
>
> Queridos compañeros, queridas compañeras:
>
>
>
> Una vez más se plantean debates dentro de nuestro Frente Amplio sobre
> la mejor forma de erradicar la Ley de Caducidad y sus efectos. Esto
> nos sorprende, porque el Plenario Nacional estableció un claro mandato
> a nuestros legisladores, aprobado sin votos en contra y con sólo tres
> abstenciones, que ya fue cumplido en la Cámara de Senadores, pero la
> discusión es un hecho y debemos afrontarla.
>
>
>
> En los últimos días el compañero José Mujica, presidente de la
> República, ha sostenido que el proyecto interpretativo de la Ley de
> Caducidad, elaborado por el Frente Amplio y aprobado por el Senado con
> votos frenteamplistas, pone en peligro la victoria que todos deseamos
> en 2014, y con ella la profundización del proceso de cambios iniciado
> desde que alcanzamos el gobierno nacional.
>
>
>
> Durante el proceso de elaboración de ese proyecto interpretativo se
> tuvieron en cuenta diversas objeciones y propuestas, entre ellas las
> aportadas por el compañero José Korzeniak, experto en derecho
> constitucional. Si aparecen otras ideas, habrá que considerarlas con
> el mayor respeto, pero nos permitimos señalar que no es momento para
> improvisaciones en un asunto tan importante. Está bien que nos
> esforcemos por buscar la mejor solución posible, pero tengamos
> presente que demasiadas idas y venidas causan confusión y desánimo.
>
>
>
> El fondo de la cuestión es que la legislación uruguaya incluye, desde
> diciembre de 1986, una norma inconstitucional y violatoria de acuerdos
> internacionales firmados por Uruguay. Una norma que permite la
> impunidad de delitos de lesa humanidad y cuyos efectos deben ser
> eliminados, por elementales razones éticas y porque así lo decidió, en
> marzo de este año, la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
>
>
>
> Hoy debe quedar claro que nuestra voluntad política de terminar con la
> impunidad sigue firme. Con ese objetivo, ya es hora de que el sistema
> judicial recupere las potestades que le arrebató la Ley de Caducidad,
> y que en los últimos años sólo ha podido ejercer cuando le dieron
> permiso desde la presidencia de la República.
>
>
>
> La historia de la Ley de Caducidad es intrincada y llevamos muchos
> años atrapados en ella, por las malas artes de quienes quieren la
> impunidad y por nuestros propios errores. No soñemos con que hay un
> modo simple e indiscutible de resolver el problema. Si nos empeñamos
> en buscar una fórmula perfecta que no existe, el resultado puede ser
> que todo quede como está.
>
>
>
> La impunidad fue impulsada con amenazas y engaños. Ahora se intentará
> mantenerla con recursos jurídicos y políticos. Es una señal de que
> hemos avanzado: sigamos adelante.
>
>
>
> Nos dicen y nos dirán que la Ley de Caducidad fue respaldada por la
> mayoría de la población en el plebiscito de octubre de 2009, y que por
> ese motivo debemos dejarla en pie, que se ha vuelto invulnerable por
> la voluntad popular. Es un argumento eficaz pero mentiroso.
>
>
>
> En ese plebiscito se votó con una sola papeleta, y por lo tanto sólo
> fue posible contar cuántos votamos en contra de la impunidad.
> Ignoramos cuántos estaban a favor, y seguramente muchas personas no
> pusieron el Sí rosado en el sobre porque no tenían una opinión
> formada. Se abstuvieron. Decir que ésos fueron votos de apoyo a la Ley
> de Caducidad es como atribuir opinión definida a los encuestados que
> terminan en el casillero “no sabe / no contesta”.
>
>
>
> No nos enredemos una vez más: la Ley de Caducidad es inconstitucional,
> como lo han señalado la Suprema Corte de Justicia, la Asamblea General
> y el Poder Ejecutivo; no puede ser contrario al derecho anular todos
> sus efectos, que nunca fueron legítimos.
>
>
>
> Se ha dicho que la profundización del proyecto frenteamplista, en el
> tercer gobierno nacional consecutivo que todos queremos conquistar, es
> el mejor modo de defender los derechos humanos, que nada es más
> importante y que todo lo logrado se puede perder si, al aprobar el
> proyecto interpretativo, ponemos al FA en una situación vulnerable
> ante las críticas de otros partidos.
>
>
>
> Discrepamos fraternalmente con ese punto de vista. No aceptamos que
> sea necesario elegir entre la continuidad y el contenido de nuestro
> proyecto de gobierno.
>
>
>
> Sería un error grave, como elegir entre la libertad y la seguridad,
> entre el crecimiento y la distribución, entre la unidad y la
> diversidad, entre los cambios y la paz.
>
>
>
> Uno de los enemigos más poderosos que enfrentamos está dentro de
> nuestras propias cabezas, y nos dice que no es posible escapar a esas
> alternativas, que no podemos pensar fuera de ellas.
>
>
>
> Si nos convencemos de que debemos dejar por el camino nuestra
> identidad, no importará cuáles sean los resultados electorales:
> estaremos derrotados aunque ganemos.
>
>
>
> De nuestra conducta en estos días dependen muchas cosas: respetar la
> memoria de quienes ya no están, y también cuidar la esperanza de los
> que vienen. Podemos hacerlo juntos, si no se nos olvida quiénes somos.
>
>
>
> FIRMAN: Eduardo GALEANO, Margarita PERCOVICH, Belela HERRERA,
> Guillermo CHIFFLET, Ana OLIVERA, Daniel VIGLIETTI, José DÍAZ, Zelmar
> MICHELINI (h), Marina ARISMENDI, Miguel FERNANDEZ GALEANO, Victorio
> CASARTELLI, Maria Elia TOPOLANSKI, Fernando PEREIRA, Edgardo OYENART,
> Juan FAROPPA, Sara MÉNDEZ, Coriún AHARONIAN, Mariano ARANA, Ricardo
> ELENA, General ® Juan Antonio RODRIGUEZ ORLANDO, Pablo ANZALONE,
> Marcelo PEREIRA, Gabriel MAZZAROVICH, Carlos CAILLABET, Juan CASTILLO,
> , Jorge MAZZAROVICH, Alejandro ZAVALA, Milton ROMANI, Ricardo POSADA.
>
>
>
> Montevideo, 8 de mayo de 2011.
>
>
>
> Queridos compañeros, queridas compañeras:
>
>
>
> Una vez más se plantean debates dentro de nuestro Frente Amplio sobre
> la mejor forma de erradicar la Ley de Caducidad y sus efectos. Esto
> nos sorprende, porque el Plenario Nacional estableció un claro mandato
> a nuestros legisladores, aprobado sin votos en contra y con sólo tres
> abstenciones, que ya fue cumplido en la Cámara de Senadores, pero la
> discusión es un hecho y debemos afrontarla.
>
>
>
> En los últimos días el compañero José Mujica, presidente de la
> República, ha sostenido que el proyecto interpretativo de la Ley de
> Caducidad, elaborado por el Frente Amplio y aprobado por el Senado con
> votos frenteamplistas, pone en peligro la victoria que todos deseamos
> en 2014, y con ella la profundización del proceso de cambios iniciado
> desde que alcanzamos el gobierno nacional.
>
>
>
> Durante el proceso de elaboración de ese proyecto interpretativo se
> tuvieron en cuenta diversas objeciones y propuestas, entre ellas las
> aportadas por el compañero José Korzeniak, experto en derecho
> constitucional. Si aparecen otras ideas, habrá que considerarlas con
> el mayor respeto, pero nos permitimos señalar que no es momento para
> improvisaciones en un asunto tan importante. Está bien que nos
> esforcemos por buscar la mejor solución posible, pero tengamos
> presente que demasiadas idas y venidas causan confusión y desánimo.
>
>
>
> El fondo de la cuestión es que la legislación uruguaya incluye, desde
> diciembre de 1986, una norma inconstitucional y violatoria de acuerdos
> internacionales firmados por Uruguay. Una norma que permite la
> impunidad de delitos de lesa humanidad y cuyos efectos deben ser
> eliminados, por elementales razones éticas y porque así lo decidió, en
> marzo de este año, la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
>
>
>
> Hoy debe quedar claro que nuestra voluntad política de terminar con la
> impunidad sigue firme. Con ese objetivo, ya es hora de que el sistema
> judicial recupere las potestades que le arrebató la Ley de Caducidad,
> y que en los últimos años sólo ha podido ejercer cuando le dieron
> permiso desde la presidencia de la República.
>
>
>
> La historia de la Ley de Caducidad es intrincada y llevamos muchos
> años atrapados en ella, por las malas artes de quienes quieren la
> impunidad y por nuestros propios errores. No soñemos con que hay un
> modo simple e indiscutible de resolver el problema. Si nos empeñamos
> en buscar una fórmula perfecta que no existe, el resultado puede ser
> que todo quede como está.
>
>
>
> La impunidad fue impulsada con amenazas y engaños. Ahora se intentará
> mantenerla con recursos jurídicos y políticos. Es una señal de que
> hemos avanzado: sigamos adelante.
>
>
>
> Nos dicen y nos dirán que la Ley de Caducidad fue respaldada por la
> mayoría de la población en el plebiscito de octubre de 2009, y que por
> ese motivo debemos dejarla en pie, que se ha vuelto invulnerable por
> la voluntad popular. Es un argumento eficaz pero mentiroso.
>
>
>
> En ese plebiscito se votó con una sola papeleta, y por lo tanto sólo
> fue posible contar cuántos votamos en contra de la impunidad.
> Ignoramos cuántos estaban a favor, y seguramente muchas personas no
> pusieron el Sí rosado en el sobre porque no tenían una opinión
> formada. Se abstuvieron. Decir que ésos fueron votos de apoyo a la Ley
> de Caducidad es como atribuir opinión definida a los encuestados que
> terminan en el casillero “no sabe / no contesta”.
>
>
>
> No nos enredemos una vez más: la Ley de Caducidad es inconstitucional,
> como lo han señalado la Suprema Corte de Justicia, la Asamblea General
> y el Poder Ejecutivo; no puede ser contrario al derecho anular todos
> sus efectos, que nunca fueron legítimos.
>
>
>
> Se ha dicho que la profundización del proyecto frenteamplista, en el
> tercer gobierno nacional consecutivo que todos queremos conquistar, es
> el mejor modo de defender los derechos humanos, que nada es más
> importante y que todo lo logrado se puede perder si, al aprobar el
> proyecto interpretativo, ponemos al FA en una situación vulnerable
> ante las críticas de otros partidos.
>
>
>
> Discrepamos fraternalmente con ese punto de vista. No aceptamos que
> sea necesario elegir entre la continuidad y el contenido de nuestro
> proyecto de gobierno.
>
>
>
> Sería un error grave, como elegir entre la libertad y la seguridad,
> entre el crecimiento y la distribución, entre la unidad y la
> diversidad, entre los cambios y la paz.
>
>
>
> Uno de los enemigos más poderosos que enfrentamos está dentro de
> nuestras propias cabezas, y nos dice que no es posible escapar a esas
> alternativas, que no podemos pensar fuera de ellas.
>
>
>
> Si nos convencemos de que debemos dejar por el camino nuestra
> identidad, no importará cuáles sean los resultados electorales:
> estaremos derrotados aunque ganemos.
>
>
>
> De nuestra conducta en estos días dependen muchas cosas: respetar la
> memoria de quienes ya no están, y también cuidar la esperanza de los
> que vienen. Podemos hacerlo juntos, si no se nos olvida quiénes somos.
>
>
>
> FIRMAN: Eduardo GALEANO, Margarita PERCOVICH, Belela HERRERA,
> Guillermo CHIFFLET, Ana OLIVERA, Daniel VIGLIETTI, José DÍAZ, Zelmar
> MICHELINI (h), Marina ARISMENDI, Miguel FERNANDEZ GALEANO, Victorio
> CASARTELLI, Maria Elia TOPOLANSKI, Fernando PEREIRA, Edgardo OYENART,
> Juan FAROPPA, Sara MÉNDEZ, Coriún AHARONIAN, Mariano ARANA, Ricardo
> ELENA, General ® Juan Antonio RODRIGUEZ ORLANDO, Pablo ANZALONE,
> Marcelo PEREIRA, Gabriel MAZZAROVICH, Carlos CAILLABET, Juan CASTILLO,
> , Jorge MAZZAROVICH, Alejandro ZAVALA, Milton ROMANI, Ricardo POSADA.
SOLO LA VERDAD TRAE LIBERTAD
SENTENCIA DE 24 DE FEBRERO DE 2011 DE LA CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS
La sentencia de la Corte Interamericana, si bien era razonablemente previsible en cuanto a
su resultado, ocasiona algunas dificultades en cuanto a su cumplimiento. A pocos días de
conocido el texto es imposible hacer un estudio completo de la misma, pero sí es oportuno
referir a algunos aspectos que parecen ser claros y que no deberían merecer dudas ni
objeciones, así como adelantar, tentativamente y sujeto a mayor análisis, algunas otras ideas.
Sobre lo que a mi juicio no merecería discusión de tipo alguno cabe decir:
1. La sentencia de la Corte debe ser cumplida (no hay alternativa ni excusa en contrario).
Uruguay aprobó la Convención Americana de Derechos Humanos, y se sometió a la
jurisdicción de la Corte Interamericana, mediante la ley 15.737 (aprobada en marzo de
1985). No es válida la invocación de la soberanía para eludir la sentencia en la medida
que: (a) hay una decisión soberana de la República de someterse al sistema
interamericano de derechos humanos; (b) los Estados no pueden violar sus obligaciones
internacionales; y (c) aunque no sea un argumento jurídico, debe tenerse presente que
pretender salir del sistema interamericano o desconocerlo, pondría al Uruguay en la
denostada, y fallida, línea de Fujimori y Montesinos que procuraron eludir sus
obligaciones internacionales sin éxito. Los países serios cumplen con las sentencias. La
sentencia de la Corte no es una recomendación de la Comisión Interamericana, sino,
valga la redundancia, una sentencia y como tal obligatoria.
2. En la misma línea, no puede admitirse el argumento de que por encima de los órganos
internos no hay nada, pues esto es contrario a una decisión soberana del país. En materia
de derechos humanos, cuando se agotan los recursos internos, hay una instancia
internacional superior. No se puede negar esto y olvidar medio siglo de evolución
internacional en materia de derechos humanos y la aceptación que de esta jurisdicción
internacional hizo nuestro país.
3. Pero además debe repararse en que la sentencia de la Corte Interamericana es, en su
esencia, coincidente con la actual jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia (la ley de
caducidad es inválida) por lo que no puede extrañar, sorprender ni afectar la sensibilidad
de nadie el pronunciamiento internacional.
4. En definitiva, es claro que con la máxima prontitud el
Gobierno debe proceder: (a) a llevar adelante una investigación, seria, profunda, de buena
fe, sobre los hechos objeto de la sentencia, a los efectos de esclarecerlos, encontrar (si
fuera el caso) los restos y, si se identifican, sancionar a los responsables (por supuesto que
la obligación de investigar es una obligación de medios y no de resultados); (b) a realizar
un acto público de reconocimiento de la responsabilidad internacional del Estado por el
caso resuelto; (c) a colocar una placa con el nombre de las víctimas en el Servicio de
Información de Defensa; (d) a realizar las publicaciones internas de la sentencia; (e) a
implementar un plan de derechos humanos dirigido a jueces y fiscales; (f) a establecer un
sistema de información acerca de las graves violaciones de derechos humanos cometidas
durante la dictadura; y (g) a abonar las indemnizaciones establecidas. Todo lo anterior
puede y debe ser cumplido en términos razonables, dentro de los máximos que fija la
sentencia.
Pero además de lo anterior la sentencia dispone que la Ley de Caducidad no debe volver a
representar obstáculo para las investigaciones de casos de violaciones de derechos humanos.
Es interesante que la Corte, luego de declarar la incompatibilidad de la ley con la Convención
Americana y con la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, no
dice que la ley debe ser anulada por otra ley, sino que deben adoptarse las medidas para que
la ley no vuelva a ser obstáculo para las investigaciones. Incluso la Corte reconoce que con la
actual posición del Poder Ejecutivo y de la Suprema Corte de Justicia, esos obstáculos no
existen.
El problema es cómo se cumple con lo anterior. La “anulación” de la ley de caducidad por
otra ley posterior es inconstitucional (no lo puede hacer el legislador y esto está reservado a
los órganos jurisdiccionales). Tampoco puede derogarse con efecto retroactivo la ley pues
dicho efecto en ese tipo de leyes es inconstitucional. Si se transitan estas vías lo único que se
logrará serán nuevos obstáculos pues los involucrados suspenderán los procedimientos
pretendiendo la declaración de inconstitucionalidad de la nueva ley, por lo que habrá más
demoras y más obstáculos.
Entonces: ¿cuál es la mejor forma de cumplir con la sentencia?
Podría encontrarse un camino sencillo, que permitiría lograr altos consensos políticos (lo que
siempre es bueno en estos casos) y reduciría al mínimo (no desaparecería) el riesgo de
impugnaciones jurisdiccionales:
a) Los artículos 1, 3 y 4 de la Ley de Caducidad podrían ser derogados pero sólo hacia el
futuro (lo que sería ajustado a la Constitución y no violaría ningún principio superior),
con lo que se consolidaría la actual jurisprudencia de la Suprema
Corte de Justicia e impediría que se pueda volver atrás en materia de interpretación y
aplicación de la ley de caducidad. Como dice hoy la Corte Interamericana, hoy no hay
obstáculos para las investigaciones, y con la derogación se impediría que los mismos
vuelvan a aparecer. Esta solución, además, podría contar con el apoyo de todos los
partidos políticos, lo que le daría una gran legitimidad democrática.
b) En cuanto al pasado, el problema es la interpretación y aplicación que de la ley de
caducidad ha hecho el Poder Ejecutivo. Y en este caso, en cumplimiento de la sentencia
de la Corte Interamericana (hecho nuevo y superveniente a las anteriores
interpretaciones de la ley), podría el Poder Ejecutivo dictar un acto administrativo
revocando todos sus actos anteriores que consideraron diversos casos comprendidos en
la ley de caducidad. De esta forma, por razones de legitimidad (y con efectos
retroactivos), se cumpliría con la sentencia eliminando obstáculos hacia el pasado. Por
supuesto que hay un sector de la doctrina que entiende que también existe una suerte
de “cosa juzgada” administrativa, y bien, ninguna solución está libre de
cuestionamientos.
c) Con lo anterior se podría cumplir con la eliminación de obstáculos pasados y futuros
derivados de la interpretación y aplicación de la ley de caducidad, minimizando los
riesgos jurídicos y dejando al Poder Judicial, libre de obstáculos, la solución definitiva de
cada caso concreto, como es su competencia constitucional.
Reitero que las anteriores son algunas reflexiones todavía muy próximas a la sentencia,
por lo que corresponderá seguir analizando el tema.
Martín Risso Ferrand
La sentencia de la Corte Interamericana, si bien era razonablemente previsible en cuanto a
su resultado, ocasiona algunas dificultades en cuanto a su cumplimiento. A pocos días de
conocido el texto es imposible hacer un estudio completo de la misma, pero sí es oportuno
referir a algunos aspectos que parecen ser claros y que no deberían merecer dudas ni
objeciones, así como adelantar, tentativamente y sujeto a mayor análisis, algunas otras ideas.
Sobre lo que a mi juicio no merecería discusión de tipo alguno cabe decir:
1. La sentencia de la Corte debe ser cumplida (no hay alternativa ni excusa en contrario).
Uruguay aprobó la Convención Americana de Derechos Humanos, y se sometió a la
jurisdicción de la Corte Interamericana, mediante la ley 15.737 (aprobada en marzo de
1985). No es válida la invocación de la soberanía para eludir la sentencia en la medida
que: (a) hay una decisión soberana de la República de someterse al sistema
interamericano de derechos humanos; (b) los Estados no pueden violar sus obligaciones
internacionales; y (c) aunque no sea un argumento jurídico, debe tenerse presente que
pretender salir del sistema interamericano o desconocerlo, pondría al Uruguay en la
denostada, y fallida, línea de Fujimori y Montesinos que procuraron eludir sus
obligaciones internacionales sin éxito. Los países serios cumplen con las sentencias. La
sentencia de la Corte no es una recomendación de la Comisión Interamericana, sino,
valga la redundancia, una sentencia y como tal obligatoria.
2. En la misma línea, no puede admitirse el argumento de que por encima de los órganos
internos no hay nada, pues esto es contrario a una decisión soberana del país. En materia
de derechos humanos, cuando se agotan los recursos internos, hay una instancia
internacional superior. No se puede negar esto y olvidar medio siglo de evolución
internacional en materia de derechos humanos y la aceptación que de esta jurisdicción
internacional hizo nuestro país.
3. Pero además debe repararse en que la sentencia de la Corte Interamericana es, en su
esencia, coincidente con la actual jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia (la ley de
caducidad es inválida) por lo que no puede extrañar, sorprender ni afectar la sensibilidad
de nadie el pronunciamiento internacional.
4. En definitiva, es claro que con la máxima prontitud el
Gobierno debe proceder: (a) a llevar adelante una investigación, seria, profunda, de buena
fe, sobre los hechos objeto de la sentencia, a los efectos de esclarecerlos, encontrar (si
fuera el caso) los restos y, si se identifican, sancionar a los responsables (por supuesto que
la obligación de investigar es una obligación de medios y no de resultados); (b) a realizar
un acto público de reconocimiento de la responsabilidad internacional del Estado por el
caso resuelto; (c) a colocar una placa con el nombre de las víctimas en el Servicio de
Información de Defensa; (d) a realizar las publicaciones internas de la sentencia; (e) a
implementar un plan de derechos humanos dirigido a jueces y fiscales; (f) a establecer un
sistema de información acerca de las graves violaciones de derechos humanos cometidas
durante la dictadura; y (g) a abonar las indemnizaciones establecidas. Todo lo anterior
puede y debe ser cumplido en términos razonables, dentro de los máximos que fija la
sentencia.
Pero además de lo anterior la sentencia dispone que la Ley de Caducidad no debe volver a
representar obstáculo para las investigaciones de casos de violaciones de derechos humanos.
Es interesante que la Corte, luego de declarar la incompatibilidad de la ley con la Convención
Americana y con la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, no
dice que la ley debe ser anulada por otra ley, sino que deben adoptarse las medidas para que
la ley no vuelva a ser obstáculo para las investigaciones. Incluso la Corte reconoce que con la
actual posición del Poder Ejecutivo y de la Suprema Corte de Justicia, esos obstáculos no
existen.
El problema es cómo se cumple con lo anterior. La “anulación” de la ley de caducidad por
otra ley posterior es inconstitucional (no lo puede hacer el legislador y esto está reservado a
los órganos jurisdiccionales). Tampoco puede derogarse con efecto retroactivo la ley pues
dicho efecto en ese tipo de leyes es inconstitucional. Si se transitan estas vías lo único que se
logrará serán nuevos obstáculos pues los involucrados suspenderán los procedimientos
pretendiendo la declaración de inconstitucionalidad de la nueva ley, por lo que habrá más
demoras y más obstáculos.
Entonces: ¿cuál es la mejor forma de cumplir con la sentencia?
Podría encontrarse un camino sencillo, que permitiría lograr altos consensos políticos (lo que
siempre es bueno en estos casos) y reduciría al mínimo (no desaparecería) el riesgo de
impugnaciones jurisdiccionales:
a) Los artículos 1, 3 y 4 de la Ley de Caducidad podrían ser derogados pero sólo hacia el
futuro (lo que sería ajustado a la Constitución y no violaría ningún principio superior),
con lo que se consolidaría la actual jurisprudencia de la Suprema
Corte de Justicia e impediría que se pueda volver atrás en materia de interpretación y
aplicación de la ley de caducidad. Como dice hoy la Corte Interamericana, hoy no hay
obstáculos para las investigaciones, y con la derogación se impediría que los mismos
vuelvan a aparecer. Esta solución, además, podría contar con el apoyo de todos los
partidos políticos, lo que le daría una gran legitimidad democrática.
b) En cuanto al pasado, el problema es la interpretación y aplicación que de la ley de
caducidad ha hecho el Poder Ejecutivo. Y en este caso, en cumplimiento de la sentencia
de la Corte Interamericana (hecho nuevo y superveniente a las anteriores
interpretaciones de la ley), podría el Poder Ejecutivo dictar un acto administrativo
revocando todos sus actos anteriores que consideraron diversos casos comprendidos en
la ley de caducidad. De esta forma, por razones de legitimidad (y con efectos
retroactivos), se cumpliría con la sentencia eliminando obstáculos hacia el pasado. Por
supuesto que hay un sector de la doctrina que entiende que también existe una suerte
de “cosa juzgada” administrativa, y bien, ninguna solución está libre de
cuestionamientos.
c) Con lo anterior se podría cumplir con la eliminación de obstáculos pasados y futuros
derivados de la interpretación y aplicación de la ley de caducidad, minimizando los
riesgos jurídicos y dejando al Poder Judicial, libre de obstáculos, la solución definitiva de
cada caso concreto, como es su competencia constitucional.
Reitero que las anteriores son algunas reflexiones todavía muy próximas a la sentencia,
por lo que corresponderá seguir analizando el tema.
Martín Risso Ferrand
16 abr 2011
CADUCIDAD, VERDAD, JUSTICIA 10 VERDADES
Tras un largo periodo de impunidad, por la que
militares y civiles en contubernio con grupos
economicos que se vieron favorecidos por politicas
hechas a medida, sin oposicion, y con una "justicia"
que miraba para otro lado, HOY PUEDE DECIRSE QUE
HA EMPEZADO EL CAMINO DE LA VERDAD.
Y no nos atrevemos a hablar de justicia todavia,
ya que es infinitamente grande el daño y peores
las consecuencias de esos nefastos años de terror
para creer que una modificacion al mamarracho
juridico que fueron las leyes de caducidad, se
podria transformar en JUSTICIA tal como se la concibe.
Veamos por ejemplo y sin entrar en tecnicismos,
algunas razones de sentido comun que destrozan
los argumentos de los actuales legalistas.
1. Justicia hay una sola en todo pais que se precie
de ser civilizado.El razonamiento de la "pacificacion"
a costa de no investigar delitos de lesa humanidad
y forzados por la fuerza represora bajo sus terminos
y condiciones , con aquellos mismos que respaldaron
la irrupcion militar en la vida civica YA ES NULA DE
NULIDAD ABSOLUTA al ser violentado el orden juridico
en el que ocurrieron, con gobiernos de facto, ilegitimos.
2.Los PLEBISCITOS.Si bien son herramientas de democracia
directa que por ejemplo han servido para evitar
privatizaciones, o sea vender bienes del estado al mejor
postor, tienen en la conciencia colectiva distinta
valoracion ya que en el primer caso los medios afines
a las privatizaciones pusieron TODO SU APARATO
PROPAGANDISTICO MULTIMEDIATICO EN FAVOR DE ESE PROYECTO
y era mas facil entender que se querian robar todo, que
el caso de los delitos aberrantes donde, politicos
jueces y MEDIOS, UNIDOS POR NEGOCIOS Y FAVORES, HAN
SISTEMATICAMENTE BOICOTEADO LAS INVESTIGACIONES QUE
INTENTAN ESCLARECER DELITOS DE TODO CALIBRE, DESDE
ROBOS DE BEBES A DESAPARICIONES.
3.LoS MEDIOS.No se puede negar que en todo este proceso,
las corporaciones civiles de la informacion, cuando se
trata de estos casos, HAN DESINFORMADO , y que
yo recuerde, ni siquiera han pedido disculpas, en
una clara muestra de que intereses defienden.
Una muestra de tal desinformacion, lo da el hecho
de que en el interior del pais, mucha gente cree
que los desaparecidos son un invento comunista...
4.La ideologia de las corporaciones. Creer que estas
empresas de la informacion y su personal en relacion
de dependencia, "periodistas" buscan la verdad, es
desconocer las leyes del mercado laboral, es decir
trabajan con la materia prima que les provee su
empleador, que tratandose de informacion, ya podemos
deducir de que forma y de que tipo.No me imagino a ningun
empleado de estas corporaciones denunciando publica-
mente una desaparicion, una torura o un delito
economico durante la dictadura, -habra excepciones-
pero la regla general fue el ocultamiento, la
falsedad y la tergiversacion de la verdad.
5.Los Representantes.Habria que deducir que intereses
representan, no olvidemos que hasta la irrupcion del
Frente Amplio, aplicaron a su antojo y a espaldas
de una sociedad que entendia poco, politicas de
saqueo y empobrecimiento de muchos a favor de unos
pocos, lo que trajo inevitablemente una degradacion
de los mas debiles cuyas consecuencias en materia
delictiva, crecio exponencialmente a la par de sus
"negocios", "libre empresa" y "libertad de prensa".
Muchos de estos legisladores, son los mismos que
no hace muchos validaban todo lo que les venia
y jerarquizaban las reuniones de los torturadores.
6.Los JUECES.Ay los jueces!Se supone que la independencia
del poder judicial es garantia de que TODOS somos
iguales ante la Ley, pero como siempre, y mas en esa
epoca, fue la Justicia un EXPECTADOR MAS de una
realidad que les pasaba por arriba, y por OMISION
tan culpable como los torturadores, pero claro,
hay que tener en cuenta que muchos correligionarios
estaban involucrados, por lo tanto, la mejor
interpretacion siempre fue la abstenerse o declararse
incompetente- ya lo son de por si- de manera tal
que los plazos caducaran y las causas prescribieran...
Da gracia pensar en el razonamiento de un legislador
en el sentido de que ahora todo el peso recae en la
Justicia, cuando es la forma natural y organica de
cualquier pais para resolver atrocidades, la pregunta
seria , para que estaban entonces?para que estan hoy?
7.Los Rosados..Clase Dirigente QUE DIRIGE HACIA SUS
NEGOCIOS toda politica publica y para lo cual no
repara en medios y menos en escrupulos o formalismos
morales, producto de un clientelismo que mucho daño
le ha hecho al pais y acerrimo defensor de las
condiciones con que los organismos internacionales
esquilman a los pueblos dependientes, todo en nombre
de la Libertad y el libremercado ahora devenidos en
defensores del orden juridico y conflictos sociales.
8.El proyecto economico.Tal vez la madre del borrego,
impulsor acerrimo del neoliberalismo y el descontrol
financiero, cuyos exponentes son el FMI y el BANCO
MUNDIAL,llevaron a cabo con el apoyo irrestricto de
blancos y colorados un sistematico endeudamiento a
cuya solucion llegaban los ARCHIFAMOSOS planes de
ajuste, creadores de la mayor miseria producida en el
pais aplicada a sangre y fuego por el contubernio
civico militar violentando esa Constitucion que hoy
dicen defender...
9.La verdad.Es lo poco que esperan los familiares
de los torturados, desaparecidos y demas victimas
de esos años de oprobio, sin que haya un solo
arrepentido, sin que los gestores y ejecutadores
intelectuales o materiales de los delitos de lesa
humanidad, hayan hecho un mea culpa, por el contrario
reafirman su irracionalidad con mas provocaciones,
mas amenazas y una apologia del desacato.
10.Por el futuro.No hay avance posible de las sociedades
si no se aprende a respetar el orden juridico
establecido por ella misma y en nombre de cualquier
fin, se comete cualquier aberracion.Si despues la
sociedad les da un indulto muy generoso, se podra
estar o no de acuerdo, pero para ello primero hay
que juzgarlos por los crimenes cometidos,entender
que aquellas normas que nacieron de la ilegalidad,
bajo presion y quienes las llevaron adelante son
los mismos que primero las pisotearon, nacen nulas
de nulidad absoluta,y cualquier enmienda o mamarracho
que se pretenda despues, carece de la legitimidad
que se dice pretender proteger.
No se mira al pasado para divisiones o interpretaciones
sesgadas sino para entender que se construye sobre
la verdad, sobre un orden juridico que nos iguala
y donde nadie se abogue el derecho de decidir
sobre la vida de los demas.
militares y civiles en contubernio con grupos
economicos que se vieron favorecidos por politicas
hechas a medida, sin oposicion, y con una "justicia"
que miraba para otro lado, HOY PUEDE DECIRSE QUE
HA EMPEZADO EL CAMINO DE LA VERDAD.
Y no nos atrevemos a hablar de justicia todavia,
ya que es infinitamente grande el daño y peores
las consecuencias de esos nefastos años de terror
para creer que una modificacion al mamarracho
juridico que fueron las leyes de caducidad, se
podria transformar en JUSTICIA tal como se la concibe.
Veamos por ejemplo y sin entrar en tecnicismos,
algunas razones de sentido comun que destrozan
los argumentos de los actuales legalistas.
1. Justicia hay una sola en todo pais que se precie
de ser civilizado.El razonamiento de la "pacificacion"
a costa de no investigar delitos de lesa humanidad
y forzados por la fuerza represora bajo sus terminos
y condiciones , con aquellos mismos que respaldaron
la irrupcion militar en la vida civica YA ES NULA DE
NULIDAD ABSOLUTA al ser violentado el orden juridico
en el que ocurrieron, con gobiernos de facto, ilegitimos.
2.Los PLEBISCITOS.Si bien son herramientas de democracia
directa que por ejemplo han servido para evitar
privatizaciones, o sea vender bienes del estado al mejor
postor, tienen en la conciencia colectiva distinta
valoracion ya que en el primer caso los medios afines
a las privatizaciones pusieron TODO SU APARATO
PROPAGANDISTICO MULTIMEDIATICO EN FAVOR DE ESE PROYECTO
y era mas facil entender que se querian robar todo, que
el caso de los delitos aberrantes donde, politicos
jueces y MEDIOS, UNIDOS POR NEGOCIOS Y FAVORES, HAN
SISTEMATICAMENTE BOICOTEADO LAS INVESTIGACIONES QUE
INTENTAN ESCLARECER DELITOS DE TODO CALIBRE, DESDE
ROBOS DE BEBES A DESAPARICIONES.
3.LoS MEDIOS.No se puede negar que en todo este proceso,
las corporaciones civiles de la informacion, cuando se
trata de estos casos, HAN DESINFORMADO , y que
yo recuerde, ni siquiera han pedido disculpas, en
una clara muestra de que intereses defienden.
Una muestra de tal desinformacion, lo da el hecho
de que en el interior del pais, mucha gente cree
que los desaparecidos son un invento comunista...
4.La ideologia de las corporaciones. Creer que estas
empresas de la informacion y su personal en relacion
de dependencia, "periodistas" buscan la verdad, es
desconocer las leyes del mercado laboral, es decir
trabajan con la materia prima que les provee su
empleador, que tratandose de informacion, ya podemos
deducir de que forma y de que tipo.No me imagino a ningun
empleado de estas corporaciones denunciando publica-
mente una desaparicion, una torura o un delito
economico durante la dictadura, -habra excepciones-
pero la regla general fue el ocultamiento, la
falsedad y la tergiversacion de la verdad.
5.Los Representantes.Habria que deducir que intereses
representan, no olvidemos que hasta la irrupcion del
Frente Amplio, aplicaron a su antojo y a espaldas
de una sociedad que entendia poco, politicas de
saqueo y empobrecimiento de muchos a favor de unos
pocos, lo que trajo inevitablemente una degradacion
de los mas debiles cuyas consecuencias en materia
delictiva, crecio exponencialmente a la par de sus
"negocios", "libre empresa" y "libertad de prensa".
Muchos de estos legisladores, son los mismos que
no hace muchos validaban todo lo que les venia
y jerarquizaban las reuniones de los torturadores.
6.Los JUECES.Ay los jueces!Se supone que la independencia
del poder judicial es garantia de que TODOS somos
iguales ante la Ley, pero como siempre, y mas en esa
epoca, fue la Justicia un EXPECTADOR MAS de una
realidad que les pasaba por arriba, y por OMISION
tan culpable como los torturadores, pero claro,
hay que tener en cuenta que muchos correligionarios
estaban involucrados, por lo tanto, la mejor
interpretacion siempre fue la abstenerse o declararse
incompetente- ya lo son de por si- de manera tal
que los plazos caducaran y las causas prescribieran...
Da gracia pensar en el razonamiento de un legislador
en el sentido de que ahora todo el peso recae en la
Justicia, cuando es la forma natural y organica de
cualquier pais para resolver atrocidades, la pregunta
seria , para que estaban entonces?para que estan hoy?
7.Los Rosados..Clase Dirigente QUE DIRIGE HACIA SUS
NEGOCIOS toda politica publica y para lo cual no
repara en medios y menos en escrupulos o formalismos
morales, producto de un clientelismo que mucho daño
le ha hecho al pais y acerrimo defensor de las
condiciones con que los organismos internacionales
esquilman a los pueblos dependientes, todo en nombre
de la Libertad y el libremercado ahora devenidos en
defensores del orden juridico y conflictos sociales.
8.El proyecto economico.Tal vez la madre del borrego,
impulsor acerrimo del neoliberalismo y el descontrol
financiero, cuyos exponentes son el FMI y el BANCO
MUNDIAL,llevaron a cabo con el apoyo irrestricto de
blancos y colorados un sistematico endeudamiento a
cuya solucion llegaban los ARCHIFAMOSOS planes de
ajuste, creadores de la mayor miseria producida en el
pais aplicada a sangre y fuego por el contubernio
civico militar violentando esa Constitucion que hoy
dicen defender...
9.La verdad.Es lo poco que esperan los familiares
de los torturados, desaparecidos y demas victimas
de esos años de oprobio, sin que haya un solo
arrepentido, sin que los gestores y ejecutadores
intelectuales o materiales de los delitos de lesa
humanidad, hayan hecho un mea culpa, por el contrario
reafirman su irracionalidad con mas provocaciones,
mas amenazas y una apologia del desacato.
10.Por el futuro.No hay avance posible de las sociedades
si no se aprende a respetar el orden juridico
establecido por ella misma y en nombre de cualquier
fin, se comete cualquier aberracion.Si despues la
sociedad les da un indulto muy generoso, se podra
estar o no de acuerdo, pero para ello primero hay
que juzgarlos por los crimenes cometidos,entender
que aquellas normas que nacieron de la ilegalidad,
bajo presion y quienes las llevaron adelante son
los mismos que primero las pisotearon, nacen nulas
de nulidad absoluta,y cualquier enmienda o mamarracho
que se pretenda despues, carece de la legitimidad
que se dice pretender proteger.
No se mira al pasado para divisiones o interpretaciones
sesgadas sino para entender que se construye sobre
la verdad, sobre un orden juridico que nos iguala
y donde nadie se abogue el derecho de decidir
sobre la vida de los demas.
11 abr 2011
ALLENDE -Niko Schvartz- “La República” de Montevideo
OPINION INTERNACIONAL
EL ASESINATO DEL PRESIDENTE ALLENDE
SIEMPRE HEMOS RECHAZADO LA VERSION SOBRE EL SUICIDIO EL PRESIDENTE SALVADOR ALLENDE, SOSTENIENDO QUE FUE ASESINADO EN EL GOLPE DE ESTADO PINOCHETISTA DEL 11 DE SETIEMBRE DE 1973, TRAS RESISTIR CON LAS ARMAS EN LA MANO HASTA EL ULTIMO MINUTO JUNTO A SUS FIELES COLABORADORES EN EL PALACIO DE LA MONEDA BOMBARDEADO. EL PRESIDENTE MARTIR ENTRO A LA HISTORIA ESE DIA Y SU DISCURSO DE LAS GRANDES ALAMEDAS POR DONDE TRANSITARA EL HOMBRE NUEVO QUEDO COMO UN LUCIDO EXPONENTE DE NUESTRO TIEMPO. AHORA ACABA DE PUBLICARSE UNA RECOPILACION DE DOCUMENTOS QUE TRAEN A LA LUZ LA VERDAD DE LOS HECHOS Y DESMIENTEN LA TRAMA DEL SUICIDIO URDIDA EN TODAS SUS PIEZAS POR LOS GOLPISTAS.
Niko Schvartz “La República” de Montrevideo
He aquí un relato de los acontecimientos en las horas decisivas de aquel día aciago, publicado bajo el título de "Oficiales de la Escuela de Infantería acribillaron al presidente Salvador Allende": "El grupo del capitán Garrido logra llegar al segundo piso, al Salón Rojo. Allí encuentra a cinco civiles que disparan entre los escombros, entre el humo, el calor. Uno de los civiles es el presidente Salvador Allende junto a cuatro miembros de su escolta personal, los GAP. Llegan otros militares a apoyar al grupo del capitán Garrido, pues allí es el único lugar donde se combate. Un militar de ese grupo dispara sobre uno de los civiles, es el Presidente Allende. Pero no logra alcanzarlo. El capitán Garrido, que está tendido en el suelo protegiéndose de los impactos del Presidente y sus escoltas dispara en ráfagas e impacta al Presidente Allende. Una de las balas penetra en el lado derecho de la cara, cerca de la nariz y bajo el ojo, otras dan en el pecho y estómago del Presidente. Allende se dobla, trata de afirmarse y cae cerca de la puerta de un salón. El teniente de la Escuela de Infantería René Riveros se acerca al cuerpo del Presidente Allende y lo remata. El Presidente tiene más de cinco impactos de bala."
Eugene Propper, fiscal norteamericano en el caso del doble asesinato en Washington de Orlando Letelier (ministro de Allende) y su secretaria norteamericana Ronnie Moffit, y que interrogó en EEUU al ex teniente de la Escuela de Infantería Armando Fernández Larios, quien era parte del grupo de militares que acribilló al Presidente Allende, escribe en su libro Laberinto: "Poco después de las 2 pm las compañías de infantería penetran en La Moneda. Algunos grupos corren al piso superior en medio del humo y cubriéndose con ráfagas de ametralladora. René Riveros, un teniente de pelo rubio, repentinamente se ve enfrentado a un civil armado que viste un sweater de cuello alto. Riveros vacía la mitad de su cargador en el Presidente de Chile, matándolo instantáneamente con heridas que van desde la ingle a la garganta".
Prosigue el relato "El general Palacios llega a la entrada del Salón Rojo a las 14.45. En el suelo yace muerto el Presidente de la República de Chile, Salvador Allende. Palacios reconoce a Allende por el reloj que éste llevaba. Es lo primero que le llama la atención. El reloj se lo había visto en diversas reuniones. La cara de Allende estaba protegida, al momento de ser acribillado, por una máscara antigas y llevaba puesto un casco de guerra".
El propio general Javier Palacios Ruhman, encargado de asaltar el palacio presidencial de La Moneda, amplió este relato, ya siendo mayor general en retiro, en declaraciones formuladas en setiembre de 1999 en su residencia de Viña del Mar. Dice: "Nos recibieron a balazos los miembros de la guardia personal de Allende. No veíamos casi nada por el humo, pero dominamos la resistencia". Un capitán del regimiento Tacna muere por los disparos del grupo de Allende. "Cuando entramos a una oficina, emergió un muchacho de rasgos araucanos, quien con una metralleta en la mano nos chorreó a balazos. Una de las balas rebotó y me pegó en la mano". En el grupo estaban los tenientes René Riveros, Armando Fernández Larios y los capitanes Roberto Garrido, Mosquera, Rigoberto Rubio, todos de la Escuela de Infantería de San Bernardo, que después pasarían a ser miembros fundadores de la siniestra DINA (remember el caso Berríos). Se dividen en grupos. El grupo del capitán Garrido llega al segundo piso, y allí el relato se entronca con la versión antes citada del asesinato de Allende a manos del capitán Roberto Garrido y el teniente René Riveros.
Sobre los acontecimientos previos al desenlace, hay documentos conmovedores, por ejemplo sobre el pedido de Allende a las mujeres para que se retiren de La Moneda. Expresa el entonces subsecretario del Interior, Daniel Vergara: "Allende suplicaba a sus hijas para que se retiraran en una actitud que era tan extraordinariamente paternal, de un cariño tan estremecedor que todos nos sentimos sacudidos. Las hijas obstinadamente se negaban a abandonar a su padre. En ese instante él ya tenía la convicción de que nos estábamos despidiendo en forma definitiva". Esto afectaba a sus hijas Beatriz (Tati) e Isabel, a la periodista Frida Modak (con quien trabajamos en México), a esposas de ministros y a una enfermera. Todos los testimonios coinciden, además, en la entereza y serenidad que demostró Allende, y su decisión de combatir hasta el último momento.
En la parte final de la documentación reunida se revelan todas las maniobras realizadas (desde las autopsias fraguadas hasta las versiones amañadas en El Mercurio) para urdir la tesis del suicidio, que ahora ha quedado definitivamente descartada. Ya se conoce a los asesinos, con nombre y apellido.
EL ASESINATO DEL PRESIDENTE ALLENDE
SIEMPRE HEMOS RECHAZADO LA VERSION SOBRE EL SUICIDIO EL PRESIDENTE SALVADOR ALLENDE, SOSTENIENDO QUE FUE ASESINADO EN EL GOLPE DE ESTADO PINOCHETISTA DEL 11 DE SETIEMBRE DE 1973, TRAS RESISTIR CON LAS ARMAS EN LA MANO HASTA EL ULTIMO MINUTO JUNTO A SUS FIELES COLABORADORES EN EL PALACIO DE LA MONEDA BOMBARDEADO. EL PRESIDENTE MARTIR ENTRO A LA HISTORIA ESE DIA Y SU DISCURSO DE LAS GRANDES ALAMEDAS POR DONDE TRANSITARA EL HOMBRE NUEVO QUEDO COMO UN LUCIDO EXPONENTE DE NUESTRO TIEMPO. AHORA ACABA DE PUBLICARSE UNA RECOPILACION DE DOCUMENTOS QUE TRAEN A LA LUZ LA VERDAD DE LOS HECHOS Y DESMIENTEN LA TRAMA DEL SUICIDIO URDIDA EN TODAS SUS PIEZAS POR LOS GOLPISTAS.
Niko Schvartz “La República” de Montrevideo
He aquí un relato de los acontecimientos en las horas decisivas de aquel día aciago, publicado bajo el título de "Oficiales de la Escuela de Infantería acribillaron al presidente Salvador Allende": "El grupo del capitán Garrido logra llegar al segundo piso, al Salón Rojo. Allí encuentra a cinco civiles que disparan entre los escombros, entre el humo, el calor. Uno de los civiles es el presidente Salvador Allende junto a cuatro miembros de su escolta personal, los GAP. Llegan otros militares a apoyar al grupo del capitán Garrido, pues allí es el único lugar donde se combate. Un militar de ese grupo dispara sobre uno de los civiles, es el Presidente Allende. Pero no logra alcanzarlo. El capitán Garrido, que está tendido en el suelo protegiéndose de los impactos del Presidente y sus escoltas dispara en ráfagas e impacta al Presidente Allende. Una de las balas penetra en el lado derecho de la cara, cerca de la nariz y bajo el ojo, otras dan en el pecho y estómago del Presidente. Allende se dobla, trata de afirmarse y cae cerca de la puerta de un salón. El teniente de la Escuela de Infantería René Riveros se acerca al cuerpo del Presidente Allende y lo remata. El Presidente tiene más de cinco impactos de bala."
Eugene Propper, fiscal norteamericano en el caso del doble asesinato en Washington de Orlando Letelier (ministro de Allende) y su secretaria norteamericana Ronnie Moffit, y que interrogó en EEUU al ex teniente de la Escuela de Infantería Armando Fernández Larios, quien era parte del grupo de militares que acribilló al Presidente Allende, escribe en su libro Laberinto: "Poco después de las 2 pm las compañías de infantería penetran en La Moneda. Algunos grupos corren al piso superior en medio del humo y cubriéndose con ráfagas de ametralladora. René Riveros, un teniente de pelo rubio, repentinamente se ve enfrentado a un civil armado que viste un sweater de cuello alto. Riveros vacía la mitad de su cargador en el Presidente de Chile, matándolo instantáneamente con heridas que van desde la ingle a la garganta".
Prosigue el relato "El general Palacios llega a la entrada del Salón Rojo a las 14.45. En el suelo yace muerto el Presidente de la República de Chile, Salvador Allende. Palacios reconoce a Allende por el reloj que éste llevaba. Es lo primero que le llama la atención. El reloj se lo había visto en diversas reuniones. La cara de Allende estaba protegida, al momento de ser acribillado, por una máscara antigas y llevaba puesto un casco de guerra".
El propio general Javier Palacios Ruhman, encargado de asaltar el palacio presidencial de La Moneda, amplió este relato, ya siendo mayor general en retiro, en declaraciones formuladas en setiembre de 1999 en su residencia de Viña del Mar. Dice: "Nos recibieron a balazos los miembros de la guardia personal de Allende. No veíamos casi nada por el humo, pero dominamos la resistencia". Un capitán del regimiento Tacna muere por los disparos del grupo de Allende. "Cuando entramos a una oficina, emergió un muchacho de rasgos araucanos, quien con una metralleta en la mano nos chorreó a balazos. Una de las balas rebotó y me pegó en la mano". En el grupo estaban los tenientes René Riveros, Armando Fernández Larios y los capitanes Roberto Garrido, Mosquera, Rigoberto Rubio, todos de la Escuela de Infantería de San Bernardo, que después pasarían a ser miembros fundadores de la siniestra DINA (remember el caso Berríos). Se dividen en grupos. El grupo del capitán Garrido llega al segundo piso, y allí el relato se entronca con la versión antes citada del asesinato de Allende a manos del capitán Roberto Garrido y el teniente René Riveros.
Sobre los acontecimientos previos al desenlace, hay documentos conmovedores, por ejemplo sobre el pedido de Allende a las mujeres para que se retiren de La Moneda. Expresa el entonces subsecretario del Interior, Daniel Vergara: "Allende suplicaba a sus hijas para que se retiraran en una actitud que era tan extraordinariamente paternal, de un cariño tan estremecedor que todos nos sentimos sacudidos. Las hijas obstinadamente se negaban a abandonar a su padre. En ese instante él ya tenía la convicción de que nos estábamos despidiendo en forma definitiva". Esto afectaba a sus hijas Beatriz (Tati) e Isabel, a la periodista Frida Modak (con quien trabajamos en México), a esposas de ministros y a una enfermera. Todos los testimonios coinciden, además, en la entereza y serenidad que demostró Allende, y su decisión de combatir hasta el último momento.
En la parte final de la documentación reunida se revelan todas las maniobras realizadas (desde las autopsias fraguadas hasta las versiones amañadas en El Mercurio) para urdir la tesis del suicidio, que ahora ha quedado definitivamente descartada. Ya se conoce a los asesinos, con nombre y apellido.
25 mar 2011
40 AÑOS DE BUENA SALUD
DE WWW.VADENUEVO - Nº 29 DE 03 DE FEBRERO DE 2011
LOS FRENTEAMPLISTAS Y EL GOBIERNO
DEL FRENTE AMPLIO
"¿Te lo imaginabas así?"
Tras seis años de gobierno del FA, la experiencia genera entre los frenteamplistas reacciones diversas, sobre todo en los veteranos. Esta es una visión individual.
Por Nicolás Grab
Me ha pasado algo que no es menuda cosa. He vivido para ver el Uruguay gobernado por el Frente Amplio.
No pudo verlo Líber Seregni. Ni José Pedro Cardoso, ni Zelmar Michelini, ni Enrique Rodríguez, ni tantos otros. Tampoco Julio Castro, o Eduardo Bleier, o Nibia Sabalsagaray o tantos más. Ni tantísimos…. Yo sí he visto al Frente Amplio gobernando el Uruguay. Esta sensación de privilegio (y hasta de privilegio caprichoso) probablemente nos sea común a todos los que, cuando el Frente cumple 40 años, llevamos 40 años de frenteamplistas. Y hay otra cosa que parece igualmente clara: no ha sido fácil. Ni llegar al gobierno, ni tampoco estar en él. Con una particularidad: lo primero lo supimos siempre, pero lo segundo ha sorprendido a muchos.
Ejercer el gobierno ha creado dificultades dentro del FA en todos los ámbitos. En el gobierno mismo para quienes asumieron responsabilidades en él; en el funcionamiento del Frente y también de sus sectores; y en el mundo y la cabeza de los frenteamplistas de a pie. En lo cual se repite la misma particularidad. Siempre supimos que gobernar el país y llevar nuestras aspiraciones a la realidad sería exigente y arduo; pero mucho menos tuvimos en nuestra perspectiva los problemas inéditos que crearía esa nueva situación para la estructura y el funcionamiento del Frente y de sus sectores. Y menos aun se previó que el ejercicio del gobierno generaría entre los frenteamplistas un abanico infinito de actitudes y reacciones.
Ojalá pudiera pretenderse que esas actitudes se determinaran siempre por una ponderación meditada, una reflexión calma sobre los aciertos y las fallas, los éxitos y las pifias. Sería lo justo, pero es pedir mucho. La reacción de cada uno no suele resultar de una cavilación detenida, y los factores que la desatan pueden ser ocasionales y estrechos. Puede surgir ante una barbaridad que no se entiende. O algo que me comentaron. O lo que el informativo destaca. O la actuación de alguien que me indigna.
Está en la naturaleza de las cosas y en la sicología normal del ser humano que lo negativo se destaque más. El fracaso y el disparate llaman la atención más que la labor bien cumplida, la realización del objetivo o el desempeño satisfactorio. En el gobierno del FA todos hemos visto cosas que desaprobamos muy firmemente. A todo frenteamplista le ha dolido alguna cosa. Todos hemos oído expresiones de amargura y desencanto. "¿Y para llegar a esto se luchó tanto?" "¿Alguna vez te imaginaste que el Frente fuera a hacer una cosa así?" "Los que dejaron su pellejo, ¿para qué fue?" "¿Me vas a decir que no se podía hacer mejor?" "¡Yo no voté para esto!"
Si se trata de admitir que en estos seis años hubo cosas profundamente negativas y graves, nadie lo puede poner en duda y en realidad no debe haber nadie, en el FA, que en su conciencia no lo sepa. La decepción y la amargura no son injustas porque no haya críticas válidas y de peso. Pero sí van erradas cuando se limitan a cargar esos reproches en el platillo negro de la balanza y la ponen en marcha sin más. Esto no significa decir que lo mal hecho pueda justificarse en nombre de otros aciertos o logros, ni negar que todo podría haber sido mejor. Siempre las cosas se podrían haber hecho mejor. Como también, ¡y no hay derecho a no pensarlo!, un primer gobierno del FA podría haber sido peor, o mucho peor, o muchísimo peor; y a la hora de la verdad no está de más preguntarnos qué es lo que, en medio de nuestras expectativas enormes y nuestros entusiasmos desatados, vaticinábamos en realidad como grado probable de éxito y acierto del FA cuando se iniciara en el gobierno.
Porque en esto hay algunas verdades que es inútil callar, tan enormes como obvias. Había un aprendizaje que recorrer cuando se cargó sobre las espaldas una máquina tan endemoniada como la del Estado, con mecanismos tan rechinantes como los del gobierno uruguayo; y es propio del aprendiz que rompa una pieza o estropee una herramienta. La segunda verdad que es obligatorio descubrir es que no somos perfectos. El FA, sus estructuras, sus militantes, individual y colectivamente, tienen esta cualidad bastante poco asombrosa: no son perfectos. Entre el par de miles de personas a quienes había que confiar tareas de gestión pública en cargos políticos hubo quienes no lograron cumplirlas a la altura de lo esperado, y también hubo quienes resultaron no ser dignos de ello. Y una tercera verdad que tampoco puede ser una revelación: las circunstancias (del país, del mundo, del momento) ponen límites e imponen ritmos cuyo trazado no sigue los contornos de lo que nosotros desearíamos. Después de cinco años del primer gobierno frenteamplista, José Mujica, al asumir el relevo, dijo esto ante el país: "El Frente Amplio tuvo que aceptar duras lecciones de la realidad. Descubrimos que gobernar era bastante más difícil de lo que pensábamos, que los recursos fiscales son finitos y las demandas sociales infinitas; que la burocracia tiene vida propia; que la macroeconomía tiene reglas ingratas pero obligatorias, y hasta tuvimos que aprender, con mucho dolor y con vergüenza, que no toda nuestra gente era inmune a la corrupción." Son palabras penosas, y hacía falta grandeza para decirlas. Pero pensemos si hay una sola entre todas ellas que no sea verdad rigurosa.
* * * * *
Hace seis años, el Sistema Nacional de Salud era una frase y una bandera. Los Consejos de Salarios eran recuerdos de los abuelos. El salario mínimo era de 1.310 pesos mensuales. La desocupación era el doble de la actual. Los trabajadores rurales eran parias olvidados por las leyes, y también los empleados domésticos. Los crímenes de la dictadura eran oficialmente una fábula de los resentidos; ningún militar había pisado la entrada de una cárcel ni de un juzgado, y los cuarteles eran un país aparte cerrado a cal y canto. Los planes del MIDES no existían y el MIDES tampoco. Ceibal solo podía ser un bosque de ceibos.
¿Cuántos son los servicios, los ministerios, las intendencias, de los que no se habla porque trabajan digna y calladamente? ¿Cuántos de ellos fueron antes calamidades nacionales, antros de delincuencia o covachas tradicionales de politiquería?
Sepamos y digamos que en el gobierno del FA hay cosas mal hechas y cosas sin hacer. Exijamos cumplimiento y responsabilidad; es nuestro derecho y hasta nuestro deber. Pongámonos en el bando de los exigentes; neguémonos a transar con la irresponsabilidad, con la inepcia y, ¡sobre todo!, con cualquier cosa peor. Pero demos a la crítica y la exigencia la fuerza que solo pueden tener cuando parten de una actitud ecuánime.
El gobierno del FA merece en su carné de notas un Debe esmerarse más. Ya lo recibió en las elecciones del año pasado. Pero fue promovido con justicia. Sepámoslo y digámoslo también.
El imperfecto gobierno del Frente Amplio merece la confianza que se le ratificó. Para decirlo en primera persona, ya que todo esto es una reflexión personal: después de seis años de gobierno del Frente, soy frenteamplista como durante cuarenta años y mi ínfimo grano de arena me enorgullece. El Frente Amplio tiene, junto con mi crítica y mis preocupaciones, mi firme preferencia, mi voto y mis esperanzas.
LOS FRENTEAMPLISTAS Y EL GOBIERNO
DEL FRENTE AMPLIO
"¿Te lo imaginabas así?"
Tras seis años de gobierno del FA, la experiencia genera entre los frenteamplistas reacciones diversas, sobre todo en los veteranos. Esta es una visión individual.
Por Nicolás Grab
Me ha pasado algo que no es menuda cosa. He vivido para ver el Uruguay gobernado por el Frente Amplio.
No pudo verlo Líber Seregni. Ni José Pedro Cardoso, ni Zelmar Michelini, ni Enrique Rodríguez, ni tantos otros. Tampoco Julio Castro, o Eduardo Bleier, o Nibia Sabalsagaray o tantos más. Ni tantísimos…. Yo sí he visto al Frente Amplio gobernando el Uruguay. Esta sensación de privilegio (y hasta de privilegio caprichoso) probablemente nos sea común a todos los que, cuando el Frente cumple 40 años, llevamos 40 años de frenteamplistas. Y hay otra cosa que parece igualmente clara: no ha sido fácil. Ni llegar al gobierno, ni tampoco estar en él. Con una particularidad: lo primero lo supimos siempre, pero lo segundo ha sorprendido a muchos.
Ejercer el gobierno ha creado dificultades dentro del FA en todos los ámbitos. En el gobierno mismo para quienes asumieron responsabilidades en él; en el funcionamiento del Frente y también de sus sectores; y en el mundo y la cabeza de los frenteamplistas de a pie. En lo cual se repite la misma particularidad. Siempre supimos que gobernar el país y llevar nuestras aspiraciones a la realidad sería exigente y arduo; pero mucho menos tuvimos en nuestra perspectiva los problemas inéditos que crearía esa nueva situación para la estructura y el funcionamiento del Frente y de sus sectores. Y menos aun se previó que el ejercicio del gobierno generaría entre los frenteamplistas un abanico infinito de actitudes y reacciones.
Ojalá pudiera pretenderse que esas actitudes se determinaran siempre por una ponderación meditada, una reflexión calma sobre los aciertos y las fallas, los éxitos y las pifias. Sería lo justo, pero es pedir mucho. La reacción de cada uno no suele resultar de una cavilación detenida, y los factores que la desatan pueden ser ocasionales y estrechos. Puede surgir ante una barbaridad que no se entiende. O algo que me comentaron. O lo que el informativo destaca. O la actuación de alguien que me indigna.
Está en la naturaleza de las cosas y en la sicología normal del ser humano que lo negativo se destaque más. El fracaso y el disparate llaman la atención más que la labor bien cumplida, la realización del objetivo o el desempeño satisfactorio. En el gobierno del FA todos hemos visto cosas que desaprobamos muy firmemente. A todo frenteamplista le ha dolido alguna cosa. Todos hemos oído expresiones de amargura y desencanto. "¿Y para llegar a esto se luchó tanto?" "¿Alguna vez te imaginaste que el Frente fuera a hacer una cosa así?" "Los que dejaron su pellejo, ¿para qué fue?" "¿Me vas a decir que no se podía hacer mejor?" "¡Yo no voté para esto!"
Si se trata de admitir que en estos seis años hubo cosas profundamente negativas y graves, nadie lo puede poner en duda y en realidad no debe haber nadie, en el FA, que en su conciencia no lo sepa. La decepción y la amargura no son injustas porque no haya críticas válidas y de peso. Pero sí van erradas cuando se limitan a cargar esos reproches en el platillo negro de la balanza y la ponen en marcha sin más. Esto no significa decir que lo mal hecho pueda justificarse en nombre de otros aciertos o logros, ni negar que todo podría haber sido mejor. Siempre las cosas se podrían haber hecho mejor. Como también, ¡y no hay derecho a no pensarlo!, un primer gobierno del FA podría haber sido peor, o mucho peor, o muchísimo peor; y a la hora de la verdad no está de más preguntarnos qué es lo que, en medio de nuestras expectativas enormes y nuestros entusiasmos desatados, vaticinábamos en realidad como grado probable de éxito y acierto del FA cuando se iniciara en el gobierno.
Porque en esto hay algunas verdades que es inútil callar, tan enormes como obvias. Había un aprendizaje que recorrer cuando se cargó sobre las espaldas una máquina tan endemoniada como la del Estado, con mecanismos tan rechinantes como los del gobierno uruguayo; y es propio del aprendiz que rompa una pieza o estropee una herramienta. La segunda verdad que es obligatorio descubrir es que no somos perfectos. El FA, sus estructuras, sus militantes, individual y colectivamente, tienen esta cualidad bastante poco asombrosa: no son perfectos. Entre el par de miles de personas a quienes había que confiar tareas de gestión pública en cargos políticos hubo quienes no lograron cumplirlas a la altura de lo esperado, y también hubo quienes resultaron no ser dignos de ello. Y una tercera verdad que tampoco puede ser una revelación: las circunstancias (del país, del mundo, del momento) ponen límites e imponen ritmos cuyo trazado no sigue los contornos de lo que nosotros desearíamos. Después de cinco años del primer gobierno frenteamplista, José Mujica, al asumir el relevo, dijo esto ante el país: "El Frente Amplio tuvo que aceptar duras lecciones de la realidad. Descubrimos que gobernar era bastante más difícil de lo que pensábamos, que los recursos fiscales son finitos y las demandas sociales infinitas; que la burocracia tiene vida propia; que la macroeconomía tiene reglas ingratas pero obligatorias, y hasta tuvimos que aprender, con mucho dolor y con vergüenza, que no toda nuestra gente era inmune a la corrupción." Son palabras penosas, y hacía falta grandeza para decirlas. Pero pensemos si hay una sola entre todas ellas que no sea verdad rigurosa.
* * * * *
Hace seis años, el Sistema Nacional de Salud era una frase y una bandera. Los Consejos de Salarios eran recuerdos de los abuelos. El salario mínimo era de 1.310 pesos mensuales. La desocupación era el doble de la actual. Los trabajadores rurales eran parias olvidados por las leyes, y también los empleados domésticos. Los crímenes de la dictadura eran oficialmente una fábula de los resentidos; ningún militar había pisado la entrada de una cárcel ni de un juzgado, y los cuarteles eran un país aparte cerrado a cal y canto. Los planes del MIDES no existían y el MIDES tampoco. Ceibal solo podía ser un bosque de ceibos.
¿Cuántos son los servicios, los ministerios, las intendencias, de los que no se habla porque trabajan digna y calladamente? ¿Cuántos de ellos fueron antes calamidades nacionales, antros de delincuencia o covachas tradicionales de politiquería?
Sepamos y digamos que en el gobierno del FA hay cosas mal hechas y cosas sin hacer. Exijamos cumplimiento y responsabilidad; es nuestro derecho y hasta nuestro deber. Pongámonos en el bando de los exigentes; neguémonos a transar con la irresponsabilidad, con la inepcia y, ¡sobre todo!, con cualquier cosa peor. Pero demos a la crítica y la exigencia la fuerza que solo pueden tener cuando parten de una actitud ecuánime.
El gobierno del FA merece en su carné de notas un Debe esmerarse más. Ya lo recibió en las elecciones del año pasado. Pero fue promovido con justicia. Sepámoslo y digámoslo también.
El imperfecto gobierno del Frente Amplio merece la confianza que se le ratificó. Para decirlo en primera persona, ya que todo esto es una reflexión personal: después de seis años de gobierno del Frente, soy frenteamplista como durante cuarenta años y mi ínfimo grano de arena me enorgullece. El Frente Amplio tiene, junto con mi crítica y mis preocupaciones, mi firme preferencia, mi voto y mis esperanzas.
23 feb 2011
"CRISIS" DE MEDIO ORIENTE
Estamos conmovidos por todo lo que esta ocurriendo en medio oriente,
pero ello no debe distraernos de las verdaderas causas que lo provocan,
sin tener en cuenta el estado actual de las economias del primer mundo.
La tremenda crisis financiera y especulativa por la que atraviesan los
paises desarrollados, su avidez de recursos que provienen del resto del
mundo -sobre todo energia y materia prima barata- han tenido la impronta
de alcanzarlos a cualquier precio, sin que se rasgaran las vestiduras al
sostener gobiernos afines de toda calaña soguzgando voluntades bajo el
terror o el sometimiento invasor, creando conflictos o exacerbando las
posiciones fundamentalistas con un claro sentido geopolitico.
Seria ingenuo pensar que atras de estos movimientos -legitimos y masivos-
no se esconde una clara intencion de debilitar el fragil equilibrio entre
judios y arabes,dando cabida a la participacion mas efectiva y por ende
menos negociadora, de militares mas radicalizados en el ejercicio del poder
que solo traera aparejada una nueva escalada belicista en la region.
No creo que sea casual que el principal instigador de los legitimos levantamientos populares , sea precisamente el director de Google para la region
-con todo lo que ello significa- y que la simultaneidad en diversos paises provenga de un plan unificado donde no hay, hasta donde hemos podido ver un “que se vayan todos” sino un recambio de figuras en el primer orden y un ascenso del PODER MILITAR en las decisiones y el gobierno y es dificil creer que cambie la situacion dramatica de una poblacion sufriente.Las depresiones economicas se han solucionado con guerras.El crack de los 30 genero la mas cruel en vidas humanas, hoy en apariencia no existiria tal peligro, pues entonces hay que crearlo.La situacion de aislacion y continuos escarceos con Iran sumados a estos ingentes esfuerzos por sumar mas paises con regimenes fundamentalistas, no deja de ser algo preocupante, sobre todo porque alli hay recursos infinitos para solventar presupuestos de guerra, por donde se dilapidan billones de petrodolares en armar ejercitos y empobrecer aun
mas a una poblacion que la mira de afuera.Ojala estos movimientos traigan aparejados esos cambios tan necesarios para modificar esta dura realidad, pero en lo que me es personal, mi
escepticismo aumenta a medida que pasan los dias y se conocen mas elementos que demuestran que no hay plan politico alternativo ni dirigentes con peso para promover otra cosa que no sean los ya clasicos y gastados generales de las fuerzas armadas, cuya ideologia precisamente no es la paz.
pero ello no debe distraernos de las verdaderas causas que lo provocan,
sin tener en cuenta el estado actual de las economias del primer mundo.
La tremenda crisis financiera y especulativa por la que atraviesan los
paises desarrollados, su avidez de recursos que provienen del resto del
mundo -sobre todo energia y materia prima barata- han tenido la impronta
de alcanzarlos a cualquier precio, sin que se rasgaran las vestiduras al
sostener gobiernos afines de toda calaña soguzgando voluntades bajo el
terror o el sometimiento invasor, creando conflictos o exacerbando las
posiciones fundamentalistas con un claro sentido geopolitico.
Seria ingenuo pensar que atras de estos movimientos -legitimos y masivos-
no se esconde una clara intencion de debilitar el fragil equilibrio entre
judios y arabes,dando cabida a la participacion mas efectiva y por ende
menos negociadora, de militares mas radicalizados en el ejercicio del poder
que solo traera aparejada una nueva escalada belicista en la region.
No creo que sea casual que el principal instigador de los legitimos levantamientos populares , sea precisamente el director de Google para la region
-con todo lo que ello significa- y que la simultaneidad en diversos paises provenga de un plan unificado donde no hay, hasta donde hemos podido ver un “que se vayan todos” sino un recambio de figuras en el primer orden y un ascenso del PODER MILITAR en las decisiones y el gobierno y es dificil creer que cambie la situacion dramatica de una poblacion sufriente.Las depresiones economicas se han solucionado con guerras.El crack de los 30 genero la mas cruel en vidas humanas, hoy en apariencia no existiria tal peligro, pues entonces hay que crearlo.La situacion de aislacion y continuos escarceos con Iran sumados a estos ingentes esfuerzos por sumar mas paises con regimenes fundamentalistas, no deja de ser algo preocupante, sobre todo porque alli hay recursos infinitos para solventar presupuestos de guerra, por donde se dilapidan billones de petrodolares en armar ejercitos y empobrecer aun
mas a una poblacion que la mira de afuera.Ojala estos movimientos traigan aparejados esos cambios tan necesarios para modificar esta dura realidad, pero en lo que me es personal, mi
escepticismo aumenta a medida que pasan los dias y se conocen mas elementos que demuestran que no hay plan politico alternativo ni dirigentes con peso para promover otra cosa que no sean los ya clasicos y gastados generales de las fuerzas armadas, cuya ideologia precisamente no es la paz.
4 feb 2011
HOMENAJE 40 AÑOS DEL FRENTE AMPLIO
DECLARACIÓN CONSTITUTIVA
El Movimiento por el Gobierno del Pueblo, lista 99; el Partido Demócrata
Cristiano; el Movimiento Blanco Popular y Progresista; el Frente Izquierda de
Liberación, el Partido Comunista, el Partido Socialista, el Partido Socialista
(Movimiento Socialista); el Movimiento Herrerista, lista 58; los Grupos de
Acción Unificadora; el Partido Obrero Revolucionario (Trotskista); el
Movimiento Revolucionario Oriental y el Comité Ejecutivo Provisorio de los
ciudadanos que formularon el llamamiento del 7 de Octubre próximo pasado,
reunidos a invitación del Frente del Pueblo, hemos convenido en formular la
siguiente declaración política que constituye el primer documento del Frente
Amplio.
El gobierno de la Oligarquía
La profunda crisis estructural que el país padece desde hace décadas, su
dependencia del extranjero y el predominio de una oligarquía en directa
connivencia con el imperialismo, han ido creando, por un lado, hondas
tensiones sociales y por otro, un clima de preocupación colectiva sobre el
destino mismo de la nacionalidad oriental. Cuando el deterioro económico
desembocó en un proceso inflacionario paralizante de toda posibilidad de
desarrollo, la oligarquía encontró, en el gobierno actual, un coherente intérprete
político de su propia respuesta ante la crisis. Ambos pretendieron establecer un
orden basado en el despotismo; atropellaron las libertades públicas y sindicales;
agredieron física y materialmente a la Universidad y a la enseñanza media;
empobrecieron a los trabajadores al congelar realmente los salarios y
nominalmente los precios; redujeron la capacidad adquisitiva de los ingresos de
funcionarios y empleados, jubilados y pensionistas y vastos sectores de capas
medias; asfixiaron a modestos y medianos industriales, comerciantes y
productores rurales; paralizaron las fuerzas productivas y desalentaron el
trabajo; desmantelaron resortes vitales de la economía nacional como los
bancos oficiales, el Frigorífico Nacional, los entes energéticos y los servicios de
transporte. Enajenaron progresivamente – por la sumisión a las recetas del
Fondo Monetario, por el endeudamiento externo, por la contratación de
empréstitos lesivos, por la complicidad en la evasión criminal de divisas - la
soberanía del país.
Todo ello para mantener intacto los privilegios de una minoría apátrida y
parasitaria en alianza con las fuerzas regresivas del poder imperial. La Republica
camina hacia la ignominiosa condición de una colonia de los Estados Unidos.
La resistencia popular
El pueblo lúcido, su clase trabajadora y su juventud estudiantil, los
creadores y difusores de la cultura, los partidos políticos progresistas,
enfrentaron esa conducta antinacional y antipopular defendiendo la existencia
de la nación, por hacerlo, sufrieron vejaciones, privaciones de libertad,
destituciones, confiscaciones, proscripciones, torturas y crímenes,
cercenamiento de derechos y clausura de órganos de expresión, toda una gama
de atropellos que parecían relegados a la oscura peripecia de pasados tiempos.
Sangre juvenil y obrera regó las calles, porque la voluntad libertaria del pueblo
uruguayo, su dignidad y decoro y la creciente comprensión de las causas
profundas de este desorbitado ejercicio del poder, exigía una respuesta que no se
amilanó ante la saña represiva y fue forjando, en la dura experiencia de lucha,
las bases de la unidad popular.
Una polarización inevitable
La coyuntura histórica conducía a una polarización entre el pueblo y la
oligarquía que se hubiera cumplido de cualquier modo, ya que los trabajadores,
los estudiantes y todos los sectores progresistas resistieron las imposiciones
antinacionales. Pero la regresividad y violencia de la política gubernamental, sin
precedentes, en el correr del siglo, ofició como un acelerador en el proceso de
enfrentamiento, en la conciencia colectiva de cambios urgentes y profundos, en
la necesidad de instrumentar un aparato político capaz de aglutinar las fuerzas
populares auténticamente nacionales para agotar las vías democráticas a fin de
que el pueblo, mediante su lucha y su movilización, realizara las grandes
transformaciones por las que el país entero clama.
La unidad política de las corrientes progresistas que culmina con la
formación del Frente Amplio - cerrando un ciclo en la historia del país y
abriendo, simultáneamente, otro de esperanza y fe en el futuro –, se gestó en la
lucha del pueblo contra la filosofía fascistizante de la fuerza. Y esa unión, por
su esencia y por su origen, por tener al pueblo como protagonista, ha permitido
agrupar fraternalmente a los colorados y blancos, a demócratas cristianos y
marxistas, a hombres y mujeres de ideologías, concepciones religiosas y
filosofías diferentes, a trabajadores, estudiantes, docentes, sacerdotes y pastores,
pequeños y medianos productores, industriales y comerciantes, civiles y
militares, intelectuales y artistas, en una palabra, a todos los representantes del
trabajo y la cultura, a los legítimos voceros de la entraña misma de la
nacionalidad. Porque es un movimiento profundo que enraíza con las puras
tradiciones del país, que recoge y venera las construcciones que vienen del
fondo de la historia, y tiene, simultáneamente claros objetivos para alcanzar un
provenir venturoso, siente que su vertiente más honda lo enlaza con la
esclarecida, insobornable y combatiente gesta del artiguismo.
Las bases programáticas de la unidad
En esta dramática circunstancia, consciente de nuestra responsabilidad y
convencidos de que ninguna fuerza política aislada sería capaz de abrir una
alternativa cierta de poder al pueblo organizado, hemos entendido que
constituye un imperativo de la hora, concertar nuestros esfuerzos, mediante un
acuerdo político, para establecer un programa destinado a superar la crisis
estructural, a restituir al país su destino de nación independiente y a reintegrar
al pueblo el pleno ejercicio de su libertades y de sus derechos individuales,
políticos y sindicales. Un programa de contenido democrático y
antiimperialista que establezca el control y la dirección planificada y
nacionalizada de los puntos claves del sistema económico para sacar al país de
su estancamiento, redistribuir de modo equitativo el ingreso, aniquilar el
predominio de la oligarquía de intermediarios, banqueros y latifundistas y
realizar una política de efectiva libertad y bienestar, basada en el esfuerzo
productivo de todos los habitantes de la República.
Expresamos nuestro hondo convencimiento de que la construcción de una
sociedad justa, con sentido nacional y progresista, liberada de la tutela imperial
es imposible en los esquemas de un régimen dominado por el gran capital. La
ruptura con este sistema es una condición ineludible de un proceso de cambio de
sus caducas estructuras y de conquista de la efectiva independencia de la nación.
Ello exigirá, a su tiempo, la modificación del ordenamiento jurídico –
institucional, a efectos de facilitar las imprescindibles trasformaciones que
procura.
Concebimos este esfuerzo nacional como parte de la lucha por la
liberación y desarrollo de los pueblos del Tercer Mundo en general, de la cual
somos solidarios, y en particular, de la que tiene por escenario a nuestra
América Latina, en donde, como hace mas de un siglo y medio, la insurgencia
de sus pueblos, habrá de desembocar en la conquista de la segunda y definitiva
emancipación.
Declaración y llamamiento
Por los fundamentos expuestos, hemos resuelto:
1°) Constituir un frente político unitario – Frente Amplio – mediante la
conjunción de las fuerzas políticas y de la ciudadanía independiente que firman
este documento, para plantear la lucha de inmediato, en todos los campos, tanto
en la oposición a la actual tiranía o a quienes pretendan continuarla, como en el
gobierno. Este Frente Amplio esta abierto a la incorporación de otras fuerzas
políticas que alienten su misma concepción nacional progresista y democrática
avanzada.
2°) Contraer en este mismo acto, el formal compromiso de establecer un
programa común, ceñirnos a él en la lucha fraternal y solidaria colaboración, así
como actuar coordinadamente en todos los campos de acción política, sobre la
base de que atribuimos al pueblo, organizado democráticamente, el papel
protagónico en el proceso histórico.
3°) Establecer que esta coalición de fuerzas - que no es una fusión y
donde cada uno de sus partícipes mantiene su identidad -, ha de estar dotada de
una organización con núcleos de base y autoridades comunes, mandato
imperativo y demás mecanismos de disciplina que aseguren el cumplimiento
efectivo de los compromisos postulados convenidos
4°) Declarar que el objetivo fundamental del Frente Amplio es la acción
política permanente y no la contienda electoral; al mismo tiempo afrontará
unido las instancias comiciales, con soluciones honestas y claras que restituyan
a la ciudadanía la disposición de su destino, evitado la actual falsificación de su
voluntad.
En función de estos principios y objetivos convocamos al pueblo a
incorporarse al Frente Amplio y a participar activamente en la lucha y en los
trabajos que emprendemos.
Montevideo, febrero 5 de 1971
El Movimiento por el Gobierno del Pueblo, lista 99; el Partido Demócrata
Cristiano; el Movimiento Blanco Popular y Progresista; el Frente Izquierda de
Liberación, el Partido Comunista, el Partido Socialista, el Partido Socialista
(Movimiento Socialista); el Movimiento Herrerista, lista 58; los Grupos de
Acción Unificadora; el Partido Obrero Revolucionario (Trotskista); el
Movimiento Revolucionario Oriental y el Comité Ejecutivo Provisorio de los
ciudadanos que formularon el llamamiento del 7 de Octubre próximo pasado,
reunidos a invitación del Frente del Pueblo, hemos convenido en formular la
siguiente declaración política que constituye el primer documento del Frente
Amplio.
El gobierno de la Oligarquía
La profunda crisis estructural que el país padece desde hace décadas, su
dependencia del extranjero y el predominio de una oligarquía en directa
connivencia con el imperialismo, han ido creando, por un lado, hondas
tensiones sociales y por otro, un clima de preocupación colectiva sobre el
destino mismo de la nacionalidad oriental. Cuando el deterioro económico
desembocó en un proceso inflacionario paralizante de toda posibilidad de
desarrollo, la oligarquía encontró, en el gobierno actual, un coherente intérprete
político de su propia respuesta ante la crisis. Ambos pretendieron establecer un
orden basado en el despotismo; atropellaron las libertades públicas y sindicales;
agredieron física y materialmente a la Universidad y a la enseñanza media;
empobrecieron a los trabajadores al congelar realmente los salarios y
nominalmente los precios; redujeron la capacidad adquisitiva de los ingresos de
funcionarios y empleados, jubilados y pensionistas y vastos sectores de capas
medias; asfixiaron a modestos y medianos industriales, comerciantes y
productores rurales; paralizaron las fuerzas productivas y desalentaron el
trabajo; desmantelaron resortes vitales de la economía nacional como los
bancos oficiales, el Frigorífico Nacional, los entes energéticos y los servicios de
transporte. Enajenaron progresivamente – por la sumisión a las recetas del
Fondo Monetario, por el endeudamiento externo, por la contratación de
empréstitos lesivos, por la complicidad en la evasión criminal de divisas - la
soberanía del país.
Todo ello para mantener intacto los privilegios de una minoría apátrida y
parasitaria en alianza con las fuerzas regresivas del poder imperial. La Republica
camina hacia la ignominiosa condición de una colonia de los Estados Unidos.
La resistencia popular
El pueblo lúcido, su clase trabajadora y su juventud estudiantil, los
creadores y difusores de la cultura, los partidos políticos progresistas,
enfrentaron esa conducta antinacional y antipopular defendiendo la existencia
de la nación, por hacerlo, sufrieron vejaciones, privaciones de libertad,
destituciones, confiscaciones, proscripciones, torturas y crímenes,
cercenamiento de derechos y clausura de órganos de expresión, toda una gama
de atropellos que parecían relegados a la oscura peripecia de pasados tiempos.
Sangre juvenil y obrera regó las calles, porque la voluntad libertaria del pueblo
uruguayo, su dignidad y decoro y la creciente comprensión de las causas
profundas de este desorbitado ejercicio del poder, exigía una respuesta que no se
amilanó ante la saña represiva y fue forjando, en la dura experiencia de lucha,
las bases de la unidad popular.
Una polarización inevitable
La coyuntura histórica conducía a una polarización entre el pueblo y la
oligarquía que se hubiera cumplido de cualquier modo, ya que los trabajadores,
los estudiantes y todos los sectores progresistas resistieron las imposiciones
antinacionales. Pero la regresividad y violencia de la política gubernamental, sin
precedentes, en el correr del siglo, ofició como un acelerador en el proceso de
enfrentamiento, en la conciencia colectiva de cambios urgentes y profundos, en
la necesidad de instrumentar un aparato político capaz de aglutinar las fuerzas
populares auténticamente nacionales para agotar las vías democráticas a fin de
que el pueblo, mediante su lucha y su movilización, realizara las grandes
transformaciones por las que el país entero clama.
La unidad política de las corrientes progresistas que culmina con la
formación del Frente Amplio - cerrando un ciclo en la historia del país y
abriendo, simultáneamente, otro de esperanza y fe en el futuro –, se gestó en la
lucha del pueblo contra la filosofía fascistizante de la fuerza. Y esa unión, por
su esencia y por su origen, por tener al pueblo como protagonista, ha permitido
agrupar fraternalmente a los colorados y blancos, a demócratas cristianos y
marxistas, a hombres y mujeres de ideologías, concepciones religiosas y
filosofías diferentes, a trabajadores, estudiantes, docentes, sacerdotes y pastores,
pequeños y medianos productores, industriales y comerciantes, civiles y
militares, intelectuales y artistas, en una palabra, a todos los representantes del
trabajo y la cultura, a los legítimos voceros de la entraña misma de la
nacionalidad. Porque es un movimiento profundo que enraíza con las puras
tradiciones del país, que recoge y venera las construcciones que vienen del
fondo de la historia, y tiene, simultáneamente claros objetivos para alcanzar un
provenir venturoso, siente que su vertiente más honda lo enlaza con la
esclarecida, insobornable y combatiente gesta del artiguismo.
Las bases programáticas de la unidad
En esta dramática circunstancia, consciente de nuestra responsabilidad y
convencidos de que ninguna fuerza política aislada sería capaz de abrir una
alternativa cierta de poder al pueblo organizado, hemos entendido que
constituye un imperativo de la hora, concertar nuestros esfuerzos, mediante un
acuerdo político, para establecer un programa destinado a superar la crisis
estructural, a restituir al país su destino de nación independiente y a reintegrar
al pueblo el pleno ejercicio de su libertades y de sus derechos individuales,
políticos y sindicales. Un programa de contenido democrático y
antiimperialista que establezca el control y la dirección planificada y
nacionalizada de los puntos claves del sistema económico para sacar al país de
su estancamiento, redistribuir de modo equitativo el ingreso, aniquilar el
predominio de la oligarquía de intermediarios, banqueros y latifundistas y
realizar una política de efectiva libertad y bienestar, basada en el esfuerzo
productivo de todos los habitantes de la República.
Expresamos nuestro hondo convencimiento de que la construcción de una
sociedad justa, con sentido nacional y progresista, liberada de la tutela imperial
es imposible en los esquemas de un régimen dominado por el gran capital. La
ruptura con este sistema es una condición ineludible de un proceso de cambio de
sus caducas estructuras y de conquista de la efectiva independencia de la nación.
Ello exigirá, a su tiempo, la modificación del ordenamiento jurídico –
institucional, a efectos de facilitar las imprescindibles trasformaciones que
procura.
Concebimos este esfuerzo nacional como parte de la lucha por la
liberación y desarrollo de los pueblos del Tercer Mundo en general, de la cual
somos solidarios, y en particular, de la que tiene por escenario a nuestra
América Latina, en donde, como hace mas de un siglo y medio, la insurgencia
de sus pueblos, habrá de desembocar en la conquista de la segunda y definitiva
emancipación.
Declaración y llamamiento
Por los fundamentos expuestos, hemos resuelto:
1°) Constituir un frente político unitario – Frente Amplio – mediante la
conjunción de las fuerzas políticas y de la ciudadanía independiente que firman
este documento, para plantear la lucha de inmediato, en todos los campos, tanto
en la oposición a la actual tiranía o a quienes pretendan continuarla, como en el
gobierno. Este Frente Amplio esta abierto a la incorporación de otras fuerzas
políticas que alienten su misma concepción nacional progresista y democrática
avanzada.
2°) Contraer en este mismo acto, el formal compromiso de establecer un
programa común, ceñirnos a él en la lucha fraternal y solidaria colaboración, así
como actuar coordinadamente en todos los campos de acción política, sobre la
base de que atribuimos al pueblo, organizado democráticamente, el papel
protagónico en el proceso histórico.
3°) Establecer que esta coalición de fuerzas - que no es una fusión y
donde cada uno de sus partícipes mantiene su identidad -, ha de estar dotada de
una organización con núcleos de base y autoridades comunes, mandato
imperativo y demás mecanismos de disciplina que aseguren el cumplimiento
efectivo de los compromisos postulados convenidos
4°) Declarar que el objetivo fundamental del Frente Amplio es la acción
política permanente y no la contienda electoral; al mismo tiempo afrontará
unido las instancias comiciales, con soluciones honestas y claras que restituyan
a la ciudadanía la disposición de su destino, evitado la actual falsificación de su
voluntad.
En función de estos principios y objetivos convocamos al pueblo a
incorporarse al Frente Amplio y a participar activamente en la lucha y en los
trabajos que emprendemos.
Montevideo, febrero 5 de 1971
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