Informe releva que 317 líderes sociales fueron asesinados en los últimos 15 meses
16 mayo, 2019
En los últimos 15 meses han asesinado a 317 líderes sociales en Colombia
Un informe publicado por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses este miércoles, revela las preocupantes cifras de líderes sociales que han sido asesinados en el país desde el primero de enero de 2018 hasta el 30 de abril de este año: 317.
Los departamentos en los que más asesinatos se han registrado son Cauca con 67 casos, seguido de Antioquia con 44, Norte de Santander y Nariño con 25 cada uno.
Estos dos últimos departamentos son de los más convulsos de Colombia por la fuerte presencia de las disidencias de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un reducto del Ejército Popular de Liberación (EPL), considerado por el Gobierno como una banda criminal.
De acuerdo a este informe, el municipio de Tumaco (Nariño) fue en el que más asesinatos de líderes sociales se cometieron, con 15, mientras que el segundo más violento fue Corinto, en Cauca, con once líderes muertos.
Uno de los colectivos que más ha recibido esta violencia son los indígenas, con 74 líderes asesinados, 12 mujeres y 62 hombres, principalmente de la etnia Nasa, con 32 muertos.
Según cifras del Gobierno colombiano, 4.500 líderes sociales tienen custodia de la Unidad Nacional de Protección (UNP).
En lo que respecta a la violencia política, el informe de Medicina Legal señala que 31 militantes del partido político de izquierdas Marcha Patriótica fueron asesinados en ese periodo.
En su mayoría, los militantes asesinados hacían parte del Plan Nacional Integral de Sustitución (PNIS) de cultivos ilícitos.
La semana pasada, el Centro de Investigación y Educación Popular (Cinep), de la comunidad jesuita, alertó sobre el aumento de la violencia política en el país y del anonimato de los victimarios.
Según el informe de los jesuitas, 648 personas fueron asesinadas por este motivo en 2018, a pesar de la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y la antigua guerrilla FARC, en noviembre de 2016.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) expresó su preocupación a principios de este mes por los ataques contra líderes sociales en el suroeste de Colombia, después de un ataque el pasado 4 de mayo contra más de 20 defensores de derechos humanos de la Asociación de Consejos Comunitarios del Norte del Cauca, la Asociación de Mujeres Afrodescendientes del Norte del Cauca y del Proceso de Comunidades Negras.
Según el informe anual de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos sobre el país, al menos 113 líderes sociales o defensores de derechos humanos fueron asesinados en Colombia el año pasado.
El Heraldo
Los departamentos en los que más asesinatos se han registrado son Cauca con 67 casos, seguido de Antioquia con 44, Norte de Santander y Nariño con 25 cada uno.
Estos dos últimos departamentos son de los más convulsos de Colombia por la fuerte presencia de las disidencias de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un reducto del Ejército Popular de Liberación (EPL), considerado por el Gobierno como una banda criminal.
De acuerdo a este informe, el municipio de Tumaco (Nariño) fue en el que más asesinatos de líderes sociales se cometieron, con 15, mientras que el segundo más violento fue Corinto, en Cauca, con once líderes muertos.
Uno de los colectivos que más ha recibido esta violencia son los indígenas, con 74 líderes asesinados, 12 mujeres y 62 hombres, principalmente de la etnia Nasa, con 32 muertos.
Según cifras del Gobierno colombiano, 4.500 líderes sociales tienen custodia de la Unidad Nacional de Protección (UNP).
En lo que respecta a la violencia política, el informe de Medicina Legal señala que 31 militantes del partido político de izquierdas Marcha Patriótica fueron asesinados en ese periodo.
En su mayoría, los militantes asesinados hacían parte del Plan Nacional Integral de Sustitución (PNIS) de cultivos ilícitos.
La semana pasada, el Centro de Investigación y Educación Popular (Cinep), de la comunidad jesuita, alertó sobre el aumento de la violencia política en el país y del anonimato de los victimarios.
Según el informe de los jesuitas, 648 personas fueron asesinadas por este motivo en 2018, a pesar de la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y la antigua guerrilla FARC, en noviembre de 2016.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) expresó su preocupación a principios de este mes por los ataques contra líderes sociales en el suroeste de Colombia, después de un ataque el pasado 4 de mayo contra más de 20 defensores de derechos humanos de la Asociación de Consejos Comunitarios del Norte del Cauca, la Asociación de Mujeres Afrodescendientes del Norte del Cauca y del Proceso de Comunidades Negras.
Según el informe anual de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos sobre el país, al menos 113 líderes sociales o defensores de derechos humanos fueron asesinados en Colombia el año pasado.
El Heraldo
Colombia: renunció la ministra de Justicia Gloria María Borrero
Gloria María Borrero se va del Ministerio de Justicia y llega Margarita Cabello
Gloria María Borrero, ministra de Justicia, renunció a su cargo después de ocho meses de haber llegado a esa cartera. Fuentes de ese Ministerio contaron que, durante toda la semana, Borrero estuvo hablando con el presidente Iván Duque para salir del Gobierno. Sin embargo, la decisión de la Jurisdicción Especial para la Paz de no extraditar a Jesús Santrich y la renuncia del fiscal general, Néstor Humberto Martínez, habían pospuesto el anuncio de su decisión.
“Hay ciclos que se cumplen. He aceptado su renuncia ya hace varios días y quiero agradecerle su trabajo, patriotismo y reconocerle sus esfuerzos en sacar adelante la política Ruta Futuro para enfrentar el fenómeno de la drogadicción y la criminalidad relacionada por el narcotráfico”, señaló el presidente Iván Duque en rueda de prensa.
La cartera no se queda huérfana. En Medellín, el presidente Duque anunció de inmediato que Margarita Cabello, expresidenta de la Corte Suprema e integrante de la Sala Civil desde 2012, es la persona llamada a reemplazar a Borrero. Conocida por su cercanía con personajes del mundo político como Alejandro Ordóñez, Cabello fue una de las candidatas del presidente para ser nombrada fiscal ad hoc en los casos de Odebrecht que ni el fiscal Néstor Humberto Martínez ni la vicefiscal María Paulina Riveros podían asumir.
“Una mujer que tiene una larga trayectoria en la Rama Judicial. Una mujer que ha hecho todos los peldaños de esa carrera hasta llegar al más alto honor que ha sido el de ser presidente de la Corte Suprema. Consideramos que la llegada va a contribuir muchísimo en el relacionamiento institucional del gobierno para que toda la reforma integral, que va desde los temas procedimentales, tecnológicos hasta los temas normativos, sea exitoso y pueda generar un amplio consenso en todo el pais” aseguró el presidente Duque en medio de un consejo de seguridad en Medellín.
Cabello Blanco es egresada de la Corporación Universitaria de la Costa, especialista en Derecho de Familia de la Universidad Autónoma de Bucaramanga y en Derecho Procesal Civil de las universidades Externado y de Cartagena. Inició su trayectoria profesional como juez penal en Sabanalarga (Atlántico), juez de menores y juez civil del de Barranquilla hasta llegar a la magistratura del Tribunal Superior de Barranquilla. Antes de llegar al alto tribunal fungió como Delegada de la Sala Disciplinaria de la
“A ella le encargaremos muchas tareas pero tendrá la inmensa responsabilidad de avanzar en todas las tareas que se requieran para la modernización de la Rama Judicial. También le hemos encomendado la tarea de sacar adelante la implementación de la política Ruta Futuro y de liderar todos los esfuerzos para combatir el narcotráfico desde el punto de vista normativo y por supuesto con su liderazgo en el Consejo Nacional de Estupefacientes”, señaló el presidente Duque.
El Espectador
Gloria María Borrero se va del Ministerio de Justicia y llega Margarita Cabello
Gloria María Borrero, ministra de Justicia, renunció a su cargo después de ocho meses de haber llegado a esa cartera. Fuentes de ese Ministerio contaron que, durante toda la semana, Borrero estuvo hablando con el presidente Iván Duque para salir del Gobierno. Sin embargo, la decisión de la Jurisdicción Especial para la Paz de no extraditar a Jesús Santrich y la renuncia del fiscal general, Néstor Humberto Martínez, habían pospuesto el anuncio de su decisión.
“Hay ciclos que se cumplen. He aceptado su renuncia ya hace varios días y quiero agradecerle su trabajo, patriotismo y reconocerle sus esfuerzos en sacar adelante la política Ruta Futuro para enfrentar el fenómeno de la drogadicción y la criminalidad relacionada por el narcotráfico”, señaló el presidente Iván Duque en rueda de prensa.
La cartera no se queda huérfana. En Medellín, el presidente Duque anunció de inmediato que Margarita Cabello, expresidenta de la Corte Suprema e integrante de la Sala Civil desde 2012, es la persona llamada a reemplazar a Borrero. Conocida por su cercanía con personajes del mundo político como Alejandro Ordóñez, Cabello fue una de las candidatas del presidente para ser nombrada fiscal ad hoc en los casos de Odebrecht que ni el fiscal Néstor Humberto Martínez ni la vicefiscal María Paulina Riveros podían asumir.
“Una mujer que tiene una larga trayectoria en la Rama Judicial. Una mujer que ha hecho todos los peldaños de esa carrera hasta llegar al más alto honor que ha sido el de ser presidente de la Corte Suprema. Consideramos que la llegada va a contribuir muchísimo en el relacionamiento institucional del gobierno para que toda la reforma integral, que va desde los temas procedimentales, tecnológicos hasta los temas normativos, sea exitoso y pueda generar un amplio consenso en todo el pais” aseguró el presidente Duque en medio de un consejo de seguridad en Medellín.
Cabello Blanco es egresada de la Corporación Universitaria de la Costa, especialista en Derecho de Familia de la Universidad Autónoma de Bucaramanga y en Derecho Procesal Civil de las universidades Externado y de Cartagena. Inició su trayectoria profesional como juez penal en Sabanalarga (Atlántico), juez de menores y juez civil del de Barranquilla hasta llegar a la magistratura del Tribunal Superior de Barranquilla. Antes de llegar al alto tribunal fungió como Delegada de la Sala Disciplinaria de la
“A ella le encargaremos muchas tareas pero tendrá la inmensa responsabilidad de avanzar en todas las tareas que se requieran para la modernización de la Rama Judicial. También le hemos encomendado la tarea de sacar adelante la implementación de la política Ruta Futuro y de liderar todos los esfuerzos para combatir el narcotráfico desde el punto de vista normativo y por supuesto con su liderazgo en el Consejo Nacional de Estupefacientes”, señaló el presidente Duque.
El Espectador