14 Agosto 2020
Los buques "Bella", "Bering", "Pandi" y "Luna" repletos de combustibles fueron derivados a Texas.Gentileza: Scoopnest
El gobierno de los Estados Unidos incautó el cargamento de cuatro barcos presuntamente cargados con más de 1 millón de barriles de combustibles con destino a Venezuela, según informó el Wall Street Journal en las últimas horas. Son los buques "Bella", "Bering", "Pandi" y "Luna". La orden salió del Departamento de Justicia de EEUU. Las naves están en ruta a Houston, Texas.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos emitió el mes pasado una orden para incautar el cargamento de los buques "Bella", "Bering", "Pandi" y "Luna", vinculándolos con la Guardia Revolucionaria de Irán, que Washington ha calificado de grupo terrorista. La demanda fue el último movimiento en los esfuerzos del gobierno de Donald Trump para aumentar la presión económica sobre Irán y Venezuela.
Los cuatro barcos fueron interceptados en el mar y ahora están en ruta a Houston, Texas, afirmó el periódico, citando a funcionarios estadounidenses. En junio pasado Irán concretó el envío de otros barcos con combustible Clavel, Petunia, Fortune, Forest y Faxon, que lograron entrar en aguas venezolanas pese a las advertencias de EEUU.
La demanda de la justicia estadounidense dice que el empresario iraní Mahmud Madanipur, quien presuntamente tiene vínculos con la Guardia Revolucionaria, organizó envíos para Venezuela utilizando compañías de fachada offshore y transferencias de barco a barco para evitar sanciones contra Irán.
El embajador de Irán en Venezuela dijo que los informes de que los petroleros iraníes habían sido capturados eran "otra mentira y guerra psicológica" de Estados Unidos. "Los barcos no son iraníes, y ni el dueño ni su bandera tienen nada que ver con Irán", dijo Hojat Soltani en Twitter, en español.
Venezuela es altamente dependiente de sus ingresos petroleros pero su producción ha caído a aproximadamente una cuarta parte de su capacidad de 2008 y su economía ha sido devastada por seis años de recesión.
Las sanciones de Washington contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro han obligado a Venezuela, que solía refinar suficiente petróleo para sus propias necesidades, a recurrir a aliados como Irán para aliviar una desesperada escasez de gasolina. Irán ya envió varios barcos de combustibles este año a Venezuela, para ayudarle a solventar esa escasez.