"Hay un nuevo paradigma golpista pseudoinstitucional"
Dilma Rousseff
La presidente legítima de Brasil, Dilma Rousseff -suspendida por la Cámara de Diputados mientras tramita su juicio político, sostuvo que "hay un nuevo paradigma golpista pseudoinstitucional" en la región y aseveró que se está atacando a "los líderes popualres".
En una entrevista con el matutino Página/12, Rousseff habló sobre el golpe en gestación contra su gobierno y describió en el contexto de una América Latina en la que vislumbra estallidos sociales.
En ese sentido dijo: "Considero importante estudiar las raíces de esta nueva forma de golpe que ocurren en América Latina. Lo primero que vemos es el comportamiento de las elites formando alianzas amplias para derrocar a los gobiernos populares a fin de impedir que continúen con sus programas sociales y de impulso al desarrollo. Vemos también que cambió el patrón del golpe. En los años 60 y 70 era el paradigma del golpe militar, con las oligarquías utilizando a las fuerzas armadas para separar del poder a los gobiernos legítimos".
Asimismo, remarcó que bajo esa modalidad surgió un golpe en Honduras "cuando derrocaron al presidente Manuel Zelaya (2009)" y agregó que "después vino Paraguay con la caída de Fernando Lugo (2012) y ahora llegó a Brasil, aunque todavía este proceso está en curso".
En tanto, señaló que no hay que olvidar "los intentos desestabilización contra los presidentes Evo Moralesy Rafael Correa".
En ese orden, consideró que "quienes están apostando en estos golpes en América Latina corren el riesgo de causar una desestabilización profunda. Estos procesos golpistas pueden traer consecuencias imprevisibles donde es probable que haya explosiones sociales, me parece que ni los propios golpistas saben lo que podrá desencadenarse en el futuro, lamentablemente el precio a pagar será muy alto".
Consultada sobre si aún es posible revertir el "impeachemnt", Rousseff manifestó ser muy optimista en su voluntad y que cree que esa lucha es fundamental para Brasil y América Latina.
Si bien afirmó que está en contacto con los senadores de Brasil para tratar de revertir el proceso de juicio político, se negó a decir con quiénes habló y quiénes la apoyan.