3 ene 2018
Manifestación en apoyo a la independencia. Barcelona, 11 de noviembre de 2017.
Albert Gea / Reuters
Manifestación en apoyo a la independencia. Barcelona, 11 de noviembre de 2017.
Albert Gea / Reuters
Luis de Guindos vincula esta cifra con la desaceleración del crecimiento económico en la región y con la "inquietud y desconfianza" que provocaron las decisiones del Gobierno catalán.
Luis de Guindos, ministro de Economía de España, estimó que el costo económico que tuvo el planteo independentista en la economía catalana durante el último trimestre del 2017 ronda los 1.000 millones de euros.
En una entrevista en la Cadena Ser, el político explicó que esta cifra está ligada a la desaceleración de cuatro o cinco décimas del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) catalán, que llega a los 200.000 millones de euros.
De Guindos calcula que la crisis política ya podría haber costado unos 1.000 millones de euros al crecimiento de España, a la que considera "castigada" por el proyecto independentista.
El ministro considera que esta desaceleración muestra la "enorme inquietud y desconfianza" que provocaron las decisiones previas del Gobierno catalán.
Así mismo, De Guindos manifestó su deseo de que la futura 'Generalitat' sea consciente de estos costos y que esta se centre en el día a día y atienda las necesidades básicas de la sociedad catalana, en lugar de seguir por una vía unilateral que, según considera, "no va a ningún sitio".
Luis de Guindos, ministro de Economía de España, estimó que el costo económico que tuvo el planteo independentista en la economía catalana durante el último trimestre del 2017 ronda los 1.000 millones de euros.
En una entrevista en la Cadena Ser, el político explicó que esta cifra está ligada a la desaceleración de cuatro o cinco décimas del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) catalán, que llega a los 200.000 millones de euros.
De Guindos calcula que la crisis política ya podría haber costado unos 1.000 millones de euros al crecimiento de España, a la que considera "castigada" por el proyecto independentista.
El ministro considera que esta desaceleración muestra la "enorme inquietud y desconfianza" que provocaron las decisiones previas del Gobierno catalán.
Así mismo, De Guindos manifestó su deseo de que la futura 'Generalitat' sea consciente de estos costos y que esta se centre en el día a día y atienda las necesidades básicas de la sociedad catalana, en lugar de seguir por una vía unilateral que, según considera, "no va a ningún sitio".