21 jun 2016

EFECTOS NEO EN ARGENTINA

 LA OCUPACION HOTELERA EN EL FIN DE SEMANA LARGO FUE DE ENTRE 40 Y 75 POR CIENTO

El turismo también muestra la crisis

El 20 de junio de 2013 se movilizaron más de 1,2 millón de personas. Este año fueron 610 mil, con un día más de descanso.
El gasto diario fue de 567 pesos, contra 310 de 2013, lo que revela una caída en términos reales.
Imagen: Leandro Teysseire

El movimiento turístico durante el fin de semana largo y las ventas asociadas a esos viajes fueron mayormente modestos, con niveles de ocupación hotelera entre el 40 y el 75 por ciento y una reducción en los días de estadía respecto a otros feriados. Así lo indicó el relevamiento habitual de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que identificó el traslado de 610 mil turistas por el país, con un gasto diario individual de 567 pesos en promedio y una facturación global de 1037,6 millones de pesos. Después de 70 días sin feriados, desde Semana Santa, el comportamiento turístico reflejó un estancamiento en los niveles de consumo que también se observa en las ventas de la mayoría de los sectores.

El año pasado no hubo feriado el 20 de junio, por lo cual no se puede comparar con el resultado de ese año. El anterior, en 2014, también había sido flojo, con 405 mil personas movilizadas. Este año tuvo a favor el agregado a último momento de un día más de descanso, lo que impulsó a numerosas familias a encarar un viaje sobre la hora, aunque a destinos principalmente cercanos, según explica el informe de CAME, elaborado con datos del Ministerio de Turismo y de cámaras, federaciones, uniones y centros regionales adheridos a la entidad.
Para tomar un parámetro de consumo más apropiado con la realidad de los últimos años hay que comparar con 2013. En aquella oportunidad, el feriado del 20 de junio registró el doble de turistas que este año, con 1.261.000. Sin embargo, también hay que considerar que en esta oportunidad el fin de semana largo coincidió con la celebración del Día del Padre, lo que pudo haber restado viajantes.
“En 40 de las principales ciudades turísticas del país, las ventas minoristas vinculadas al sector fueron muy bajas, porque incluso en aquellas localidades con más movimiento, la gente controló excesivamente sus gastos”, advierte el informe. “En líneas generales –continúa–, el fin de semana fue modesto, pero mucho mejor de lo que se esperaba una semana atrás, cuando había muy pocas reservas. Es que el agregado de un día más, sumado al lindo clima que predominó en la mayor parte del país, alentó a muchas familias a salir de viaje sobre la hora, aunque a destinos principalmente cercanos. De todos modos, la estadía promedio que en un feriado de 4 días suele rondar los 3,5-3,8 días, se ubicó en solo 3”.
Las compras del Día del Padre le restaron fuerza al turismo, porque es una fecha donde las familias hacen regalos importantes o se reúnen a comer en familia, y al mismo tiempo, el turismo le restó fuerza a los comercios para ese día especial. De hecho, las ventas por el Día del Padre cayeron 7,5 por ciento, con un ticket promedio que se ubicó en 480 pesos, un 23 por ciento por encima del año pasado, cuando la inflación anual supera al 42 por ciento, según otro informe de CAME. “Las ventas del Día del Padre siguieron con la baja que ya traían desde mayo”, completó Vicente Lourenzo, secretario de prensa de la Confederación.