El Estado Islámico se adjudicó el atentado en el metro de Londres que dejó 29 heridos15 de Septiembre de 2017
Ocurrió en la estación de Parsons Green, en el oeste de la capital británica. Fue en plena hora pico. Las autoridades investigan el hecho como un "ataque terrorista". El grupo terrorista Estado Islámico (EI) asumió la autoría del atentado perpetrado este viernes en el metro de Londres mediante una bomba de fabricación casera que dejó al menos 29 personas heridas.
En un escueto comunicado publicado en Telegram y cuya autenticidad no pudo ser verificada, su agencia afín, Amaq, aseguró que "una fuente dijo" a la agencia que "un artefacto" explotó en el metro de Londres, y que fue llevado a cabo por "un destacamento del Estado Islámico".
A diferencia de otros comunicados, Amaq no aseguró en este caso que sean "soldados" de su autoproclamado califato ni mencionó tampoco el número de víctimas que hubo en el ataque.
"Mis pensamientos están con los heridos en Parsons Green y con los servicios de emergencias que, una vez más, están respondiendo con rapidez y valentía a un supuesto incidente terrorista", dijo la primer ministro británica Theresa May en un comunicado.
El secretario de Relaciones Exteriores, Boris Johnson, pidió a la gente que "mantenga la calma" y seguir con su vida con normalidad.
Por su parte, el alcalde de la capital británica, Sadiq Khan, dijo que "Londres condena a los odiosos individuos que usan el terror para poner en peligro y destruir nuestro modo de vida".
"Como Londres demostró varias veces, nunca seremos intimidados o derrotados por el terrorismo", afirmó.
La deflagración de un artefacto de fabricación casera en un tren del metro de Londres se produjo sobre las 07.20 GMT en un vagón de un tren en la estación Parsons Green, al suroeste de Londres, en el tramo exterior de la línea District, cuando estaba repleta de pasajeros que acudían a su trabajo en el centro de la ciudad.
Según las fotos divulgadas por los medios, el artefacto estaba en un cubo blanco dentro de una bolsa de un supermercado y al parecer tenía un detonador pero no llegó a explotar en su totalidad, lo que ha hecho pensar a los expertos que el responsable tenía como objetivo provocar numerosas víctimas en hora pico de la mañana.
La explosión obligó a cerrar la estación de Parsons Green y los alrededores y a desalojar a los vecinos mientras las fuerzas del orden recogen pruebas forenses que permitan localizar al responsable de este nuevo atentado -el quinto- en el Reino Unido.
Los otros cuatro fueron: uno en marzo ante el Parlamento británico; otro en mayo en el estadio Manchester Arena, en el norte de Inglaterra, el de junio en el puente de Londres, y otro, también en junio, en una mezquita del norte de la capital.