Derecha, extrema derecha y xenófobos se imponen en elecciones en República Checa
PRAGA (Uypress) —
21.10.2017
La formación populista Alianza de Ciudadanos Descontentos, dirigida por el multimillonario y excomunista Andrej Babis, se convirtió en la primera fuerza política de República Checa, con casi 30% de lo0s votos. Andrej Babis es llamado el "Trump checo" por algunos y el "tsunami azul", por otros, por el vuelco hacia la derecha que ha producido en el electorado.Su partido de protesta "Alianza de Ciudadanos Descontentos", ANO por su siglas en checo -que quiere decir "sí", obtuvo entre el 29% y el 32% de los votos. De esta manera, el poderoso empresario, considerado el segundo hombre más rico de su país y ubicado entre los 750 más ricos del mundo, quedó en inmejorable posición para convertirse en primer ministro.
Aparentemente no lo tendrá muy difícil, ya que como segunda fuerza quedó el partido de centroderecha ODS, con casi 12% de los votos y en tercer lugar - con 11%- la xenófoba SPD, con una posición más marcadamente antieuropea que Babis, relacionada con la fascista Amanecer Dorado de Grecia. El líder de esta formación, Tomio Okamura, anunció tras conocer el resultado que "ahora vamos a eliminar todo signo de islamización en la República Checa", país en el que apenas hay inmigración.
El gran derrotado fue el Partido Socialdemócrata (CSSD), actualmente en el gobierno, que a pesar de los buenos resultados económicos se desbarrancó hasta solo un 7% de los votos, quedando por detrás del Partido Pirata (que algunos sondeos ubican en tercer lugar), con el 9,5% y el Partido Comunista, con el 9%.
El partido de Babis obtendría unos 78 legisladores, en un Parlamento de 200, por lo que deberá realizar acuerdos con otros grupos de entre los nueve del nuevo legislativo, el más diverso en la historia de la República.
Babis, cuyo nombre resonaba hacía meses como favorito, logró imponerse a pesar de las denuncias en su contra por manipulación de fondos comunitarios, fraude fiscal y presiones a la prensa. El político checo, que es comparado por su perfil y discurso con el presidente estadounidense Donald Trump, afirma que sus banderas son la lucha contra la corrupción, los inmigrantes, el euro y el resto de los partidos.
De origen eslovaco, nació en Bratislava en setiembre de 1954. En 2014 asumió como viceprimer ministro y ministro de Finanzas. Su padre, Stefan, fue un diplomático y ejecutivo de una empresa del antiguo régimen comunista checoslovaco para la exportación e importación de productos agrícolas. Estudió economía, de joven ingresó en una empresa de comercio exterior y en 1980 se afilió al Partido Comunista de la entonces Checoslovaquia. Luego de residir en el exterior retornó a su país después de la Revolución de Terciopelo y se radicó en República Checa cuando la disolución de Checoslovaquia. La caída del régimen comunista no solo no significó un problema para su trayectoria sino que se convirtió en una oportunidad que lo llevó a convertirse en multimillonario. En 2011 fundó su partido ANO, al que él califica de pragmático pero que está definidamente alineado a la derecha.
De acuerdo a información del Instituto de la Memoria de la Nación de Eslovaquia, babis fue -bajo el nombre clave de Bures- un informador de la Policía de Seguridad del Estado (STB) durante el régimen comunista.