22 abr 2024

LA POBREZA PLANIFICADA

ARGENTINA
Contradicciones de política económica
Un callejón sin salida para el gobierno de Javier Milei


Por Federico Kucher

21 de abril de 2024 

Javier Milei, presidente de Argentina. Imagen: NA

Las universidades públicas cortan la luz en espacios comunes para dar señales de la asfixia presupuestaria, al tiempo que se compran aviones de combate

Las contradicciones de la política económica y de las decisiones del gobierno resultan cada vez más impactantes. Una forma de verlo es con los anuncios del día a día que lastiman el sentido común. Por ejemplo, con los recursos asignados para la educación y para la guerra. Las universidades públicas cortan la luz de los claustros a la noche para dar señales de la enorme asfixia presupuestaria, al mismo tiempo que se deciden hacer compras millonarias en aviones de combate oxidados y sin una funcionalidad evidente para la sociedad.

¿La política económica no tiene plata para las cosas realmente importantes como la inversión en las universidades públicas, pero para un jet supersónico que no tiene razón de ser hay dólares de sobra? Es uno más de los callejones sin salida en los que insiste entrar el gobierno de Milei.

El discurso del equipo económico sobre la necesidad de hacer un ajuste descomunal a jubilados, trabajadores formales e informales y universitarios mientras se despilfarran fondos para la compra de armamento militar para congraciarse con Estados Unidos provoca problemas desde cualquier punto de vista. Usando algunas palabras del filósofo escocés David Hume, todos los argumentos para intentar justificar este discurso terminan siendo una montaña de oro. O puesto en otros términos, argumentos que no existen.

Las inconsistencias están por todos lados. Por ejemplo, la Argentina pretende acercarse a Estados Unidos con la compra de estos aviones de guerra porque apuesta a que es una de las llaves para empezar a recibir nuevo financiamiento (fondos frescos para las reservas). Sin embargo, la potencia de occidente se ríe del gobierno y no ofrece ningún respaldo contundente.


Una forma de verlo es que el equipo económico se reunió en los últimos días con las principales autoridades del Fondo Monetario. Los directivos del organismo volvieron a destacar algunos puntos sobre la macro local (como la moderación en la tasa de inflación mensual), pero las declaraciones no sirven de nada si no se materializan en la llegada de nuevas divisas. Todo indica que los acuerdos están lejos de concretarse.

Las reacciones del mercado muestran el escenario a la perfección. En los informes de las consultoras y agencias de bolsa circulan versiones que plantean que el FMI no tiene ninguna intención de liberar nuevos fondos frescos para el país. La semana pasada los inversores directamente descartaron que la Argentina pueda recibir 15 mil millones de dólares del FMI para unificar el tipo de cambio antes de mitad de este año.

Esto último genera tensiones en varios frentes para la política económica. El principal es que el gobierno sigue sin resolver el problema de las reservas internacionales, que durante los últimos meses vienen inflándose de manera artificial (a partir del freno de los pagos de importación y la acumulación de la deuda con importadores a través del Bopreal). Sin financiamiento la promesa de liberar los controles cambiarios se evapora y suma otra fuente de conflicto a una economía desgastada y el humor social que empieza a caldearse.