La primera anomalía histórica de esta votación fue que el candidato no tuvo apoyo unánime
Por Alfredo Serrano Mancilla
12 de septiembre de 2020
Imagen: EFE
El vaso siempre se puede ver medio lleno o medio vacío. La votación para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) tiene múltiples lecturas, y todas son necesarias para entender la complejidad del momento geopolítico que vive el mundo, y muy especialmente América Latina. Limitar el análisis a una única conclusión, “ganó Trump y perdió la región”, sería cometer un craso error por desconocer los infinitos matices que caracterizan el actual escenario en disputa.
12 de septiembre de 2020
Imagen: EFE
El vaso siempre se puede ver medio lleno o medio vacío. La votación para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) tiene múltiples lecturas, y todas son necesarias para entender la complejidad del momento geopolítico que vive el mundo, y muy especialmente América Latina. Limitar el análisis a una única conclusión, “ganó Trump y perdió la región”, sería cometer un craso error por desconocer los infinitos matices que caracterizan el actual escenario en disputa.