14 may 2016

SE VIENE EL AJUSTE

Guiño al mercado financiero
Quién es quién en el nuevo gabinete de Brasil



El gabinete del presidente interino de Brasil, Michel Temer, tendrá un fuerte mensaje al mercado financiero con Henrique Meirelles como ministro de Economía, elimina el Ministerio de Cultura, y por primera vez en décadas, no tendrá a ninguna mujer.



El jefe de gabinete será Eliseu Padilha, uno de los 'decanos' del Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña (PMDB), que fue ministro de Aviación Civil del gobierno de la presidenta suspendida Dilma Rousseff hasta pasarse a la oposición.

Temer anuló el Ministerio de Cultura y lo fundió con el de Educación, que estará a cargo del exgobernador de Pernambuco José Mendonça Filho, dirigente del conservador Demócratas, partido que batalló ante el Supremo Tribunal Federal (STF, Corte) para eliminar los cupos para afrodescendientes en las universidades públicas y privadas.

En Agricultura, asume el llamado "Rey de la Soja", Blairo Maggi, cuya familia es dueña de una multinacional de alimentos. Maggi era del Partido de la República pero el sábado se afilió al Partido Progresista para poder asumir en el reparto de cargos hecho por Temer. Fue gobernador de Mato Grosso, una de las potencias agrícolas del país.

Dos ministros que abandonaron a Dilma Rousseff hace un mes, Gilberto Kassab, que estará a cargo de Ciencia y Tecnología y Comunicaciones, y Henrique Alves, de Turismo asumirán con Temer.

El ministerio de Desarrollo Social, una marca de las gestiones de Lula da Silva y de Rousseff, será fusionado con el de Desarrollo Agrario y estará a cargo de Osmar Terra, del PMDB de Río Grande do Sul.

El Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) tendrá una fuerte presencia con el senador y excandidato presidencial José Serra como canciller y Bruno Araújo en el Ministerio de Ciudades. Araújo saltó a la fama por dar el último voto por el juicio político a Rousseff en la Cámara de Diputados.

El PSDB aportará el secretario de Seguridad del estado de San Pablo, Alexandre de Morais, como ministro de Justicia, en una alianza táctica de Temer con el presidenciable gobernador paulista Geraldo Alckmin.
Aliado de Rousseff hasta el último momento, el ministerio de Deportes irá para Leonardo Picciani, jefe del bloque de diputados del PMDB, quien deberá encargarse de ser la cara de los Juegos Olímpicos. Geddel Vieira Lima, citado en la Operación Lava Jato, será el ministro jefe de la Secretaría de Gobierno, el puesto de articulación política.

Romero Jucá será el ministro de Planificación y Gestión luego de haber sido el interlocutor ante el parlamento de los gobiernos de Lula, Rousseff y Fernando Henrique Cardoso, siempre por el PMDB.

En Medio Ambiente ganó un premio el patriarca del PMDB, el expresidente José Sarney, quien fue electo por un Congreso tutelado por la dictadura para encabezar la transición a la democracia desde 1985 hasta 1990.

El hijo del ex presidente, José Sarney Filho, será ministro de Medio Ambiente porque pertenece al Partido Verde. El ministro de Defensa iba a ser Newton Junior, pero como apareció en los Panamá Papers por abrir empresas offshore en Estados Unidos, fue cambiado por el excomunista Raúl Jungmann.

Un puesto clave será el nuevo ministerio de Fiscalización, Transparencia y Control que será conducido por Mauricio Quintella, aliado del investigado por corrupción y presidente del Senado, Renán Calheiros, del PMDB y número dos del país. Temer tendrá a su mano derecha en la Secretaría Especial de Inversiones, a cargo del mentor del programa de nuevas privatizaciones, Wellington Moreira Franco, exgobernador de Rio de Janeiro.

EL AJUSTE TAN TEMIDO


El interinato de Michel Temer como presidente de Brasil se sustentará en una batería de medidas económicas destinadas a reducir el gasto público y encarar "duras" reformas en las leyes laborales y en el ámbito provisional.

Las reformas estructurales serán ejecutadas mientras dure la suspensión de 180 días que el Parlamento le impuso a Dilma Rousseff, del centroizquierdista Partido de los Trabajadores (PT).

El ministro de Economía, Henrique Meirelles, pidió "realismo" para enfrentar las medidas "duras" que se pondrán en marcha y anunció que intentará reformar el sistema jubilatorio y la ley laboral, luego de la primera reunión de gabinete encabezada por Temer en el Palacio del Planalto.

"La sociedad está madura para medidas de ajuste importantes. Lo que no es posible es seguir como está la situación. El país espera un cambio en el itinerario de la economía", sostuvo Meirelles, considerado como un 'superministro' en el interinato.

El nuevo ministro quiere cambiar el sistema de pensiones y ya encontró resistencias en el sindicalismo aliado a Temer, representado por el diputado Paulo Pereira da Silva, de Fuerza Sindical, uno de los mayores impulsores del juicio político a Rousseff, que calificó de "inaceptables" a las medidas, lo cual abrió la primera grieta en el frente de gobierno.

Respaldado por un comunicado del banco español Santander para sus reformas y por gran parte del sector empresario, Meirelles se refirió especialmente al sistema previsional. "El derecho adquirido es cobrar la jubilación y para eso trabajaremos", dijo ante una pregunta. Y afirmó que será difícil en el futuro, sin reforma, pagar todos retiros fijados por la Constitución, al poner como ejemplo de la complejidad del sistema previsional a Italia o Grecia.

Meirelles y el ministro de Planificación, Romero Jucá, pusieron en duda que exista un déficit planificado por el gobierno suspendido de 98.000 millones de reales (unos 28.000 millones de dólares) y dieron a entender que el agujero en las cuentas públicas podría ser mayor.

El ministro de Economía, quien fue presidente del Banco Central durante el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y extitular global del Banco de Boston, dijo que revisará las cuentas de las grandes empresas estatales y allí se incluyen la gigante Petrobras, envuelta en una crisis por la caída del crudo y el escándalo de corrupción; Correios y los bancos públicos Banco do Brasil, Caixa Económica Federal y el de fomento BNDES.

En ese marco, anunció que la semana que viene se conocerá al nuevo presidente del Banco Central, al cual parte del gabinete de Temer impulsa declararlo independiente o con mayor autonomía.Meirelles no descartó la recreación de un impuesto a las transacciones financieras que le generó a Rousseff el enfrentamiento con la Federación de Industrias de Sao Paulo (Fiesp), aliada de Temer y radicalmente opuesta a la iniciativa. "Si hay aumento de tributos, será temporario", apuntó el ministro.