La Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA), que saltó a la palestra mundialmente en 2013 luego de que Edward Snowden revelara información sobre sus técnicas de espionaje, fue blanco de una filtración este miércoles. Unos misteriosos hackers autodenominados "Shadow brokers" filtraron en internet lo que parece ser un código computarizado secreto de la NSA.Varios expertos en seguridad dijeron a los medios estadounidenses que el código parece genuino, y Snowden dijo que "pruebas circunstanciales" apuntan a la participación de Rusia.
El miércoles, la agencia de espionaje aún no había respondido a varias solicitudes de comentarios.
Los piratas informáticos publicaron en internet el fin de semana dos grupos de archivos, uno que es de libre acceso y otro que está encriptado.
Los "Shadow Brokers" dijeron que revelarán la información del segundo grupo si consiguen 1 millón de bitcoins -moneda digital, en este caso el equivalente aproximado de 575 millones de dólares- a través de una subasta en línea.
Según The New York Times, gran parte del código fue creado para atravesar cortafuegos informáticos de potencias extranjeras como Rusia, China e Irán.
Este acceso permitiría a la NSA introducir programas maliciosos en los sistemas de los rivales y monitorizar -o incluso atacar- sus redes.
El que obtuvo el código tiene que haber entrado en los servidores de la NSA que almacenan los archivos, dijo el Times.
El excontratista de la NSA Snowden, que ha estado viviendo en Rusia desde que filtró documentos que revelaron el alcance de la vigilancia que hacía esa agencia de los datos privados, dijo que la filtración podría ser una advertencia a Estados Unidos después de que el comando de campaña de Hillary Clinton acusara a Moscú de piratear los correos electrónicos del Partido Demócrata.
Los hackers filtraron una parte de las "más poderosas herramientas de vigilancia" creadas por una "selecta división" de la NSA.
Shadow Brokers señaló que subastaran "los mejores archivos al mejor postor".
Según The Washington Post, un ex empleado de la NSA -cuya identidad quedó reservada- que trabajó en la unidad de Operaciones de Acceso Adaptado (TAO, por sus siglas en inglés), aseguró que esta filtración "podría socavar la seguridad de varios gobiernos e importantes corporaciones, tanto locales como extranjeras".
Un segundo trabajador citado por el matutino norteamericano que vio el archivo señaló: "Por lo que vi, no hay dudas de que es legítimo".
El archivo contiene 300 megabytes de información, incluyendo varios "exploits" (como se llama a ciertos fragmentos de software que aprovechan vulnerabilidades del sistema para conseguir algo) y un aserie de implantes que podrían modificar la información existente en los sistemas a hackear.
Muchos de los exploits fueron piezas de código informático que se aprovecharon de fallas previamente desconocidas o vulnerabilidades en firewalls, que hasta hoy no fueron arregladas, explicó uno de los antiguos hackers de la NSA.
La revelación del archivo implica que al menos otra parte -posiblemente una agencia de espionaje de otro país- ha tenido acceso a las mismas herramientas de hacking usadas por la NSA y podría implementarlas contra organizaciones que utilizan routers y firewalls vulnerables.
Hasta este miércoles, la NSA no emitió declaraciones al respecto.