A cuatro años del asesinato de Mariano Ferreyra por parte de una patota de la Unión Ferroviaria (UF), se realizaron ayer distintos actos para recordar al joven militante del Partido Obrero (PO)
. Por la mañana, la Legislatura porteña colocó una placa en su memoria durante un acto del que participó su hermano, el legislador Pablo Ferreyra, y por la tarde fue el PO el que realizó actividades culturales para homenajearlo.
El 20 de octubre de 2010, Mariano acompañó a un grupo de tercerizados para reclamar por la incorporación a planta permanente de la ex línea Roca. Fueron emboscados a los tiros por una patota que respondía al entonces secretario general de la UF, José Pedraza. Mariano fue atacado en la esquina de las calles Luján y Perdriel. En esa intersección, ayer la Legislatura de la Ciudad colocó una placa que lo recuerda como “militante del Partido Obrero, asesinado por luchas contra la tercerización y por la dignidad de los trabajadores y las trabajadoras”. Al frente del acto estuvo su hermano. “Este homenaje tiene que aportar a la interpelación de la memoria y al mismo tiempo, debe servir para balancear las deudas pendientes y las conquistas conseguidas en estos años”, expresó el legislador Alternativa Popular.
También destacó como un avance “la justicia rápida y firme” en el juicio oral por el que fueron condenados Pedraza, Juan Carlos Fernández, Cristian Favale y Gabriel Sánchez como responsables por el asesinato de su hermano.
Finalmente, describió a su hermano como “un militante que luchó por los derechos de los trabajadores contra un dispositivo que afecta los derechos laborales, como es la tercerización”, y aseguró que el reconocimiento es “un logro de todas las organizaciones, de la movilización popular y de los familiares”.
En el acto estuvieron presentes los diputados nacionales Andrés Larroque y Leonardo Grosso, Nora Cortiña, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y el periodista Horacio Verbitsky, del CELS, así como varios legisladores porteños.
El Partido Obrero realizó un homenaje en el barrio de Barracas con diversas actividades culturales. El cierre estuvo a cargo de Jorge Altamira, quien señaló que “el asesinato de Mariano Ferreyra fue un crimen político contra la clase obrera”, y cuestionó que a cuatro años del hecho “el kirchnerismo sigue gobernando con la burocracia sindical y sus patotas”. Por último, Altamira sostuvo que “la tercerización del trabajo se ha intensificado”, y concluyó: “El verdadero homenaje a Mariano Ferreyra es continuar la lucha por los objetivos que él peleó en vida.”
El Partido Obrero realizó un homenaje en el barrio de Barracas con diversas actividades culturales. El cierre estuvo a cargo de Jorge Altamira, quien señaló que “el asesinato de Mariano Ferreyra fue un crimen político contra la clase obrera”, y cuestionó que a cuatro años del hecho “el kirchnerismo sigue gobernando con la burocracia sindical y sus patotas”. Por último, Altamira sostuvo que “la tercerización del trabajo se ha intensificado”, y concluyó: “El verdadero homenaje a Mariano Ferreyra es continuar la lucha por los objetivos que él peleó en vida.”
Un poco más temprano, la municipalidad de Avellaneda cambió oficialmente de nombre a la Avenida Coronel Bosch por el de Mariano Ferreyra. Tras la inauguración de un mural, se realizó un festival solidario del que participaron artistas como Palo Pandolfo, Onda Vaga, Acorazado Potemkin, Cuino Scornik y La Joven Guarrior, entre otros.