24 nov 2015

AJUSTE Y ALINEACION

Argentina: presidente electo Mauricio Macri impulsará acercamiento con la Alianza del Pacífico e insiste con pedir la suspensión de Venezuela del Mercosur



Mauricio Macri puso en marcha la relojería política que empezó este domingo, cuando se impuso sobre Daniel Scioli en el primer balotaje presidencial de la historia. La próxima escala institucional está prevista para el 10 de diciembre, el día que recibirá la banda presidencial de manos de la mandataria saliente Cristina Fernández. Para ese momento restan 17 días corridos: el lapso de una breve transición que el presidente electo decidió iniciar ayer con una conferencia de prensa en la Usina del Arte, un centro cultural ubicado en barrio porteño de La Boca.

Aunque la ronda de preguntas era abierta, la mayor cantidad de interrogantes planteados por periodistas locales y extranjeros giró principalmente en torno al futuro de la economía y el posicionamiento internacional que tendrá la próxima administración. Ante ese menú, el sucesor de Cristina anticipó que Brasil será el destino de su primer viaje presidencial, y que buscará sumar al país a la Alianza para el Pacífico, promovida por Estados Unidos (ver página 6).

Tampoco se privó de hablar de Venezuela, y ratificó que pedirá la aplicación de la clásula democrática del Mercosur para suspender a ese país como socio del Mercado Común del Sur, una propuesta que no tiene garantías de prosperar, pero que Macri detalló en dos oportunidades. “Le corresponde por la persecución que hace contra sus opositores y contra la libertad de expresión”, acusó el futuro jefe del Ejecutivo Nacional con un tono similar al que usó para anticipar que pedirá al Parlamento la anulación del Memorándum de Entendimiento firmado con Irán para la investigación judicial del atentado contra la mutual judía AMIA.

Para contestar cada pregunta Macri puso en escena a los protagonistas de la nueva mesa chica que rodeará al flamante mandatario: su futuro jefe de Gabinete, Marcos Peña; a la gobernadora bonaerense electa, María Eugenia Vidal; y a su par porteño, el alcalde electo Horacio Rodríguez Larreta. La gran ausente fue la flamante vicepresidenta Gabriela Michetti, por sus recientes poblemas de salud. No fue la única ausencia que tuvo que dispensar, también anunció que la UCR no tendrá en sus manos el Ministerio de Justicia (ver página 10).

Seis para gobernar

Desde las 9:12 y por el transcurso de casi una hora, Macri respondió las preguntas, pero con el constante auxilio de Peña que tomó la posta ante varias intervenciones y en otras contestó directamente antes que de su jefe.

Quizás por la ausencia de precisiones previas al desenlace de las elecciones del domingo, la mayor cantidad de incógnitas estuvieron centradas en la política económica del futuro inmediato. Pidió paciencia para sincerar los planes económicos, pero aclaró: “Esta semana vamos a trabajar activamente para definir lo antes posible el Gabinete económico, porque yo no voy a designar un ministro de Economía, sino uno de Hacienda y Finanzas, y va a haber seis ministros que serán los integrantes del Gabinete económico”, anticipó el alcalde porteño poco antes de detallar que estará integrado por los titulares de las carteras de “Trabajo, Hacienda, Energía, Producción, Transporte y Agricultura, Ganadería y Pesca”.

La mención reveló la creación de ministerios que actualmente no existen, como Energía, Producción y Transporte, un cambio que necesitará el envío de una nueva Ley de Ministerios al Congreso Nacional.

Cepo con final, pero sin fecha
Ese sexteto de ministros, según explicó Macri, llevará adelante y anunciará las primeras medidas económicas. Sin ofrecer detalles, el líder del PRO confirmó la realización de las medidas que había prometido en su campaña proselitista. Si bien no confirmó si levantará el cepo al dólar en el primer día de su gobierno, contestó que “el gran problema que tiene la Argentina es que hace cuatro años que no crece, que no se genera empleo, y para eso hay que poner el país en marcha, hay que corregir las cosas que se estan haciendo mal y el cepo es un error.”

Frente a las consultas sobre su estrategia para negociar con los fondos buitre y la posibilidad de tomar deuda en el exterior, Macri volvió a eludir las precisiones: “Todavía no hemos ni asumido, es un día para plantear líneas generales: cuando la Argentina se ordene y genere las condiciones para volver a crecer, habrá un único tipo de cambio donde el Banco Central va a intervenir para que esté ordenado en franjas.”

Retenciones y agro

El abanico de consultas se extendió sobre la política agropecuaria. “La gente del campo está muy esperanzada sobre la quita de retenciones al trigo. ¿Será desde el día uno?, ¿podría considerar una ventana de venta de soja sin retención alguna por 90 días para que vendan lo que tienen los silo bolsas?”, le inquirió la agencia internacional Bloomberg.

El flamante presidente electo confirmó el fin de las retenciones para el trigo desde el 11 de diciembre, pero se mostró impreciso sobre la soja, aunque no descartó la hipótesis de “la ventana”.

“Sostenemos las propuestas para el campo: va a funcionar desde el primer día, los que puedan que se pongan a sembrar porque eso genera trabajo”, contestó, pero no confirmó un plan devaluatorio abrupto ni una inmediata derogación de los permisos de exportación para los productores de soja, dos planteos que aparecen en la plataforma de Cambiemos y que el agro le pidió cumplir en forma literal.
Energía e YPF

En sus primeras apreciaciones también detalló que el “management” de la empresa petrolera nacional YPF, conducida por Miguel Galuccio, “será evaluado desde una concepción profesional, habrá que evaluar con el ministro de Energía y ahí tomaremos la decisión”, sostuvo sin decir que, en rigor, desea que el actual titular de YPF siga en el cargo, bajo la coordinación del ex Shell José Aranguren, que tendrá en sus manos la flamante cartera de Energía, producto de un posible desdoblamiento de la cartera de Planificación Federal, un ministerio que, al parecer, no existe en la grilla del PRO. Por fuera del tablero de cargos habría un problema: la relación entre el futuro ministro y el actual titular de la petrolera no es la mejor.

Ganancias

Otro de los puntos con directo impacto en la economía, y protagonista del balotaje, es el Impuesto a las Ganancias. “Lo que dijimos en la campaña: vamos a ajustar el mínimo no imponible para devolverle la justicia a ese impuesto que de la mano de la inflación se transformó en una estafa para una enorme cantidad de trabajadores que sin mejorar sus haberes se encontraron pagando impuestos”, amplió.

Seguridad

En la línea de ratificar algunos puntos de su campaña, Macri prometió que declarará la “emergencia de seguridad” en todo el país, pero no dijo quién será el jefe del ministerio en la materia. Una alta fuente de diálogo cotidiano con el presidente electo confió a este diario que el tema central será la transferencia de la Superintendencia de Seguridad Metropolitana al área del gobierno porteño, un tema eludido.

Debilidad de origen

El tránsito por los temas económicos estuvo más signado por los pedidos de paciencia que por las precisiones, una ruta discursiva que sumó obstáculos, cuando una periodista española consultó sobre la exigua diferencia de la victoria. “Son menos de tres puntos en un balotaje: quería saber qué ha pasado ahí, porque no se cumplieron las expectativas. Los resultados muestran a un país claramente dividido: la mitad está con ustedes y la otra no”, espetó la corresponsal. Fue uno de los momentos de Peña, que le quitó el micrófono a su jefe y atajó con velocidad: “El balotaje se gana por un voto, siempre es muy parejo, pero por fuera de las interpretaciones sobre la legitimidad del voto, casi 13 millones de argentinos definieron que Macri sea presidente. La distancia no afecta en nada la discusión a futuro y eso no refleja un país partido en dos”, espetó el futuro jefe de Gabinete, poco después que su jefe admitiera que “buscará diálogos con el peronismo” en el Congreso, un terreno donde el futuro gobierno deberá afrontar la debilidad que Peña intentó relativizar.

Tres cargos estratégicos en debate

Mauricio Macri aprovechó su primera conferencia de prensa tras el balotaje para pronunciarse sobre la continuidad de Miguel Galuccio, titular de YPF; Alejandra Gils Carbó, procuradora general de la Nación; y Alejandro Vanoli, presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA).

El futuro de Galuccio al frente de la petrolera recuperada de manos de la española Repsol estará bajo análisis, según las palabras del líder del frente Cambiemos. Macri afirmó que “el management de YPF será evaluado” y diferenció que “el caso de Galuccio no es el mismo que el de otros (nombramientos) que ha llevado a cabo este gobierno” en referencia a la administración de Cristina Fernández.

A Galuccio, agregó el futuro titular del Ejecutivo, “habrá que evaluarlo con el ministro de Energía” de su gobierno. Galuccio no estaba a priori en la mira de Macri y su equipo de colaboradores, quienes, en sintonía con la opinión de buena parte del empresariado, reconocen en líneas generales la gestión del presidente de la petrolera.

Diferente es el concepto que el nuevo gobierno tiene de la procuradora Gils Carbó y del titular del BCRA, a quienes ya en la campaña exhortó a dejar sus puestos a partir del 10 de diciembre. Ayer en la conferencia de prensa, Macri insistió con el pedido de alejamiento para los dos funcionarios. Macri le pidió a Vanoli un “gesto” de renuncia. “Necesitamos que le facilite el camino al nuevo gobierno”, dijo Macri en relación a Vanoli.

Macri apeló a la “dignidad y generosidad”, tanto de Vanoli como de Gils Carbó. Más tarde, la diputada Elisa Carrió, socia de Macri, aseguró que su candidato para remplazar a la procuradora era José María Campagnoli.

Los nombres para una nueva etapa

“Ayer (por el domingo) a la noche se terminó la veda y podemos a empezar a hablar de cargos”, explicaba un joven funcionario PRO cuando la euforia se había apoderado del búnker de Cambiemos. “Los más experimentados se van a ir con Mauricio a Nación”, le dijo a Tiempo un vocero del PRO. Entre los nombres ya confirmados para acompañar a Macri –y que podrían comenzar a anunciarse a partir de mañana– se cuentan a Guillermo Dietrich en Transporte y Esteban Bullrich en Educación. El actual ministro de Desarrollo Económico, Francisco Cabrera, tendrá seguramente un lugar en el nuevo diagrama del Ministerio de Economía que diseñó Macri, al igual que el titular del Banco Ciudad, Rogelio Frigerio. La cabeza de Justicia y Seguridad, Guillermo Montenegro, también sería parte del Gabinete. Carolina Stanley pasará a ocupar la cartera de Desarrollo Social, mismo cargo que ostenta en la Ciudad. Según pudo saber este diario, la ex legisladora trabajará mano a mano con la gobernadora bonaerense, tal como sucede hasta ahora. “Hay interna con la AFI”, deslizó un asesor amarillo antes de asegurar que los actuales candidatos para el organismo de inteligencia son Miguel Ángel Toma, quien ocupó ese cargo durante el interinato de Eduardo Duhalde. Ramón Puerta, amigo personal de Macri, también suena para ser jefe de los espías. “Tiene que ser alguien con experiencia, el año que viene hay paritarias y va a haber conflictividad social, no podemos tener a alguien que aprenda sobre la marcha”, especuló el asesor. En el distrito capitalino hay más dudas que certezas. Franco Moccia, actual subsecretario de Planeamiento y Control de Gestión, pasará a ocupar el lugar del calvo ministro. En el Ministerio de Hacienda también habrá cambios. Con la partida de Néstor Grindetti a Lanús, Martín Mura que es subsecretario de Gestión y Administración económica tomará su lugar “si la idea es conservar el rumbo económico”. En Educación, Alejandro Finocchiaro, que fue asesor durante la gestión de Mariano Narodowski es el principal candidato. Los nombres comenzarán a definirse a partir del miércoles y son parte de una especie de juego de la silla invertido: el PRO tiene más lugares para cubrir, que dirigentes para llenarlos.

Los empresarios reclaman “definiciones concretas”

Tras la primera conferencia de prensa de Mauricio Macri como presidente electo, los empresarios del sector productivo reconocieron ayer que esperan “definiciones concretas” de la política económica del próximo gobierno nacional.

Macri se limitó a informar que su gabinete económico estará dividido en seis dependencias pero evitó definiciones sobre el futuro de la política cambiaria. A la par, garantizó la eliminación de las retenciones al maíz y al trigo pero no dijo nada sobre las que se cobran a las ventas de soja al exterior.

Esa última omisión le valió el inmediato reproche del titular de la Sociedad Rural (SRA), Luis Miguel Etchevehere, quien le recordó a Macri su promesa de “eliminar todas las retenciones”.

En diálogo con Tiempo, el vice de la Unión Industrial (UIA), Daniel Funes de Rioja, aseguró que “más allá de las formas del gabinete que vendrá, estamos esperando definiciones económicas”. El titular de la Coordinadora de la Industria de Alimentos (Copal) recordó que su sector “ya llevó a todos los candidatos la agenda con sus necesidades y urgencias en materias como costos logísticos, laborales y fiscales especialmente en las economías regionales”, por lo que redobló sus expectativas de novedades puntuales. Sobre el tema cambiario “hay que esperar”, remarcó.

Por su parte, el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA), Alberto Rodríguez, señaló que los anuncios del futuro presidente sobre maíz y trigo “no son nada nuevo”. El empresario se limitó a decir que la primera conferencia de Macri le pareció “bien”, pero remarcó que “hasta que no veamos los detalles de la política no vamos a decir nada; vamos a esperar a ver cómo se desenvuelve” el futuro mandatario, añadió. Finalmente, el aceitero le bajó el tono a la cuestión cambiaria cuando afirmó que “no pasan por ahí las urgencias” de su sector.

José Urtubey, vice de la UIA, advirtió que “quitar el cepo cambiario de un día para el otro no es lo más conveniente” porque “todavía hay un nivel de inflación elevado en la Argentina”.

El mercado respondió a la estrecha ventaja con fuertes ventas

La Bolsa porteña cayó ayer un 5,1% al día siguiente del balotaje que consagró a Mauricio Macri como futuro presidente de la Nación por una estrecha ventaja sobre el oficialista Daniel Scioli. La diferencia, mucho menor a la que vaticinaban las encuestas el viernes pasado, repercutió ayer en una masiva venta de acciones, explicaron fuentes del sector.

El Merval exhibió una larga lista de acciones a la baja, entre las que se destacó la caída de Pampa Energía (-13,64%); BBVA Francés (-8,65%); Grupo Galicia (-7,67%); y Sociedad Comercial Del Plata (-6,23%). En Wall Street también cayeron los ADR de empresas argentinas.

Los bonos también cayeron excepto el Cupón PBI U$S Ley NY, que subió un 1,92%, a un valor de 159 dólares. A contramano, el Bonar X se retrajo un 2,12%, a $ 1428; el Bonar 2024 cayó un 0,93%, a $ 1488; el Discount U$S Ley Argentina bajó un 1,31%, a 2110 dólares; el Par U$S Ley N.Y. se retrotrajo un 1,08%, a 920 dólares; y el discount U$S Ley N.Y. perdió un 1,06 por ciento. En una jornada en la que el Banco Central vendió U$S 90 millones, el dólar oficial subió un 0,10% para finalizar a 9,635 pesos para la compra y 9,685 para la venta. En tanto, la cotización del ilegal saltó un 0,8% y cerró a $15,190 para la venta. Finalmente, el contado con liquidación cayó un 1,75%, a un valor de referencia de $ 15,60. En los mercados mundiales, la soja subió un 0,79%, a U$S 317,56 por tonelada, su valor más bajo en seis años ; el maíz subió un 0,10%, a U$S 144,580 por tonelada; y el trigo subió un 1,33%, a U$S 181,890 la tonelada. En tanto, el petróleo subió un 3,37%, a U$S 41,750 por barril de WTI.

Tiempo Argentino