28 nov 2015

PERDER TODO LO GANADO

Argentina vs Buitres: Macri volverá a negociar, pero en 2016

SE ESPERARÁ A TENER RESERVAS MÁS SÓLIDAS.
ACREEDORES DIERON AYER ANTE GRIESA UN GUIÑO AL PRÓXIMO GOBIERNO.

Por: Carlos Burgueño


El escrito del grupo “Brecher”, donde opina que el próximo Gobierno tiene voluntad de retomar las negociaciones con acreedores.
Alfonso Prat Gay asumirá las política oficial contra con los fondos buitre en el próximo Gobierno de Mauricio Macri. Avalará, en general, lo actuado por Thomas Griesa, pero no abrirá las discusiones formales hasta bien entrado 2016. Sólo cuando el próximo ministro de Hacienda considere que las reservas se encuentran en un nivel suficiente como para no enfrentar a los "holdouts" en posición de debilidad, aceptará sentarse a negociar de manera formal y oficial. Antes el próximo Gobierno concurrirá a las audiencias que organice el juez de Nueva York, le confirmará al magistrado la intención de regularizar la situación; pero aclarará que habrá que esperar una posición más firme de las finanzas argentinas para poder oficializar los encuentros oficiales. Prat Gay estudiará además pedir un "Stay" al juez para el momento de abrir la negociación, para así poder abrir la alternativa de endeudamiento voluntario internacional a menor tasa de interés. Por otro lado, se analizará la situación del estudio Cleary Gottlieb Steen & Hamilton (CGS&H) que representa a la Argentina, y su eventual continuidad como el bufete que defiende al país en la que, se supone, será la etapa final del "juicio del siglo". 

El próximo ministro y Carmine Bocuzzi y Jonathan Blackman son viejos conocidos. En los tiempos en que el designado titular del Palacio de Hacienda trabajaba como presidente del Banco Central, tomó contacto varias veces con la gente de CGS&H, en los albores de la batalla contra los buitres. El dato es que no siempre el funcionario y los abogados estuvieron de acuerdo, al punto en que en al menos dos oportunidades el argentino recomendó el cambio de estudio. Finalmente hubo fumata, y Prat Gay colaboró con Cleary en los inicios del juicio de Nueva York. Eran tiempos en los que además el próximo ministro tampoco coincidía en la forma en que Roberto Lavagna emitía la deuda para salir del default; ya que consideraba que la cláusula Rights Upon Future Offers (RUFO) era una trampa futura ante una eventual embestida de Elliott, Dart, Aurelius y compañía. 

Mientras tanto, los acreedores dieron ayer un guiño a la elección de Mauricio Macri como futuro presidente de la Nación. En una carta entregada a Griesa, Henry Brecher, representante de una serie de bonistas independientes que se sumaron al juicio habiendo rechazado la oferta de reestructuración de deuda planteada en 2005 por Argentina. Estos acreedores habían tenido en septiembre pasado un fallo en contra de parte de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos, que había revertido una decisión de Griesa a pedido del Gobierno argentino. Los jueces de segunda instancia habían rechazado la interpretación de "clase amplia" que había validado originalmente Griesa. La Cámara de Apelaciones le había indicado al juez que convoque a una nueva audiencia para intentar determinar de manera razonable y precisa la cifra que debería pagar 

Argentina a ese universo de litigantes que no participaron del canje; o que determine cada sentencia monetaria en forma individual. Como el grupo "Brecher" consideró que necesitaba más tiempo para unir las pruebas en contra de la Argentina, pidió por escrito ayer a Griesa que extienda el plazo para la nueva audiencia para 2016. Sin embargo, en la presentación al juez de Nueva York, aclaran en el último párrafo que a partir de los resultados de las elecciones del 25 de noviembre pasado se debe tener en cuenta que "hay una luz" para una posible reapartura de las negociaciones una vez que Mauricio Macri asuma la jefatura de Estado. "A diferencia de su antecesor (Cristina de Kirchner), el sr. Macri expresó su interés en intentar un acuerdo con la Argentina en la disputa por los bonos".