Preocupa al gobierno futuro de la cárcel privada y otras inversiones
Se profundizó la caída de la multinacional encargada de obras públicas en Uruguay por más de 700 millones de dólares. Sindicato de la construcción analizará el tema.
“Este es, para nosotros, el principio de la caída del capitalismo real”
, dijo con una mezcla de ironía y de catarsis, y con gran preocupación, una alta fuente oficial consultada por
Sudestada
sobre la estrepitosa caída de la empresa multinacional Abengoa-Teyma, encargada de millonarias concesiones de obra pública en Uruguay por más de 700 millones de dólares. Entre los principales contratos que todavía están pendientes de ejecución se encuentran el polémico proyecto del Antel Arena o el Centro de Convenciones de Punta del Este, entre otras.
El comentario irónico responde a una gran frustración en el elenco de gobierno que encabeza el presidente Tabaré Vázquez. Y es que sorprendió el anuncio que la multinacional que ingresó hoy, jueves, en
el mayor preconcurso de acreedores de la historia de España
, en un juzgado de Sevilla.
Las autoridades del consorcio Abengoa (Abengoa-Teyma en Uruguay) presentaron el preconcurso oficial de acreedores en un juzgado de Sevilla y llamaron a las entidades financieras acreedoras a comenzar a negociar los términos de un acuerdo que pueda evitar la suspensión definitiva de pagos. Se trata apenas de paso formal luego que la empresa anunciara el miércoles 25 que iniciaba los pasos para emprender el camino a su quiebra.
Por si fuera poco, esta multinacional -que maneja casi 90% de su negocio fuera de España- está sufriendo un duro desplome en la cotización de bolsa, sin contar que el conglomerado tiene un pasivo que supera los 27 mil millones de euros y una deuda financiera de 9 mil millones, una situación que ya comenzó a afectar a empleados, proveedores y acreedores.
La debacle de las acciones de Abengoa en la bolsa madrileña motivó al Comité Asesor Técnico (CAT) del Ibex, tras una reunión extraordinaria, a disponer la
expulsión de la compañía
“con efectos del día 27 de noviembre”, después de un segundo día consecutivo de caída en el valor de los títulos.
La estrepitosa caída en la bolsa española del conglomerado de origen andaluz sigue en aumento y la empresa tiene un plazo de tres meses para acordar un plan de pago de las de las obligaciones, que llega a unos 330 millones de euros.
En 2016 esta cifra se triplicará hasta alcanzar los mil millones de euros. Varios analistas consultados por el diario La Vanguardia indicaron que al tratarse de una empresa de gran porte existe posibilidad de obtener un financiamiento salvador, como el Instituto de Crédito Oficial (ICO), un organismo estatal. Pero el ministro de Industria español, José Manuel Soria, descartó esta idea por ahora.
En tanto, buena parte de la banca española está expuesta a la fractura de esta multinacional y le reclama deudas por cientos de milones de euros. Entre los bancos acreedores se encuentra el Santander (1.558 millones de euros), CaixaBank (570 millones), Banco Sabadell (387 millones), Banco Popular (334 millones), Bankinter ( 210 millones), Unicaja (55 millones), Kutxa (50 millones), BBVA (4 millones) y Bankia (570 millones), según el diario
La Vanguardia
.
Además, entre los acreedores se encuentra la estadounidense Federal Financing Bank, con 2.225 millones de euros, que financió el negocio de Abengoa en California. También está el brasileño Banco Nacional de Desenvolvimiento (755 millones), el suizo HSBC (660 millones) y el francés Crédit Agricole (457 millones), entre otros.