El incidente activó el sistema de seguridad del Comando Tripartito.
25 de Abril de 2017
Robo. Así quedó el camión asaltado luego de la persecución. Los delincuentes estaban fuertemente armados.
Un cinematográfico golpe comando en la sede de la empresa Prosegur en Ciudad del Este, durante la madrugada de ayer, movilizó hasta a tropas del Ejército por una orden directa del presidente de Paraguay, Horacio Cartes y la Policía se encuentra acuartelada. El botín asciende a los 40 millones de dólares, aunque se cree que puede ser mayor. Los delincuentes utilizaron armas de guerra con municiones antiaéreas, granadas y explosivos C-4.
El feroz golpe también activó el sistema de seguridad del denominado Comando Tripartito, integrado por los representantes de las fuerzas de seguridad de la Argentina, Brasil y Paraguay, desplegadas en la Triple Frontera. "Por un lado, se puso en conocimiento lo que había sucedido y hubo un intercambio de información para detener a los sospechosos", informó un uniformado de alto rango destinado en la turística ciudad de Puerto Iguazú.
En principio, fuentes de inteligencia que trabajan en la región apuntaron contra los miembros del Primer Comando Capital (PCC), una temible organización criminal brasileña que se dedica al narcotráfico, secuestro y asalto de blindados, y que desde 2015 se encuentra operando en la región. Se cree que los delincuentes que participaron fueron más de veinte y atacaron diferentes puntos de la ciudad, ya que entre la cero hora y las seis de la mañana se cometieron diferentes asaltos, incendios de vehículos y hubo 875 llamados de auxilio al 911.
Ayer, pero después del mediodía, en la localidad brasileña de São Miguel do Iguaçu, a unos 15 kilómetros de Ciudad del Este, efectivos de la Policía Militar se enfrentaron a los tiros contra un grupo de delincuentes que portaban armas de guerra y chalecos antibalas. Hubo varias versiones sobre el número de uniformados heridos, pero oficialmente se informó que cuatro integrantes de la banda fueron detenidos, tres murieron y un número no determinado logró escapar. Desde el Ministerio del Interior de Paraguay afirmaron que se trató de la misma gavilla que realizó el golpe en Prosegur, aunque las autoridades brasileñas sólo se limitaron a decir que el hecho está siendo investigado. Los tres bancos de la ciudad brasileña Pilar do Sul fueron asaltados por una banda de ladrones que detonó los cajeros automáticos y huyó con el dinero, 24 horas antes del golpe a la empresa Prosegur; no fue casualidad.
El ataque paralizó el tránsito fronterizo con la localidad de Foz do Iguaçu. Fueron más de 45 minutos de combate entre los efectivos de seguridad de la empresa y fuerzas policiales contra una veintena de delincuentes fuertemente armados y protegidos con chalecos antibalas que llegaron al lugar en camionetas cuatro por cuatro. La sede de la empresa Prosegur quedó literalmente destruida. No sólo se utilizaron armas de guerra con munición antiaérea; también granadas y explosivos C-4.
Un agente del Grupo Especial de Operaciones (GEO) perdió la vida durante la fallida persecución que no duró no más de 15 minutos. Fuentes oficiales de la cartera del Interior de ese país informaron que entre los heridos hubo cuatro civiles y cinco policías.
Uno de los vehículos abandonados por los delincuentes sería de un ciudadano argentino. Fuentes del Comando Tripartito apuntaron que podría haber dos argentinos involucrados en el hecho, pero aún no hay información confirmada "porque todo fue muy reciente y se está investigando", explicaron.
Un parte de inteligencia de las fuerzas de seguridad argentinas indica que "fueron utilizadas camionetas blindadas y se detallan las marcas, el color y el número de patentes".
