25 dic 2016

EL PRIMO, SOCIO VIP

ARGENTINA

La gigante constructora brasileña, Odebrecht, volvió a ser noticia en estos días al admitir que pagó coimas millonarias en nuestro país para obtener contratos de obra pública. 

Por MARTÍN SOSA | 24 de diciembre de 2016
Nuestras voces


También se supo que uno de los principales socios de Odebrecht en Argentina es Ángelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri. La firma brasileña y Calcaterra integran una Unidad Transitoria de Empresas (UTE) en la obra por el soterramiento del ferrocarril Sarmiento. Además, ambas trabajarán en la construcción de los gasoductos troncales en la provincia de Córdoba.
Odebrecht, la gigantesca empresa constructora brasileña que está en el foco de la tormenta a raíz del caso “Lava Jato”, acordó pagar una multa de entre “USD 2.600 y 4.500 millones de dólares” a los gobiernos de Brasil, Suiza y Estados Unidos según informó el Wall Street Journal(WSJ). El objetivo de los acuerdos no es otro que dar por cerradas las investigaciones que desde hace más de dos años congelaron la actividad de la firma en busca de rastros de actos de soborno y lavado de dinero por parte de la mayor empresa constructora de latinoamérica a funcionarios de cuatro continentes. Así, la situación se asemeja a lo hecho por la firma alemana Siemens que en diciembre de 2008 aceptó pagar una multa de 800 millones de dólares para zanjar las investigaciones por coimas millonarias que estaban perjudicando su nombre en todo el mundo.

Según las investigaciones en marcha, a nivel global, Odebrecht habría pagado cerca de 790 millones de dólares en sobornos a funcionarios de distintas latitudes para obtener beneficios en adjudicaciones de obras con el sector público. Se estima que cerca de 350 millones de dólares se destinaron a funcionarios brasileños y los restantes 440 millones a funcionarios de países extranjeros. De acuerdo al informe de una corte de Estados Unidos, los sobornos en la Argentina habrían rondado los 35 millones de dólares pero la empresa obtuvo beneficios cercanos a los 278 millones.

Los medios locales enfocaron sus cañones en el ex ministro de Planificación Federal, Julio de Vido y el ex Secretario de Transportes -hoy preso- Ricardo Jaime. Julio de Vido desmintió la acusación pero la noticia de que uno de los principales socios de Odebrecht en nuestro país no es otro que Angelo Calcaterra pasó desapercibida. El primo del Presidente integra una importante unidad transitoria de empresas (UTE) con la firma brasileña en la obra por el soterramiento del ferrocarril Sarmiento. A su vez, también comparte con Odebrecht la construcción de los gasoductos troncales en la provincia de Córdoba.Tal como señalamos hace dos meses en Nuestras Voces, en ambos casos Calcaterra fue beneficiado por su primo el Presidente.

Según difundieron medios locales, y tal como aparece registrado en el libro de audiencias de la Casa Rosada, el 8 de septiembre de este año,el jefe de Gabinete, Marcos Peña, recibió una delegación de empresarios brasileños para “analizar oportunidades de negocios en la Argentina”. Entre los invitados estaba Alexandre Mendonca, CEO de Odebrecht para América Latina.
El autocontrato

En el caso del Sarmiento, “las empresas se comprometieron en la oferta a financiarse con crédito externo, pero ese dinero nunca apareció”. De la mano de Odebrecht debía llegar financiamiento desde el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil por 1500 millones y a tasa del 4 por ciento anual, pero el acuerdo nunca se concretó y con el estallido de la burbuja financiera y el consecuente salto de las tasas de interés, la obra se paralizó. Algunos años más tarde, cuando parecía un momento propicio para reactivarse,Odebrecht pasó al centro de escena al ser investigada por escándalos de corrupción por lo que la obra volvió a quedar estancada.

Así fue hasta que a mediados de junio de este año, el Presidente Macri firmó el decreto 797/2016 por el que el gobierno se comprometió a realizar el mayor desembolso hasta el momento en obra pública:45.000 millones de pesos. Estos –casi- 3.000 millones de dólares, significan un 25 por ciento más de lo estipulado por los estudios técnicos que señalan que los costos de las obras que deben realizarse no superan los 2.200 millones de dólares. La medida fue denunciada por este sitio como un “autocontrato” por las sospechas de que, más allá de las maniobras para intentar desprenderse de IECSA, Mauricio Macri seguiría vinculado a la empresa. Se comunicó que estaba a punto de venderse pero hasta el momento no pudo confirmarse la operación porque a los pocos días la empresa se retiró de la Bolsa y ya no está obligada a presentar sus balances. Más allá de eso, suponiendo que IECSA fue vendida, la misma es controlada por el conglomerado ODS. Este conglomerado lo integraban hasta hace algunos meses Ángelo Calcaterra y los Ghella, una familia italiana muy cercana a los Macri. Sin embargo, en marzo de este año, Lorenzo Ghella le vendió su cuota al primo del presidente. De esta manera, Ángelo se convirtió en el accionista mayoritario de ODS.
Una ayuda para el primo

El caso del gasoducto cordobés también cuenta con el guiño de la Casa Rosada. La provincia de Córdoba realizó una primera licitación en 2008 para extender la red troncal de gas en todo su territorio durante el primer gobierno de Schiaretti. El acuerdo era por 1770 kilómetros de tendido y el costo de la obra 257 millones de dólares. Sin embargo, por denuncias de corrupción a nivel local e internacional, la obra nunca se puso en marcha y José Manuel De la Sota la anuló el año pasado.

Al retornar a la gobernación, Schiaretti cerró una nueva licitación mucho más costosa que la anterior. En este caso se prevén construir2330 kilómetros de tendido con 840 millones de dólares de presupuesto. Es decir, mientras en el proyecto de 2008 el kilómetro de tendido tenía un costo aproximado de 145.000 dólares, en la nueva licitación el costo es cercano a los 360.000 dólares por kilómetro de tendido. En el marco de esta nueva licitación es que Macri otorgó, en sociedad con el gobernador cordobés, 2.500 millones de pesos para financiar las obras que tanto su primo como Odebrecht llevarán adelante en todo el territorio provincial. La decisón evidencia el favoritismo que Macri está teniendo con su primo para dinamizar los proyectos de obra pública en los que él participa.
¿Quién es Odebrecht?

Marcelo Odebrecht, de 48 años, es ex CEO de la empresa que lleva su nombre. Está preso desde junio del 2015 y pesa sobre él una condena de 19 años. Según se pudo reconstruir, el modus operandi de los sobornos en todo el planeta constaban de una estructura institucional hacia adentro de la empresa dedicada exclusivamente a derivar las sumas necesarias a cuentas offshores de compañías a nombre de terceros. Una vez allí, se realizaban cuatro o cinco movimientos entre estas compañías. Luego, gracias a la compra de la filial de un banco con sede en paraíso fiscal, se realizaban otra cantidad de operaciones similares de transferencias bancarias con sede en paraísos fiscales para despistar a posibles investigadores, hasta que finalmente el dinero era acercado en bolsas o valijas a los funcionarios correspondientes.