"Crisis" en Honduras: el candidato opositor Nasralla entrega pruebas de fraude electoral a la OEA y la UE
12 diciembre, 2017
Nasralla entrega informe sobre presuntas irregularidades a la OEA y UE
El candidato de la Alianza de Oposición, Salvador Nasralla, presentó este martes las actas que estaban en su poder y un informe sobre presuntas irregularidades electorales a los representantes de la Organización de Estados Americanos (OEA) y Unión Europea (UE).
“Entiendo que llegó un perito argentino, espero que este revise todo. Porque tiene que revisar todo el proceso”, sostuvo.
Nasralla, en rueda de prensa, informó que entregó estos documentos en una reunión sostenida con los observadores internacionales.
“Es un fraude sistémico que no se había experimentado en ninguna parte del mundo (…) no importa si declaran a Juan Orlando como presidente, vamos a luchar hasta que se den cuenta que el pueblo hondureño quiere un cambio”, indicó el candidato presidencial de la Alianza.
Por su parte, Manuel Zelaya Rosales, coordinador de la Alianza de Oposición, sostuvo que “el pueblo no aceptará un candidato impuesto”.
Hasta el momento el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha hecho dos recuentos de votos, pero todavía no hace una declaración oficial del nuevo presidente de la República alegando que está a la espera de resolver las impugnaciones.
De acuerdo con el último informe global divulgado por el TSE, el presidente Juan Orlando Hernández obtuvo el 42,95 % (1.410.877 votos), mientras que Nasralla, que reiteró que no aceptará los resultados oficiales, sumó el 41,42 % (1.360.439 votos).
Los hondureños votaron el 26 de noviembre por un presidente, tres vicepresidentes, 128 diputados al Parlamento y 298 corporaciones municipales, pero aún desconocen quién gobernará el país por los próximos cuatro años.
El TSE tiene plazo hasta el 26 de diciembre para proclamar al nuevo presidente electo de Honduras, así como a los diputados y alcaldes.
La Prensa
Human Rights Watch denuncia “indicios contundentes de fraude electoral” en Honduras
El director para las Américas de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco, denunció este lunes “indicios contundentes de fraude electoral” en los recientes comicios presidenciales en Honduras del 26 de noviembre y pidió a las autoridades de este país que se respete la voluntad de los votantes.
A continuación el pronunciamiento de HRW
Washington D.C., 11 de diciembre de 2017) —Las autoridades hondureñas deberían adoptar medidas inmediatas para garantizar la credibilidad de las elecciones generales que se celebraron en el país el 26 de noviembre de 2017, y respetar el derecho a la protesta pacífica, señaló hoy Human Rights Watch.
Diversos observadores internacionales informaron irregularidades en el proceso electoral, lo cual concitó serias dudas sobre la legitimidad de las elecciones. Luego de que trascendieran señalamientos de manipulación de los resultados electorales, empezaron las protestas y las autoridades decretaron el estado de emergencia. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas en Honduras indicaron haber recibido información de que 11 personas habrían muerto durante las protestas.
“El respeto de los derechos humanos es clave para la democracia”, destacó José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch. “Eso no sólo implica que todos los votos deberían contarse correctamente, sino además que las autoridades hondureñas deben garantizar el derecho de protesta pacífica”.
La participación del actual Presidente Juan Orlando Hernández en las elecciones fue controvertida, dado que la Constitución hondureña no permite un segundo mandato. Sin embargo, legisladores del Partido Nacional de Hernández cuestionaron esta prohibición ante la Corte Suprema de Justicia, alegando, entre otros argumentos, que la limitación al mandato era violatoria de normas internacionales de derechos humanos.
Se apoyaron en una disposición de la Convención Americana sobre Derechos Humanos que establece que los derechos políticos podrán limitarse “exclusivamente” en circunstancias muy específicas. Fue una interpretación disparatada, pues la cláusula se diseñó en 1969 para evitar que gobiernos abusivos excluyeran arbitrariamente a candidatos opositores, y no para impedir que se impusieran límites constitucionales a las reelecciones que precisamente buscan evitar el surgimiento de líderes autócratas, explicó Human Rights Watch. Sin embargo, la Corte Suprema les dio la razón y permitió a Hernández postularse nuevamente.
La jornada posterior a la elección, el Tribunal Supremo Electoral anunció que, luego de haber contado más de la mitad de los votos, el candidato opositor Salvador Nasralla llevaba una ventaja de cinco puntos respecto de Hernández. Pero los resultados finales se postergaron y, dos días más tarde, luego de una baja de varias horas del sistema informático del tribunal, la tendencia se revirtió. El 4 de diciembre, más de una semana luego de las elecciones, el tribunal anunció que Hernández había obtenido 1,6 por ciento más de votos que Nasralla.
Criterio
Nasralla entrega informe sobre presuntas irregularidades a la OEA y UE
El candidato de la Alianza de Oposición, Salvador Nasralla, presentó este martes las actas que estaban en su poder y un informe sobre presuntas irregularidades electorales a los representantes de la Organización de Estados Americanos (OEA) y Unión Europea (UE).
“Entiendo que llegó un perito argentino, espero que este revise todo. Porque tiene que revisar todo el proceso”, sostuvo.
Nasralla, en rueda de prensa, informó que entregó estos documentos en una reunión sostenida con los observadores internacionales.
“Es un fraude sistémico que no se había experimentado en ninguna parte del mundo (…) no importa si declaran a Juan Orlando como presidente, vamos a luchar hasta que se den cuenta que el pueblo hondureño quiere un cambio”, indicó el candidato presidencial de la Alianza.
Por su parte, Manuel Zelaya Rosales, coordinador de la Alianza de Oposición, sostuvo que “el pueblo no aceptará un candidato impuesto”.
Hasta el momento el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha hecho dos recuentos de votos, pero todavía no hace una declaración oficial del nuevo presidente de la República alegando que está a la espera de resolver las impugnaciones.
De acuerdo con el último informe global divulgado por el TSE, el presidente Juan Orlando Hernández obtuvo el 42,95 % (1.410.877 votos), mientras que Nasralla, que reiteró que no aceptará los resultados oficiales, sumó el 41,42 % (1.360.439 votos).
Los hondureños votaron el 26 de noviembre por un presidente, tres vicepresidentes, 128 diputados al Parlamento y 298 corporaciones municipales, pero aún desconocen quién gobernará el país por los próximos cuatro años.
El TSE tiene plazo hasta el 26 de diciembre para proclamar al nuevo presidente electo de Honduras, así como a los diputados y alcaldes.
La Prensa
Human Rights Watch denuncia “indicios contundentes de fraude electoral” en Honduras
El director para las Américas de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco, denunció este lunes “indicios contundentes de fraude electoral” en los recientes comicios presidenciales en Honduras del 26 de noviembre y pidió a las autoridades de este país que se respete la voluntad de los votantes.
A continuación el pronunciamiento de HRW
Washington D.C., 11 de diciembre de 2017) —Las autoridades hondureñas deberían adoptar medidas inmediatas para garantizar la credibilidad de las elecciones generales que se celebraron en el país el 26 de noviembre de 2017, y respetar el derecho a la protesta pacífica, señaló hoy Human Rights Watch.
Diversos observadores internacionales informaron irregularidades en el proceso electoral, lo cual concitó serias dudas sobre la legitimidad de las elecciones. Luego de que trascendieran señalamientos de manipulación de los resultados electorales, empezaron las protestas y las autoridades decretaron el estado de emergencia. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas en Honduras indicaron haber recibido información de que 11 personas habrían muerto durante las protestas.
“El respeto de los derechos humanos es clave para la democracia”, destacó José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch. “Eso no sólo implica que todos los votos deberían contarse correctamente, sino además que las autoridades hondureñas deben garantizar el derecho de protesta pacífica”.
La participación del actual Presidente Juan Orlando Hernández en las elecciones fue controvertida, dado que la Constitución hondureña no permite un segundo mandato. Sin embargo, legisladores del Partido Nacional de Hernández cuestionaron esta prohibición ante la Corte Suprema de Justicia, alegando, entre otros argumentos, que la limitación al mandato era violatoria de normas internacionales de derechos humanos.
Se apoyaron en una disposición de la Convención Americana sobre Derechos Humanos que establece que los derechos políticos podrán limitarse “exclusivamente” en circunstancias muy específicas. Fue una interpretación disparatada, pues la cláusula se diseñó en 1969 para evitar que gobiernos abusivos excluyeran arbitrariamente a candidatos opositores, y no para impedir que se impusieran límites constitucionales a las reelecciones que precisamente buscan evitar el surgimiento de líderes autócratas, explicó Human Rights Watch. Sin embargo, la Corte Suprema les dio la razón y permitió a Hernández postularse nuevamente.
La jornada posterior a la elección, el Tribunal Supremo Electoral anunció que, luego de haber contado más de la mitad de los votos, el candidato opositor Salvador Nasralla llevaba una ventaja de cinco puntos respecto de Hernández. Pero los resultados finales se postergaron y, dos días más tarde, luego de una baja de varias horas del sistema informático del tribunal, la tendencia se revirtió. El 4 de diciembre, más de una semana luego de las elecciones, el tribunal anunció que Hernández había obtenido 1,6 por ciento más de votos que Nasralla.
Criterio