¿Por qué está preso en Andorra Andrés “Betingo” Sanguinetti?
Mar 5, 2018
Mar 5, 2018
Andrés “Betingo” Sanguinetti fue acusado de integrar un sistema de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. La mecánica era entregar sobornos para obtener la concesión de obras públicas en varios países.
Un ex abogado de la empresa, Rodrigo Durán, ahora colaborador de la Justicia, mencionó a Sanguinetti como uno de los partícipes de la maniobra, entre otros empleados de Banca Privada de Andorra (BPA). Allí se abrían cuentas a nombre de testaferros y el dinero se traspasaba mediante movimientos internos, sin dejar registro, hasta llegar a los implicados.
Andrés “Betingo” Sanguinetti es medio hermano del ex presidente Julio María Sanguinetti, y en los últimos años ganó popularidad por ser dirigente de Peñarol y aparecer asiduamente en la prensa.Está preso en Andorra. Fue procesado por lavado de activos en el caso Odebrecht.
La maniobra consistía en hacer crear sociedades a los implicados para que se hicieran pagos a través de testaferros, según informó el sitio Catalunya Press.
Entre 2006 y 2015, Betingo trabajó en la firma Banca Privada de Andorra (BPA), que según la denuncia del exabogado de Odebrecht, Rodrigo Tacla Durán, participó del sistema de sobornos ideado por la compañía para conseguir obras públicas en buena parte de América Latina.
Tacla Durán es considerado el ideólogo del esquema de sobornos de esta empresa, que sacudió a Latinoamérica. De acuerdo a las acusaciones, la compañía habría realizado sobornos a funcionarios públicos del gobierno de 12 países (no está Uruguay entre ellos).
Sanguinetti trabajó para BPA hasta 2015 y “solo se comunicó con una aplicación de teléfono”. Además, según la Justicia, fue beneficiario de pagos a través de una caja B de BPA que funcionaba a través de una sociedad panameña.
Esa “caja B” de BPA funcionaba a través de la sociedad panameña Landstreet”.
El “Grupo Betingo” recibió “comisiones” por estas operaciones por 313.017 euros.
Lo que presuntamente hacía BPA -con filial en Montevideo también- era crear sociedades, algunas offshore, para enviar el dinero a los involucrados a través de testaferros.
Según Catalunya Press, Tacla dijo a la Justicia que mantuvo reuniones en Barcelona con Sanguinetti y un ejecutivo de la firma brasileña de nombre Luiz Eduardo da Rocha.
Éste último está involucrado en la trama de corrupción, y luego -al igual que Tacla – aceptó delatar a otros a cambio de una reducción en la pena.
Sanguinetti, que en Uruguay tiene una destacada trayectoria como dirigente deportivo -en la Unión de Rugby del Uruguay y en Peñarol- dijo en su momento en una entrevista con el portal Ecos que su vínculo con la Banca Privada de Andorra estuvo siempre sometida a jerarquía.
Sanguinetti fue señalado en las indagatorias como alguien que intervino en el pago de una coima al exministro de Electricidad de Ecuador.
El diario El Comercio de Ecuador informó en abril de 2017 que Saguinetti se reunió con el ex ministro de Energía de Ecuador Alecksey Mosquera.
Esa reunión tuvo lugar en Montevideo. Según la declaración del “arrepentido” Tacla Durán, allí se ultimaron “detalles del pago” de una licitación digitada para que fuese ganada por Odebrecht.
La información estuvo contenida en un documento enviado a España por la Fiscalía de Ecuador.
La conexión entre Sanguinetti y Mosquera comenzó en 2011, según el expediente.
Mosquera fue uno de los primeros detenidos en Ecuador por el escándalo de Odebrecht.
El ministro del gobierno del expresidente Correa recibió un millón de dólares en coimas de Odebrecht a través de la sociedad anónima Tokyo Traders.
La empresa constructora, a su vez, utilizaba para tales fines la offshore Klienfled.
Tacla Durán, quien colabora con la Justicia española, señaló a una decena de empleados de BPA, entre los que se encuentra Sanguinetti.
En setiembre de 2017, la jueza María Helena Mainard había aceptado la extradición y dictaminó prisión domiciliaria para Sanguinetti previo pago de una fianza de US$ 30 mil.
Mientras se procesaba el viaje a Andorra, Betingo llevó una tobillera electrónica para monitorear sus movimientos y luego viajó custodiado por dos efectivos de Interpol para responder por su presunta participación en el caso Odebrecht.
Defender la familia
Según afirmó el exmandatario en 2017, su hermano “era funcionario de un banco de Andorra, no era ni jerarca ni gerente, ni nada. Era un tercer escalón y no tenía ni capacidad de abrir cuentas”, y defendió: “Es un muchacho serio y decente”, aseguró La Diaria.