“Si no endereza el rumbo, yo me retiraría de la OMC”, afirmó ayer Trump. Imagen: AFP
El representante comercial de EE.UU., Robert Lighthizer, aseguró que haber permitido el ingreso de China a la OMC en 2001 fue un grave error. Agregó que hace tiempo viene pidiendo al gobierno que adopte medidas más agresivas contra el organismo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con irse de la Organización Mundial de Comercio (OMC) si el organismo continúa con lo que Trump definió como malos tratos. “Si no endereza el rumbo, yo me retiraría de la OMC” afirmó ayer Trump, en una entrevista a Bloomberg en la Casa Blanca. Durante el encuentro en el salón Oval, el mandatario fue determinante:”la OMC es el peor acuerdo comercial que se haya hecho”. Las declaraciones del magnate se suman a las del mes pasado cuando afirmó que Estados Unidos está en una gran desventaja por haber sido maltratados por la OMC durante muchos años. Ante ello Trump exigió al organismo con sede en Ginebra, que cambie sus caminos. En este sentido el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, aseguró que haber permitido el ingreso de China a la OMC en 2001 fue un grave error. Lighthizer agregó que hace tiempo viene pidiendo al gobierno que adopte medidas más agresivas contra el Organismo porque le resulta difícil lidiar con una economía como la de China. El funcionario estadounidense acusó a la OMC de interferir en la soberanía de norteamérica en los casos de antidumping.
Al respecto, Trump consideró que raramente ganaron una demanda en el organismo de comercio, a excepción del año pasado. “¿Sabes por qué? Porque saben que si no lo hacemos, me iré de allí”, aseveró.
A pesar de sus reiteradas críticas, Estados Unidos ganó el 91% de los casos que presentó, según informó Simon Lester, analista de comercio en el Instituto Cato. No obstante, el mandatario determinó que el sistema de solución de conflictos de la OMC está roto y que necesita una inminente revisión. A tono con ello, la semana pasada funcionarios de la Unión Europea (UE) y de Japón viajaron a Washington para proponer esfuerzos conjuntos en el enfrentamiento con China en la OMC.
Las declaraciones del mandatario estadounidense se dan en medio de la guerra comercial con China, declarada en marzo pasado, con el anuncio de Trump de poner aranceles del 25 por ciento sobre las importaciones de acero y de un diez a las de aluminio.
En otra línea de relaciones comerciales, ayer terminó el plazo acordado por Trump para las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA por sus siglas en inglés) entre Estados Unidos y Canadá. En su entrevista al medio estadounidense, el magnate afirmó que están cerca de culminar las conversaciones, no obstante al cierre de este edición no se conocían definiciones. Incluso el mandatario afirmó en un tuit que no haría ninguna concesión a Canadá. Al respecto la ministra de Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, fue determinante al decir que solo aceptarán un buen acuerdo en Canadá. “Aún no hemos llegado ahí”,indicó Freeland. Antes de terminar el día, funcionarios canadienses dudaban que se alcanzara un acuerdo. El Nafta es un acuerdo comercial entre Canadá, Estados Unidos y México, que entró en vigor en 1994 y desde aquel entonces los tres socios están íntimamente ligadas. La renegociación del mayor tratado comercial del mundo fue una imposición de Trump, que considera que en su casi cuarto de siglo de funcionamiento el acuerdo no benefició a su país. Es por ello que desde el inicio de las negociaciones del tratado, Trump puso sobre la mesa la supresión del Capítulo 19, que fija el mecanismo para resolver controversias sobre subsidios y dumping, con un panel de arbitraje. Los aranceles canadienses a los productos lácteos, criticados con frecuencia por Trump, son uno de los puntos más complicados de la negociación entre los dos países. “El embajador Lighthizer y yo acordamos a principios de esta semana que no vamos a negociar asuntos específicos en público”, dijo ayer Freeland al ser preguntada sobre ese tema. Por otra parte, Estados Unidos y México anunciaron el lunes un acuerdo entre ellos en el marco de la renegociación del Nafta y Trump dejó abierta la posibilidad de que Canadá quede fuera del nuevo pacto si no logran consensuar posturas. Enrique Peña Nieto, saliente presidente de México, tiene prisa por cumplir firmar el acuerdo antes que asuma el próximo mandatario, Andrés Manuel López Obrador, el 1 de diciembre.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con irse de la Organización Mundial de Comercio (OMC) si el organismo continúa con lo que Trump definió como malos tratos. “Si no endereza el rumbo, yo me retiraría de la OMC” afirmó ayer Trump, en una entrevista a Bloomberg en la Casa Blanca. Durante el encuentro en el salón Oval, el mandatario fue determinante:”la OMC es el peor acuerdo comercial que se haya hecho”. Las declaraciones del magnate se suman a las del mes pasado cuando afirmó que Estados Unidos está en una gran desventaja por haber sido maltratados por la OMC durante muchos años. Ante ello Trump exigió al organismo con sede en Ginebra, que cambie sus caminos. En este sentido el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, aseguró que haber permitido el ingreso de China a la OMC en 2001 fue un grave error. Lighthizer agregó que hace tiempo viene pidiendo al gobierno que adopte medidas más agresivas contra el Organismo porque le resulta difícil lidiar con una economía como la de China. El funcionario estadounidense acusó a la OMC de interferir en la soberanía de norteamérica en los casos de antidumping.
Al respecto, Trump consideró que raramente ganaron una demanda en el organismo de comercio, a excepción del año pasado. “¿Sabes por qué? Porque saben que si no lo hacemos, me iré de allí”, aseveró.
A pesar de sus reiteradas críticas, Estados Unidos ganó el 91% de los casos que presentó, según informó Simon Lester, analista de comercio en el Instituto Cato. No obstante, el mandatario determinó que el sistema de solución de conflictos de la OMC está roto y que necesita una inminente revisión. A tono con ello, la semana pasada funcionarios de la Unión Europea (UE) y de Japón viajaron a Washington para proponer esfuerzos conjuntos en el enfrentamiento con China en la OMC.
Las declaraciones del mandatario estadounidense se dan en medio de la guerra comercial con China, declarada en marzo pasado, con el anuncio de Trump de poner aranceles del 25 por ciento sobre las importaciones de acero y de un diez a las de aluminio.
En otra línea de relaciones comerciales, ayer terminó el plazo acordado por Trump para las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA por sus siglas en inglés) entre Estados Unidos y Canadá. En su entrevista al medio estadounidense, el magnate afirmó que están cerca de culminar las conversaciones, no obstante al cierre de este edición no se conocían definiciones. Incluso el mandatario afirmó en un tuit que no haría ninguna concesión a Canadá. Al respecto la ministra de Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, fue determinante al decir que solo aceptarán un buen acuerdo en Canadá. “Aún no hemos llegado ahí”,indicó Freeland. Antes de terminar el día, funcionarios canadienses dudaban que se alcanzara un acuerdo. El Nafta es un acuerdo comercial entre Canadá, Estados Unidos y México, que entró en vigor en 1994 y desde aquel entonces los tres socios están íntimamente ligadas. La renegociación del mayor tratado comercial del mundo fue una imposición de Trump, que considera que en su casi cuarto de siglo de funcionamiento el acuerdo no benefició a su país. Es por ello que desde el inicio de las negociaciones del tratado, Trump puso sobre la mesa la supresión del Capítulo 19, que fija el mecanismo para resolver controversias sobre subsidios y dumping, con un panel de arbitraje. Los aranceles canadienses a los productos lácteos, criticados con frecuencia por Trump, son uno de los puntos más complicados de la negociación entre los dos países. “El embajador Lighthizer y yo acordamos a principios de esta semana que no vamos a negociar asuntos específicos en público”, dijo ayer Freeland al ser preguntada sobre ese tema. Por otra parte, Estados Unidos y México anunciaron el lunes un acuerdo entre ellos en el marco de la renegociación del Nafta y Trump dejó abierta la posibilidad de que Canadá quede fuera del nuevo pacto si no logran consensuar posturas. Enrique Peña Nieto, saliente presidente de México, tiene prisa por cumplir firmar el acuerdo antes que asuma el próximo mandatario, Andrés Manuel López Obrador, el 1 de diciembre.