Está en huelga de hambre y pretende que no lo alimenten más de manera forzada
Gonzalo Ferreira - 06.10.2014,El Observador
El sirio Abu Wa'el Dhiab, uno de los seis prisioneros de Guantánamo que pidió refugio en Uruguay, está haciendo huelga en la cárcel estadounidense en la isla de Cuba y hoy comparecerá por videoconferencia en un juicio en el que pide que se le quite el caño por el que se lo alimenta de manera forzada.
Hace cinco meses le dijeron que venía a Uruguay, pero como la transferencia está demorada ya no cree que se concrete. Es por eso que Dhiab quiere continuar con su huelga de hambre y morir. Entiende que no es humanitario que lo obliguen a comer de manera forzada.
La audiencia será ante un tribunal federal en Washington, Estados Unidos y según supo El Observador el gobierno norteamericano argumentará para que se le mantenga conectado aduciendo que el recluso en muy poco tiempo quedará libre al viajar a Uruguay.
Según explicó una fuente del gobierno norteamericano, esa es una de las razones por las que desde Estados Unidos quieren acelerar el traslado de los presos.
El juicio que se inicia hoy –y al que se permitirá acceder con cámaras para mostrar cómo son alimentados los reclusos- se resolverá en pocos días. En general no demoran más de una semana, porque está en juego la vida de las personas.
Abu Wa'el Diva es uno de los seis que ya firmó un acuerdo con el gobierno uruguayo en la que solicita ser recibido como refugiado. En ese mismo acuerdo, Uruguay se comprometió a brindarle asistencia de salud y educación.
Según informó Búsqueda a comienzos de setiembre, dos de los seis presos ya tienen asegurado un puesto de trabajo. La Agencia de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) les facilitará el acceso a una vivienda.Abu Dhiab lleva 12 años presos y desde 2009 el gobierno norteamericano cree que debe ser liberado pero no encuentra la forma de hacerlo.
El viernes, el recluso sirio consiguió un paso muy importante, cuando la jueza federal Galdys Kessler aceptó divulgar los videos en los que se muestra como el gobierno de Estados Unidos lo alimenta. Ese juicio fue entablado por 16 medios que reclaman la publicación de los videos filmados en la prisión ubicada en la bahía cubana.
Se trata de 28 videos clasificados, que muestran los procedimientos de alimentación forzada. Estos videos –que en total duran 11 horas- muestran cómo un equipo de carceleros esposa al sirio Abu Dhiab, lo conduce a una silla, "ponen un tubo en su nariz y lo alimenta a la fuerza", dijo una fuente a la agencia AFP.
"Hay procedimientos en curso que causan dolor innecesario, no están relacionados a ningún objetivo de seguridad legítimo y hay alternativas prontas que puede permitir que sea hecho en una manera más humana y menos dolorosa", dijo Eric Lewis, uno de los cinco abogados que por el momento han visto las once horas de grabación.
"Si bien yo no estoy autorizado a hablar sobre el contenido de estos videos, puedo decir que he tenido problemas para dormir después de verlos”, dijo uno de los abogados de Dhiab.
Además, la jueza Kessler entendió que la audiencia de hoy no puede ser privada como pretendía la administración y por lo tanto será abierta a las cámaras.
Será la primera vez que en territorio norteamericano se vean esas imágenes en público y que se realice un juicio abierto de un prisionero de Guantánamo.
Antecedentes
Fue el 1 de setiembre cuando el diario norteamericano The New York Times informó que estaba pronto el traslado de los presos pero que el gobierno uruguayo prefería trasladar el movimiento hasta después de las elecciones nacionales para no generar turbulencias durante la campaña.
El acuerdo entre ambos países estipula que los reclusos acusados de terroristas por la administración de George Bush se comprometen a vivir por lo menos durante dos años en Uruguay y transitar por el país de acuerdo a las normas que lo rigen. Será la Cruz Roja la que se encargará de identificar y trasladar a las familias de los prisioneros cuando ellos ya estén instalados. En agosto una delegación del gobierno uruguayo viajó a Guantánamo y allí se entrevistó con los seis presos quienes firmaron un documento en el que se establece que llegarán a Uruguay en calidad de refugiados y que se les garantizará acceso a salud y educación, según informó Búsqueda.
El asunto del traslado de los presos generó una intensa polémica en la campaña electoral uruguaya en las últimas dos semanas, luego que el Partido Nacional saliera a rechazar la llegada de los reclusos
La llegada de los presos y la campaña electoral
La campaña electoral puso el asunto de Guantánamo en la primera línea de batalla y generó el primer choque grande entre los blancos y el gobierno. Luego que Luis Lacalle Pou marcara su postura contraria a la llegada de seis reclusos de la cárcel clandestina norteamericana, el presidente José Mujica salió al contragolpe. “Salen a romper las pelotas con esto por cuatro votos miserables. ¡Qué manga de patriotas que son! ¡Flor de patriotas son!”, dijo Mujica el jueves. El viernes en su audición fue más allá. yo te pregunto, una vez que te enteraste que hay cerca de 200 tipos que se la comieron de garrón y que fueron tirados como tarro al basural, y vos pudiendo hacer algo que no pudieron hacer los otros por contradicciones electorales, ¿no das una mano por cobardía? ¿No sabés que las campanas también doblan por ti? No se puede ser en el mundo un alma tan podrida”, dijo. “Los que están por la positiva salen a los gritos por algo que no está ni ejecutado, pero no salen a hablar con nosotros, siembran incertidumbre (...), y cuando logramos abrir rendijas para el trabajo nacional y colarnos en un mercado tan importante, nos relajan, nos sabotean. ¿Quién los entiende?”, cuestionó Mujica