Sanabria hizo un acuerdo con el fiscal e involucró a sus contadores
Abr 1, 2017
Sanabria dijo que el gerente Calvette y Capote estaban al tanto de toda la operativa de la empresa. El juez penal Marcelo Souto, dispuso varios careos por el caso del cambio Nelson. Francisco Sanabria arribó a Uruguay y fue conducido al juzgado de Maldonado escoltado por policías, esposado y con chaleco antibala. Un vallado rodeaba la sede judicial. Interrogado por el magistrado y el fiscal del caso Rodrigo Morosoli. Sanabria declaró que tanto el gerente general del cambio, Nelson Calvette y Humberto Capote, expresidente del Banco Central de Uruguay (BCU), y contador de la empresa estaban al tanto de toda la operativa de la empresa y eran de su total confianza.
Por ello el juez Souto decidió citarlos para hacer un careo. El magistrado dispuso también que todos los indagados permanezcan incomunicados.
Estos son Sanabria, Calvette, las contadoras Soledad Ubilla y Beatriz Silva y el ex titular del BCU Capote y otra profesional más. Sanabria se descompensó durante la larga instancia judicial, y sobre las 20 horas una de las contadoras tuvo un ataque de nervios y se debió llamar a una emergencia móvil.
El juez tiene 48 horas para resolver si cometió delitos de libramiento de cheques sin fondo y apropiación indebida. Además la Justicia intentará determinar luego si cometió el delito de insolvencia societaria fraudulenta que es precedente al delito de lavado de activos. Ese delito lo comete “el que para procurarse un provecho injusto, para sí o para otro, ocultara, disimulara o hiciese desaparecer, parcial o totalmente, el patrimonio de una empresa”.
En este caso la investigación pasará al juzgado de Crimen Organizado. Cabe recordar que el presidente del BCU, Mario Bergara, ha dicho que también hay “indicios de lavado de activos”. Si bien la Justicia tiene a disposición US$ 250 mil que previo a fugarse del país rumbo a Miami, Sanabria entregó a un empleado del cambio, deberá explicar qué hizo con el dinero que los clientes tenían depositado en el cambio y desapareció.
Según indicó Bergara, los 379 clientes del cambio que poseían aproximadamente US$ 10 millones.
“Todo el plazo constitucional”
El fiscal indicó que hay “mucho para trabajar” y por ello “nos vamos a tomar todo el plazo constitucional”. De todas formas, según indicaron fuentes judiciales, el fiscal podría pedir hoy algún procesamiento y continuar con las indagatorias para definir luego la situación de las demás personas. Asimismo se volverá a tomar declaración a dos contadoras que trabajaban para el cambio. Es que juez y fiscal tratan de establecer quines realizaban las maniobras a nivel contable para evitar que el BCU registrara la operativa que realizaba el cambio cuando recibía depósitos de particulares y de empresas, como si fuera un banco, una práctica prohibida para las casas de cambio.
Por su parte el juez Souto, antes de empezar la indagatoria puntualizó: “tengo muchas denuncias contra él, todas se hicieron públicas. Tengo que valorar todas de igual manera, todos son iguales ante la ley”.
La fuga y como influye
El ex presidente de la departamental del Partido Colorado en Maldonado y ex diputado suplente de Germán Cardoso cerró las puertas del cambio y fugó a Estados Unidos el pasado 23 de febrero dejando un tendal de damnificados. Interpol lo tenía ubicado en el estado de Florida.
El juez Souto se refirió a esta fuga y dijo que no necesariamente es un agravante pero que por ejemplo puede incidir en otros aspectos a la hora de dictar una sentencia “puede ser determinante en caso de que haya un reproche penal para decidir si el procesamiento es con o sin prisión”, apuntó el magistrado.
“Es primario, tiene voluntad de colaborar con la justicia y no realizó una maniobra delictiva, ya que libró cheques que no pudieron ser cobrados debido a que le fue mal a su negocio. Sanabria es una persona que consume 13 pastillas por día, entre ellas ansiolíticos y psicofármacos y el estrés influyó en su actuación”, dijo su abogado defensor, Jorge Barrera refiriéndose a porqué había fugado. Además dijo que Sanabria se declaró insolvente.
En esta línea Souto tiene 30 denuncias por emisión de cheques sin fondos y apropiación de dinero depositado informalmente en el cambio. Además Sanabria dejó a 99 funcionarios del Cambio Nelson sin trabajo y deudas en el entorno de diez millones de dólares. La justicia trabó un embargo genérico a Sanabria que además del cambio es propietario de emisoras radiales, agencia de viaje, lujosos apartamentos, un tambo, una casa en la Playa Brava y autos de alta gama. La resolución del embargo se extiende a los bienes de su esposa, Carolina Serna.
La estimación del monto total del embargo es de unos US20 millones.
En el avión dijo: “no tengo un mango”
Quien viajara en el avión junto a Sanabria contó una conversación que mantuvo con él. Dijo que Sanabria le aseguró que “no tengo un mango”, indicando que sacó el pasaje con millas. Si bien viajó en clase ejecutiva dijo que “tengo muchas millas”. También indicó que no podía quedarse en EEUU porque lo extraditarían pero sí podía ir a Italia dónde eso sería difícil. Pero aseguró que quería dar la cara. También se refirió a su estado depresivo y dijo que “estoy empastillado hasta la cabeza”.