Habría provocado un quiebre en el Servicio de Impuestos Internos (SII)
La investigación por emisión de boletas que involucra al ex recaudador de la primera campaña de Michelle Bachelet sumó un nuevo elemento. Según Ciper Chile, ambos ministerios habrían pedido dilatar la querella -que también sumaba a Jovino Novoa- ante la Fiscalía. Este hecho tendría enfrentados al director Michel Jorrat con el equipo jurídico del servicio.
(Agencia Uno)
Un quiebre al interior del Servicio de Impuestos Internos (SII) habría provocado una supuesta presión desde los ministerios de Hacienda e Interior para dilatar la presentación de una querella contra Giorgio Martelli, operador político y ex recaudador de la primera campaña de Michelle Bachelet, quien es investigado por la Fiscalía por posible emisión de boletas y facturas falsas a SQM.
Según lo informado por el portal Ciper Chile, el lunes -dos días antes que la Presidenta Bachelet anunciara la renuncia de todos sus ministros- cuatro altos funcionarios de Impuestos Internos detectaron una operación cuyo objetivo final era frenar las investigaciones que se desarrollan en el organismo tributario relacionadas con el financiamiento ilegal de la política.
En esa fecha, según la investigación, se había beneficiado a la sociedad comercial del ex senador Jovino Novoa (UDI), uno de los políticos implicados en la investigación judicial al Grupo Penta, con la condonación del 55% de sus “impuestos comprometidos”, es decir, aquellos que estaban bajo investigación por sospecha de fraude tributario. El director del SII, Michel Jorrat, señaló que no conocía esta operación y que investigará quien la autorizó.
La condonación a Novoa, quien estaba en la lista de querellados para permitir una investigación más profunda de la Fiscalía, también incluía a Giorgio Martelli, vinculado a servicios a la filial SQM Salar.
Una vez definida la formalización de los primeros políticos por el caso Penta, el subdirector jurídico del SII, Cristián Vargas, le pidió al director del servicio, Michel Jorrat, que autorizara la presentación de la ampliación de querella contra Novoa y Martelli antes de las 14:00 del jueves 7, la hora límite para ingresar los escritos al tribunal, y de esa forma no aparecer “empujados” por la Fiscalía.
Pasadas las 13:00 de ese día y al no tener respuesta, Vargas le envío un nuevo mensaje a Jorrat, indicándole que si no recibía instrucción en contrario procedería a presentar la acción judicial. Pese a que Jorrat había anunciado oficialmente que se inhabilitaría de actuar respecto a la empresa de Martelli, pues él mismo emitió boletas para esa sociedad, finalmente el director del SII decidió posponer la ampliación de querella. Jorrat pidió que antes de presentarla se citara a declarar al SII a Giorgio Martelli. En los hechos, eso significaba postergar al menos hasta la próxima semana la decisión de ingresar el escrito al tribunal. El subdirector Vargas no estuvo de acuerdo con esa determinación, pues a su juicio Martelli ya había entregado a Impuestos Internos –a través de sus abogados- la documentación contable necesaria, complementaria con la que antes había presentado SQM Salar, para fundamentar la acción legal. En la institucionalidad del SII la facultad de iniciar acciones legales por ilícitos tributarios la tiene el director de la entidad, quien desde hace años la ha delegado en el subdirector jurídico.
Según Ciper, la actitud del director del SII obedecía a las presiones que recibió desde el Ministerio de Hacienda, del cual depende jerárquicamente. El problema para Jorrat no era la acción contra Novoa, sino la dirigida contra Martelli. El director del SII había recibido instrucciones desde el Ministerio de Hacienda de retrasar la presentación del escrito hasta después del cambio de gabinete, cuando la Presidenta aún no le ponía fecha a la reestructuración de su equipo ministerial. La orden buscaba evitar que se siguiera debilitando la posición del ministro Peñailillo por su vínculo con Martelli.Esto habría provocado el quiebre entre Jorrat y el equipo jurídico del servicio.