15 may 2016

NOSTALGICOS

ARGENTINA. LA EMPRESA ESTATAL NOMBRO A DOS EX MARINOS ACTIVOS EN GRUPOS DE TAREAS EN LA DICTADURA

Represores para Intercargo

Pedro Giromini y Enrique Piaggio son los nuevos gerente y subgerente de prevención y seguridad de la operadora de rampas y servicios de tierra en aeropuertos. Y son dos veteranos de la ESIM de Mar del Plata, un centro de tortura.
 Por Alejandra Dandan

A través de la resolución 53, de 2016, la nueva dirección de Intercargo SA designó a dos marinos retirados de la Armada como gerente y subgerente de Prevención, Protección y Seguridad en la empresa estatal que opera rampas y servicios de tierra de los aeropuertos de todo el país. Son Pedro Eduardo Giromini y Enrique Mauricio Piaggio, que ya cumplieron funciones operativas durante la dictadura. Piaggio revistó en la emblemática Escuela de Suboficiales de Infantería de Marina (ESIM) de Mar del Plata entre 1976 y 1978, ubicada en el faro, considerada un centro clandestino de detención y hoy un Sitio de Memoria. Tuvo elogios en su legajo durante ese período y más tarde por “por haber sido voluntario para participar en operaciones contra la subversión sacrificando momentos de descanso y demostrando gran entusiasmo”.
La fiscalía del Juicio Oral Base Naval II dio su nombre durante los alegatos de 2012 como parte de los nuevos nombres descubiertos entre quienes participaron “directamente” de la represión. A su vez, Giromini estuvo en Puerto Belgrano y la Escuela Naval Militar de Río Santiago en Ensenada, donde se informó que era un suboficial “excelente” para las actividades operativas.
Los nombramientos llevan la firma del nuevo gerente general de Intercargo, Mario Dell’Acqua, ex directivo de Techint y también egresado del liceo naval militar Almirante Guillermo Brown. “Considerando que resulta de imperiosa necesidad contar con el personal idóneo en calidad y capacidad profesional para asegurar el correcto desarrollo del objeto social de Intercargo SAC ocupándose de las cuestiones que le sean encomendadas. Que la incorporación del nuevo personal permitirá profundizar el desarrollo y la eficiencia de la actuación de esta sociedad en el mercado 1) Desígnase a partir del 4 de abril de 2016 como gerente de Prevención, Protección y Seguridad al señor Pedro Eduardo Giromini”. Y a través del artículo 2, “como subgerente al señor Enrique Mauricio Piaggio” (ver imagen).
Intercargo es una empresa que atiende los servicios en tierra de los aviones en aeropuertos de todo el país y está integrada en un 80 por ciento por el Ministerio de Economía y en un 20 por el de Defensa, según la descripción de la página web oficial. Hasta 1994, cuando pasó a manos del Estado, perteneció al empresario Alfredo Yabrán.
Los nombres de los nuevos funcionarios surgieron en los últimos años en las investigaciones de las causas de lesa humanidad. El legajo de Giromini fue remitido al juzgado 1 de Bahía Blanca en 2008, pero su apellido en todo caso es el más conocido debido a los alucinados lazos de parentesco con los Vildoza, parte de otra historia.

Un instructor en el Faro

De acuerdo a su legajo, Piaggio nació el 24 de mayo de 1952. En diciembre de 1973 egresó del Comando de Infantería de Marina. Y en 1976, 1977 y 1978 estuvo en la ESIM, primero como jefe de Sección Marineros y luego como oficial instructor. La ESIM es comparada al centro de exterminio de la Escuela de Mécanica de la Armada. Mercedes Soiza Reilly, fiscal del Juicio en Mar del Plata y actualmente del Juicio ESMA Unificado, definió que institucionalmente era una escuela de formación para infantes de marina, pero al mismo tiempo era un centro operativo y de torturas. “Una de las tareas del ESIM fue abastecer a los Grupos de Tareas de pelotones destinados a patrullar espacios urbanos y rurales. Eran hombres calificados para operar en el territorio que recibieron entrenamientos de parte de ‘instructores’”. La instrucción fue uno de los puestos de Piaggio. Las calificaciones que él mismo hizo durante ese período, permiten ver “un rol activo que no sólo queda demostrado porque fue calificado sino porque también dirigió calificaciones de subordinados que eran los muchachos destinados a ‘reventar’ las casas. Nombres que están ligados a lo que llamaron ‘lucha contra la subversión’”.
Durante ese juicio declaró un ex estudiante de la Marina, que ya había declarado durante la Conadep: Héctor Grumblat. Estudió en 1978. Durante el debate habló de dos espacios de detención: la “sala de comunicaciones” ubicada en el Chalet del Faro, hoy Sitio de Memoria, y una especie de pozo subterráneo con celdas, cerca de la playa. Y también contó que la escuela tenía una “batallón de alumnos” de Infantería de Marina a quienes adoctrinaban sobre la “realidad argentina” en cursos de lucha antisubversiva. Los profesores, dijo, “permanentemente bajaban línea sobre el gobierno militar y explicaban por qué los hombres de esa generación habían decidido tomar el poder, afirmando que los que estaban en contra eran ‘elementos subversivos’ a quienes debían combatir”. A los alumnos les enseñaron cómo proceder en un grupo operativo. Y que existían dos tipos de patrullas, la patrulla “fantasma” donde se salía de civil con armas largas, a secuestrar gente y combatirla, usándolas en zonas urbanas y rurales, y la patrulla “resorte”, a disposición de las necesidades de cualquier comando perteneciente a las tres fuerzas.
Piaggio, que estuvo destinado a la formación de los pelotones, obtuvo una calificación en su legajo de quien fue director del ESIM, Mario José Osvaldo Fórbice, condenado en 2013 a prisión perpetua. Así como Rubén Jacinto Chamorro era director de la ESMA, Fórbice lo fue de la ESI entre 1976 y 1979. Condenado a perpetua en 2013, dos años más tarde le subió la presión al ingresar a la sala de audiencias cuando estaba por comenzar el tercer juicio. Fue el año pasado cuando reconoció finalmente lo que se había negado a admitir, que efectivamente había un desdoblamiento de todas las unidades de la Armada como unidades de “combate”. El juicio de Mar del Plata probó de hecho su doble función: como director de la Escuela y como jefe de un Grupo de Tareas que operó dentro de la Fuerza de Tareas 6. El dato quedó reflejado en su legajo cuando un supervisor destacó su desempeño en el período del 7/09/76 al 26/12/76 como comandante de un GT y ocasionalmente como comandante de la FT 6.
“Los documentos de defensa analizados en ese juicio nos permitieron dejar al descubierto varios nombres de militares que intervinieron directamente en la represión”, dijo la fiscal en aquel momento a este diario. “Un ejemplo fue Oscar Ramón Gronda, que como subdirector de la ESIM era a la vez segundo comandante del Grupo de Tareas y jefe del batallón de alumnos (...) Y el otro caso fue Enrique Mauricio Piaggio que durante los años 1976 y 1977 se desempeñó en el ESIM como jefe de orientación de Infantería de II año, como jefe de la sección marineros primeros (1976) y como oficial instructor de primer año (año 1977). Fue calificado por Fórbice por sus actividades operativas, siempre intensas y sumamente exigentes; por su espíritu agresivo y por haber demostrado aplomo en las operaciones reales en que intervino. Además, repasando la totalidad de su legajo, es elogiado por haber sido voluntario para participar en operaciones contra la subversión, sacrificando momentos de descanso y demostrando gran entusiasmo.” El mismo elogio figura con la firma de un teniente de fragata, Alejandro Giromini, hermano del recién nombrado en Intercargo. Un testigo de identidad reservada declaró en un expediente de la Secretaría de Derechos Humanos sobre calabozos escondidos en un médano. El testigo estuvo en la ESIM entre 1978 y 1979. Dijo que “Giromini era un Teniente de Navío que iba y venía muy seguido al calabozo. Era flaco y alto, y muy burdo. Era jefe de primer año. Hacía mucho hincapié en que todo el mundo era malo, de no juntarse con los civiles que eran todos subversivos”.
Piaggio siguió hacia otros destinos a partir de 1979. Pasó por el Batallón de Seguridad del Estado Mayor de la Armada (BISA), un Grupos de Tareas de la Fuerza de Tareas 3 o Agrupación Buenos Aires, como la ESMA. Pasó por el Batallón de Infantería de Marina (BIM) y por la Escuela de Oficiales de la Armada (ESOA). Por estos antecedentes, la fiscalía cree que es importante hacer una investigación sobre todo su recorrido. Piaggio se retiró oficialmente de la Armada en 1995 con el grado de capitán de fragata. Años más tarde, la Ciudad de Buenos le denegó la incorporación al registro de Héroes de Malvinas, el diploma y el subsidio.

Río Santiago

Pedro Eduardo Giromini nació en 1953. Ingresó a la Armada el 2 de marzo de 1970. Y se retiró con un retiro voluntario el primero de enero de 1999, con grado de capitán de fragata y luego de haber pasado por Estados Unidos como agregado naval durante el gobierno de Carlos Menem. En la dictadura, pasó de teniente de corbeta a teniente de fragata entre 1976 y 1979. Y de acuerdo con su legajo tuvo entre sus destinos la Escuela Naval Militar de Río Santiago entre el 16 de enero de 1977 y el 27 de enero de 1978. Allí estuvo en la Compañía de Vigilancia y Seguridad, una estructura que contenía a los grupos operativos, como sucedió en la ESMA.
En 1977, su nombre aparece calificando a un suboficial infante de marina de la escuela, operativo de la Fuerza de Tareas 5. El suboficial cumplía tareas de Encargado de la Compañía Vigilancia y Seguridad con rol de combate encargado de Compañía. En esa ocasión, el hombre fue calificado por su jefe inmediato, el teniente de corbeta Bengoechea: “Hombre sumamente colaborador, se transformó en un elemento valioso en la faz operativa de la Escuela. Sin descuidar sus funciones de encargado de Compañía, también cumplió funciones operativas en la F.T. 5 donde mostró, seriedad, aplomo, iniciativa y extrema responsabilidad, en situaciones de extremo peligro frente al enemigo”. El mismo legajo tiene una nota firmada por el teniente de corbeta Pedro Giromini, de Vigilancia y Seguridad. Giromini informa que al suboficial no se le va a confeccionar una foja de conceptos para el periodo del 15/11/1977 al 14/03/1978 por no haber variado su concepto.
La escuela fue comandada para la época por el contralmirante Juan Carlos Herzberg, condenado a perpetua por el Tribunal Oral Federal de La Plata en el primer juicio a la Armada que concluyó el año pasado en esa ciudad. Otro oficio que hay en el legajo de ese mismo suboficial durante la misma época está firmado por Herzberg, y lleva el sello de la FT5. “En el desempeño de tareas asignadas en la Fuerza, ha merecido el siguiente concepto: Suboficial, que por su gran espíritu de colaboración, sus convicciones, su excelente predisposición para la ejecución de tareas operativas, ha tenido un excelente desempeño, enfrentando reiteradamente situaciones de riesgo personal”.
Pedro Eduardo y Alejandro son hermanos de Rodolfo Fernando Giromini, piloto del Ejército entre 1978 y 1983 con paso por Campo de Mayo, según datos del Ministerio de Defensa. Rodolfo se casó con Mónica Vildoza, hija de Jorge Vildoza, segundo de la ESMA. Rodolfo Giromini y Jorge, hijo de Vildoza, son o fueron socios en American Data, una empresa de juegos a la que la justicia le congeló los bienes cuando buscaba al marino prófugo para juzgarlo por la apropiación de Javier Penino Viñas.