Diana Mondino, la canciller para quien los chinos son todos iguales
Rodolfo Koé Gutiérrez
On May 3, 2024
La canciller argentina Diana Mondino, una de las funcionarias más acaudaladas del gobierno, tiene la tarea, por mandato del presidente Javier Milei, de “reinsertar a la Argentina en el mundo”, lo que significa seguir los pasos dictados por Estados Unidos, pero también barajar los exabruptos de su jefe contra mandatarios progresistas de la región.
El jueves y en Paris, Mondino se refirió a la base epacial china en la Argentina. Lo hizo al ser consultada por la presencia de militares del gigante asiático. Mondino respondió que no se pudo identificar si participan civiles o militares porque «son todos chinos, son todos iguales». La Estación de Espacio Lejano en Neuquén es una instalación de cooperación tecnológica espacial entre ambos países, destinada sólo a la investigación científica.
Tras pronunciar la frase, fue acusada de “discriminadora” y “xenófoba”. El jueves dijo al diario conservador La Nación que: “Son todos iguales, son todos civiles. Son todos iguales los que participaron. Estábamos hablando de la visita a la estación espacial, fue hace pocos días y lo que destaqué fue la naturaleza civil del personal, que no había uniformes. Los argentinos también eran todos iguales, ninguno uniformado”
El jueves y en Paris, Mondino se refirió a la base epacial china en la Argentina. Lo hizo al ser consultada por la presencia de militares del gigante asiático. Mondino respondió que no se pudo identificar si participan civiles o militares porque «son todos chinos, son todos iguales». La Estación de Espacio Lejano en Neuquén es una instalación de cooperación tecnológica espacial entre ambos países, destinada sólo a la investigación científica.
Tras pronunciar la frase, fue acusada de “discriminadora” y “xenófoba”. El jueves dijo al diario conservador La Nación que: “Son todos iguales, son todos civiles. Son todos iguales los que participaron. Estábamos hablando de la visita a la estación espacial, fue hace pocos días y lo que destaqué fue la naturaleza civil del personal, que no había uniformes. Los argentinos también eran todos iguales, ninguno uniformado”
El 12 de marzo pasado la jefa del Comando Sur de EEUU, la general Laura Richardson, de visita en Argentina, mostró su preocupación por «una estación espacial profunda en Argentina, lo que proporciona a China capacidades globales de seguimiento y vigilancia espacial, que podrían traducirse en capacidades militares globales».
Los planes de la canciller vienen encausados en la turbulenta relación con el gigante asiático, el fetichismo con Taiwán, la obediencia a Estados Unidos y el desprecio a los BRICs. No es fácil su tarea, ya que tiene grandes desafíos por delante, entre ellos atajar o barajar los exabruptos de su jefe libertario contra los mandatarios que no le caen bien y con quienes suele agredir verbalmente y desatar conflictos diplomáticos.
Pero también mantener un vínculo sin sobresaltos con el Ministerio de Economía y sobre todo, ser cautelosa con sus performances clasistas en un país en donde más de la mitad de población está bajo la línea de pobreza.
Mondino, siguiendo la línea de la ultraderecha, rechaza las instituciones de cooperación internacional que van más allá de su ideología -como los BRICS, el Mercosur o la ONU-. Es antiglobalista porque es un lineamiento que se basa en el rechazo a la diversidad cultural y socioeconómica que viene con la globalización.
Banquera por herencia (conserva la mayoría accionaria del Banco Roela), ultraderechista por decisión propia y carente de empatía como buena integrante de una elite que quizá entiende las finanzas pero no la vida -habla de los jubilados como si ella tuviera 20 años y los manda a morir en silencio- es tan militante con el alineamiento con Washington que cortó relaciones con China sin pensar en las consecuencias que ahora lamentan en el ministerio de Economía.
Los planes de la canciller vienen encausados en la turbulenta relación con el gigante asiático, el fetichismo con Taiwán, la obediencia a Estados Unidos y el desprecio a los BRICs. No es fácil su tarea, ya que tiene grandes desafíos por delante, entre ellos atajar o barajar los exabruptos de su jefe libertario contra los mandatarios que no le caen bien y con quienes suele agredir verbalmente y desatar conflictos diplomáticos.
Pero también mantener un vínculo sin sobresaltos con el Ministerio de Economía y sobre todo, ser cautelosa con sus performances clasistas en un país en donde más de la mitad de población está bajo la línea de pobreza.
Mondino, siguiendo la línea de la ultraderecha, rechaza las instituciones de cooperación internacional que van más allá de su ideología -como los BRICS, el Mercosur o la ONU-. Es antiglobalista porque es un lineamiento que se basa en el rechazo a la diversidad cultural y socioeconómica que viene con la globalización.
Banquera por herencia (conserva la mayoría accionaria del Banco Roela), ultraderechista por decisión propia y carente de empatía como buena integrante de una elite que quizá entiende las finanzas pero no la vida -habla de los jubilados como si ella tuviera 20 años y los manda a morir en silencio- es tan militante con el alineamiento con Washington que cortó relaciones con China sin pensar en las consecuencias que ahora lamentan en el ministerio de Economía.
Las provocaciones de Mondino costaron la suspensión del Swap con China, que permite al país pagar parte de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en yuanes, un mecanismo que funcionó incluso durante la presidencia del neoliberal Mauricio Macri. Y ello obligó al ministro de Economía, Luis Caputo, a salir a buscar una alternativa tomando deuda con el CAF (Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe).
El opositor diario Página12 habla de “Mondino y su brutalidad” y señala que la ministra exhibió su intelecto en la cumbre de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que se celebra en París, donde confesó que no puede distinguir las profesiones de los chinos porque, para ella, tienen el mismo aspecto físico. Lo hizo después de mantener una gira justamente por China, con la intención de negociar el swap con el gigante asiático por seis mil millones de dólares.
No es que sea joven. A sus 65 años quiere explicar con una sonrisa por qué es absurdo que los jubilados tengan acceso a un crédito: “si sos un jubilado del Mileinato: monetizar la vida al máximo y que eso sea por definición el criterio de lo que sirve y lo que no, según cómo se venda o cómo se pueda pagar.
El opositor diario Página12 habla de “Mondino y su brutalidad” y señala que la ministra exhibió su intelecto en la cumbre de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que se celebra en París, donde confesó que no puede distinguir las profesiones de los chinos porque, para ella, tienen el mismo aspecto físico. Lo hizo después de mantener una gira justamente por China, con la intención de negociar el swap con el gigante asiático por seis mil millones de dólares.
No es que sea joven. A sus 65 años quiere explicar con una sonrisa por qué es absurdo que los jubilados tengan acceso a un crédito: “si sos un jubilado del Mileinato: monetizar la vida al máximo y que eso sea por definición el criterio de lo que sirve y lo que no, según cómo se venda o cómo se pueda pagar.
Mondino con Cameron
Tampoco es novedoso para los argentinos el realineamiento del gobierno con EEUU. Milei quiere emular las relaciones carnales que mantuvo Carlos Menem en los años 90. Es por eso mismo que, desde hace semanas, el Gobierno amaña todo lo referido a la base científica que Argentina comparte con China en la sureña provincia de Neuquén, al punto de mandar una delegación a investigar si se hay algo oculto, pese a que los chinos comparten todos los resultados de las investigaciones con los organismos nacionales.
Mondino dijo que las quejas formales del país contra el Reino Unidos son, apenas, «cartitas», y que si se tiene que enfrentar con su par inglés en lo relativo a las Islas Malvinas (cuya sobernaía reclama Argentina), lo mejor es hacerlo con sus «chicanas tuiteras». Fue en oportunidad del viaje del canciller británico David Cameron a la islas.
La canciller dijo que «no había muchas opciones» para una acción de la Cancillería, porque «no pasan por territorio argentino para ir. ¿Qué le vamos a hacer, con un misil bajar el avión?», comentó, con una sonrisa.
*Periodista argentino, analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)
Tampoco es novedoso para los argentinos el realineamiento del gobierno con EEUU. Milei quiere emular las relaciones carnales que mantuvo Carlos Menem en los años 90. Es por eso mismo que, desde hace semanas, el Gobierno amaña todo lo referido a la base científica que Argentina comparte con China en la sureña provincia de Neuquén, al punto de mandar una delegación a investigar si se hay algo oculto, pese a que los chinos comparten todos los resultados de las investigaciones con los organismos nacionales.
Mondino dijo que las quejas formales del país contra el Reino Unidos son, apenas, «cartitas», y que si se tiene que enfrentar con su par inglés en lo relativo a las Islas Malvinas (cuya sobernaía reclama Argentina), lo mejor es hacerlo con sus «chicanas tuiteras». Fue en oportunidad del viaje del canciller británico David Cameron a la islas.
La canciller dijo que «no había muchas opciones» para una acción de la Cancillería, porque «no pasan por territorio argentino para ir. ¿Qué le vamos a hacer, con un misil bajar el avión?», comentó, con una sonrisa.
*Periodista argentino, analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)