5 jun 2014

Pinochet financió medios para ocultar operaciones de exterminio

Pinochet financió medios para ocultar operaciones de exterminio

La policía secreta chilena de Augusto Pinochet (DINA) financió en 1975 operaciones de la Junta Militar y de otros organismos estatales para ocultar crímenes de lesa humanidad y de terrorismo de Estado, divulgan hoy aquí dos diarios argentinos. Los pagos a la prensa los hizo a través de una millonaria cuenta bancaria, que estuvo a nombre de una ficticia Dirección Nacional de Rehabilitación (Dinar).
Su titular era el coronel Manuel Contreras, entonces jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), actualmente condenado por violaciones a los derechos humanos a más de 300 años, coinciden en reportar Tiempo Argentino y Página 12.
De acuerdo con los cheques, que llevaban la firma de Contreras y están incluidos en un informe de la Corte Suprema anexo a la causa por el asesinato del excanciller Orlando Letelier, la DINA hizo también numerosos pagos a los principales diarios, revistas y agencias de noticias de la época, precisa Página 12.
Sin embargo, los nombres de esos medios no fueron aún revelados.
Las sumas de dinero giradas desde esa cuenta bancaria a diversos organismos demuestran que el plan de exterminio que existió en Chile fue una acción de carácter institucional del Estado, aseguró Mireya García, vicepresidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD).
Todos los documentos llevan la firma de Contreras y, según indicaron dirigentes de organizaciones de derechos humanos, desmienten lo sostenido hasta ahora por las Fuerzas Armadas, en cuanto a que jamás se relacionaron institucionalmente con la policía secreta y que sus crímenes fueron hechos individuales.
El esquema utilizado para financiar clandestinamente su aparato represivo y ocultar su funcionamiento quedó al descubierto la víspera al conocerse documentos del expediente que investiga el asesinato del excanciller del gobierno de la Unidad Popular, Orlando Letelier, ocurrido en Washington en 1976, resalta por su parte Tiempo Argentino.
PL