CORRUPCIÓN EN BRASIL: DESVÍOS POR MÁS DE US$ 3.000 MILLONES EN COIMAS
El escándalo que sacude Brasil desde hace varios meses por desvíos millonarios en la petrolera Petrobras, mayor empresa del país, se agravó con el arresto de un exdirector de la estatal y de ejecutivos de nueve importantes empresas nacionales.
Renato Duque en el momento de ser arrestado por la Policía. Foto: O Globo / GDA
El exdirector de Servicios de Petrobras Renato Duque fue detenido en Río de Janeiro en una nueva fase de la operación de la Policía Federal conocida como “Lava Jato”, iniciada en marzo y que este viernes movilizó a 300 agentes en seis estados brasileños para cumplir 85 órdenes de captura.
La petrolera estatal está en el centro de las investigaciones de la operación y, según las autoridades, el esquema de corrupción movilizó en términos de lavado de dinero y de sobrefacturación unos 10.000 millones de reales (unos 3.850 millones de dólares).
“En total, 300 policías federales, con el apoyo de 50 funcionarios de la Hacienda Federal, cumplen 85 mandatos judiciales: 6 de prisión preventiva, 21 de prisión temporal, 9 de conducta coercitiva y 49 de busca y captura en los estados de Paraná, São Paulo, Río de Janeiro, Minas Gerais, Pernambuco, así como en el Distrito Federal. Entre las órdenes de registro, 11 están siendo realizadas en grandes empresas”, informó la Policía Federal en un comunicado. Con el arresto de Duque, director de Servicios entre 2003 y 2012, ya son dos los antiguos jerarcas de la petrolera estatal brasileña Petrobras que han sido detenidos por formar parte de esta trama de lavado de dinero.
En el marco de las investigaciones sobre lavado, la Policía Federal detuvo hace unos meses al exdirector de Abastecimiento de Petrobras, Paulo Roberto Costa, quien aceptó colaborar con la Justicia en la investigación a cambio de una reducción de pena.
Costa, quien durante años fue uno de los principales ejecutivos de la empresa, denunció un aumento ilegal del precio de varias obras y operaciones de compra de refinerías, además de cobros adicionales en contratos con terceras empresas, con el objetivo de alimentar una red de sobornos a políticos y partidos.
En su declaración, delató a supuestos beneficiarios de la red de corrupción a cambio de una reducción de condena y reveló tener conocimiento de irregularidades practicadas en la Dirección de Servicios de Petrobras en la época en la que Renato Duque tenía el control.
Además de Duque, la operación de ayer tuvo como blanco ejecutivos de las principales empresas acusadas de ofrecer sobornos equivalentes al 3 % de cada contrato que, según Costa, eran pagos a directivos de Petrobras.
Entre los detenidos figuran ejecutivos de las constructoras Odebrecht, Mendes Junior, Iesa y UTC.
La Justicia del estado de Paraná, responsable del proceso, ordenó el bloqueo de aproximadamente 720 millones de reales (unos 277,2 millones de dólares) en bienes de propiedad de 36 de los investigados.
El escándalo de corrupción de Petrobras fue uno de los temas más debatidos en la campaña electoral para los comicios del mes pasado, en los cuales fue reelegida la presidenta Dilma Rousseff, quien llegó a ser acusada por una revista de conocer el esquema de corrupción junto con su antecesor y mentor político, Luiz Inácio Lula da Silva.
En medio de esta novela, Petrobras anunció el jueves que solo divulgaría sus resultados trimestrales en diciembre ante la posibilidad de que tenga que ajustarlos por los desvíos, aunque ayer se retractó debido a la negativa reacción del mercado por las dudas generadas entre los inversores.
MERCADOS REACCIONAN.
Las acciones de la empresa abrieron ayer con fuertes caídas en la bolsa de San Pablo, del 4,77 % las preferenciales y del 5,17 % las ordinarias, por lo que la empresa anunció que el próximo lunes presentará sus resultados en el tercer trimestre aunque no hayan sido revisados por los auditores externos que contrató para determinar si los desvíos descubiertos en los últimos meses afectaron sus finanzas.
La estatal admitió que pasa por un momento único en su historia debido a las investigaciones de millonarios desvíos que pueden afectar sus resultados. Subrayó, además, que espera “alcanzar una mayor profundidad en las investigaciones de las empresas independientes de auditoría” que le permitan realizar “eventuales ajustes en las demostraciones contables generadas por las denuncias y las investigaciones”.
El Tribunal de Cuentas de Brasil calcula que los desvíos en Petrobras le costaron a las arcas públicas cerca de 3.000 millones de reales (unos 1.150 millones dólares) en los últimos años.
A causa de los escándalos de corrupción, Petrobras informó en la noche del jueves que no entregaría en el plazo previsto los resultados financieros del tercer trimestre y que el 12 de diciembre solo divulgaría “informaciones contables aún no revisadas por auditores externos” relativas al tercer trimestre. La auditora Pricewaterhouse Coopers (PcW), escogida por Petrobras para certificar sus resultados, decidió no firmar el balance del tercer trimestre a la espera de más informaciones sobre proyectos que podrían verse afectados por las denuncias de corrupción y sobornos realizadas por Costa.
La Bolsa de San Pablo venía registrando fuertes vaivenes en los últimos días, sobre todo por la incertidumbre reinante en cuanto al rumbo de la economía para el segundo mandato de Dilma Rousseff.
Los principales inversores aguardaban con fuerte expectativa que la presidenta brasileña anunciara el nombre de quien sustituiría al actual ministro de Hacienda, Guido Mantega, quien ya había anunciado su retiro. Desde fuentes muy cercanas a Rousseff había trascendido a principios de esta semana que el nombramiento recaería sobre el veterano banquero y expresidente del Banco Central de Brasil durante el mandato de Lula Da Silva, Henrique Meirelles, un nombre que cuenta con la aprobación de los operadores financieros.
Sin embargo la dilación en el nombramiento trajo una mayor incertidumbre que se reflejó en la caída del principal índice bursátil, el Bovespa, el jueves. Ayer las noticias sobre el escándalo de Petrobras volvieron a provocar otra caída en los maltrechos mercados brasileños.
Las acciones de la empresa abrieron ayer con fuertes caídas en la bolsa de San Pablo, del 4,77 % las preferenciales y del 5,17 % las ordinarias, por lo que la empresa anunció que el próximo lunes presentará sus resultados en el tercer trimestre aunque no hayan sido revisados por los auditores externos que contrató para determinar si los desvíos descubiertos en los últimos meses afectaron sus finanzas.
La estatal admitió que pasa por un momento único en su historia debido a las investigaciones de millonarios desvíos que pueden afectar sus resultados. Subrayó, además, que espera “alcanzar una mayor profundidad en las investigaciones de las empresas independientes de auditoría” que le permitan realizar “eventuales ajustes en las demostraciones contables generadas por las denuncias y las investigaciones”.
El Tribunal de Cuentas de Brasil calcula que los desvíos en Petrobras le costaron a las arcas públicas cerca de 3.000 millones de reales (unos 1.150 millones dólares) en los últimos años.
A causa de los escándalos de corrupción, Petrobras informó en la noche del jueves que no entregaría en el plazo previsto los resultados financieros del tercer trimestre y que el 12 de diciembre solo divulgaría “informaciones contables aún no revisadas por auditores externos” relativas al tercer trimestre. La auditora Pricewaterhouse Coopers (PcW), escogida por Petrobras para certificar sus resultados, decidió no firmar el balance del tercer trimestre a la espera de más informaciones sobre proyectos que podrían verse afectados por las denuncias de corrupción y sobornos realizadas por Costa.
La Bolsa de San Pablo venía registrando fuertes vaivenes en los últimos días, sobre todo por la incertidumbre reinante en cuanto al rumbo de la economía para el segundo mandato de Dilma Rousseff.
Los principales inversores aguardaban con fuerte expectativa que la presidenta brasileña anunciara el nombre de quien sustituiría al actual ministro de Hacienda, Guido Mantega, quien ya había anunciado su retiro. Desde fuentes muy cercanas a Rousseff había trascendido a principios de esta semana que el nombramiento recaería sobre el veterano banquero y expresidente del Banco Central de Brasil durante el mandato de Lula Da Silva, Henrique Meirelles, un nombre que cuenta con la aprobación de los operadores financieros.
Sin embargo la dilación en el nombramiento trajo una mayor incertidumbre que se reflejó en la caída del principal índice bursátil, el Bovespa, el jueves. Ayer las noticias sobre el escándalo de Petrobras volvieron a provocar otra caída en los maltrechos mercados brasileños.
US$ 100: EMBOLSÓ UN SOCIO
Solo uno de los cómplices de Renato Duque, el exdirector de Petrobras arrestado ayer por la Policía Federal, recibió US$ 100 millones, según reveló una fuente del caso a O Globo. Los fiscales y el grupo de tareas de la Policía Federal que trabajan en la operación han identificado la supuesta participación de Duque en al menos nueve transacciones financieras relacionadas con la malversación de los acuerdos de los contratistas con Petrobras.
En al menos siete de ellos, habría recibido una parte del dinero. Según uno de los investigadores, son sumas significativas. Los investigadores sospechan que parte del dinero acumulado en el área que dirigía Duque alimentó las arcas del PT. Durante la pesquisa, los investigadores obtuvieron detallada información sobre el supuesto pago de sobornos a Duque y otros altos funcionarios de los datos de Petrobras.
O Globo | GDA
Solo uno de los cómplices de Renato Duque, el exdirector de Petrobras arrestado ayer por la Policía Federal, recibió US$ 100 millones, según reveló una fuente del caso a O Globo. Los fiscales y el grupo de tareas de la Policía Federal que trabajan en la operación han identificado la supuesta participación de Duque en al menos nueve transacciones financieras relacionadas con la malversación de los acuerdos de los contratistas con Petrobras.
En al menos siete de ellos, habría recibido una parte del dinero. Según uno de los investigadores, son sumas significativas. Los investigadores sospechan que parte del dinero acumulado en el área que dirigía Duque alimentó las arcas del PT. Durante la pesquisa, los investigadores obtuvieron detallada información sobre el supuesto pago de sobornos a Duque y otros altos funcionarios de los datos de Petrobras.
O Globo | GDA