GUATEMALA
En audiencia de etapa intermedia del Caso “La Línea”, Salvador Estuardo González, también conocido como Eco y expresidente del diario Siglo.21, confirmó las acusaciones del Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), que señalan a Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti de estar a la cabeza y beneficiarse de una estructura de defraudación aduanera y contrabando.“Fui yo quien identificó como Uno y Dos al Presidente -Otto Pérez Molina- y a la Vicepresidenta -Roxana Baldetti- para efectos de distribución del dinero”, declaró González en el Juzgado B de Mayor Riesgo, a cargo del juez Miguel Ángel Gálvez, quien en los próximos días deberá decidir si se realizará un debate en el Caso La Línea.
Las reveladoras declaraciones de Eco apuntan a que Pérez Molina y Baldetti recibían el 50 por ciento del dinero que la estructura percibía por los cobros ilegales que se realizaban a importadores, supuestamente a cambio de facilitar el ingreso de mercancías al país.
En el testimonio, González también aceptó su responsabilidad. “En ese momento tenía que haber dicho que si no está normado, era ilegal; tuve que haber dicho que no -iba a participar- y sin embargo, lo hice”, indicó.
EL CONTACTO CON BALDETTI
En la audiencia Eco declaró que conocía desde su infancia a Juan Carlos Monzón, pero cuando éste ocupaba el cargo de secretario privado de la Presidencia, le recomendó para que pusiera en marcha siete sociedades anónimas que se encontraban a nombre de Baldetti, y posteriormente, para que prestara una asesoría para ayudar a la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) a elevar la recaudación fiscal.
Sin embargo, Eco dijo que en la SAT las cosas cambiaron. “Entre lo que se me pidió que hiciera a lo que terminé haciendo, fue una diferencia muy grande (…) se trató de darle apariencia de legalidad a transacciones que no lo eran”, explicó al juez.
González indicó que le presentaron a Pérez Molina por recomendación de Baldetti, y en esa reunión conoció a Carlos Muñoz, entonces titular de la SAT; entonces fue designado como el encargado del dinero que recibían directamente de los importadores y que no ingresaba al Estado, pues ese cobro supuestamente de “agilización de trámites aduaneros” se transfería a la estructura de defraudación, incluyendo a los entonces presidente y vicepresidenta de la República. “Yo tenía que llevar el control específico de eso”, declaró.
También dio detalles sobre otros señalados en el Caso La Línea, como la entonces intendente de Aduanas, Claudia Méndez, a quien supuestamente se le entregó dinero; y su relación con Osama Aranki y Javier Ortiz, alias el Teniente Jerez.
Tras un receso de 45 minutos otorgado por el juez Galvéz, González continuó su declaración. Indicó que “pasé del remordimiento al arrepentimiento” después de ser capturado.
Asimismo detalló cómo se repartía el 61 por ciento del que los fiscales del MP hacían referencia. Según dijo, el 50 por ciento se lo entregaba a Juan Carlos Monzón, que a palabras del exfuncionario, se lo entregaba a Pérez y a Baldetti.
El 5 por ciento restante era para la exintendente de Aduanas, el 4 por ciento, para Juan Carlos Monzón y el 2 por ciento, para él.
Al finalizar, “Eco” indicó que está dispuesto a realizar “los careos que haga falta” y a que la gente que mencionó en sus declaraciones se manifieste. Agregó que fue víctima de sí mismo y pidió disculpas a su familia.
“No me estoy defendiendo, estoy contando los hechos tal y como los viví. Eso es lo que tengo que decir, señor juez” concluyó González.
INTENTARON FRENARLO
Antes de la declaración de González, el abogado Francisco García Gudiel, abogado defensor de Carlos Muñoz, busca frenar la declaración de González, argumentando que se debía suspender la audiencia por faltar tres de los acusados.
Al continuar la apertura del juicio, el juez Gálvez debió aclarar a González que estaba en su derecho de declarar en ese momento procesal pese a que unos abogados defensores habían dicho que no.
EL CASO
Dentro del MP y la CICIG, Eco es señalado como el propietario fachada de las propiedades de la cúpula de la estructura criminal. El 4 de abril del presente año se efectuaron las primeras capturas del caso de defraudación aduanera La Línea. Inicialmente se capturaron 22 personas que fueron trasladadas a Torre de Tribunales, donde la jueza Marta Sierra de Stalling dictó prisión preventiva a todos los implicados, excepto a tres cabecillas.
Salvador González Álvarez, alias Eco, y Francisco Javier Ortiz Arriaga, alias Teniente Jerez, quienes según el Ministerio Público (MP) eran líderes dentro de la red de defraudación aduanera La Línea, quedaron en libertad provisional por orden de la jueza Sierra de Stalling, hasta el 8 de junio que fueron recapturados luego de que la CICIG y el MP dieran a conocer el caso del Bufete de la Impunidad en que la jueza está señalada.
Como evidencia para fundamentar la acusación contra los presuntos integrantes de la estructura, el MP contaba con 88 mil 920 escuchas telefónicas, 5 mil 906 correos electrónicos, 165 mil documentos, 100 informes, 17 allanamientos y 32 agendas.
A la fecha se han agregado a las capturas relacionadas con el caso de La Línea, pero se desconocen pormenores de la mayoría de empresas relacionadas al pago de los sobornos.
Mientras tanto, Juan Carlos Monzón, exsecretario privado de la Vicepresidencia, permanece desaparecido.
La Hora